Youkoso Jitsuryoku Shijou Shugi no Kyoushitsu e Volumen 1 Capítulo 4

AMIGA





— Kikyou-chan, ¿quieres pasar por un café en camino a casa?

— Umm, ¡vamos! Ah, pero espera un poco. Quiero preguntarle a una persona más.

Después de invitar a una de sus amigas, Kushida caminó hacia Horikita mientras ponía un libro en su mochila.

— Horikita-san. Voy al café con mi amiga, ¿quieres venir?

— No me interesa.

Con unas pocas palabras Horikita rápidamente rechazó la invitación de Kushida.

¿No puedes simplemente mentir diciendo que estás planeando ir de compras o que te encontrarás con alguien más? Horikita rechazó sin rodeos su invitación. Sin embargo, Kushida seguía sonriendo.

Esto no era nada nuevo. Desde la ceremonia de entrada, Kushida frecuentemente ha tratado de invitar a Horikita. Pensé que sería bueno para Horikita aceptar de vez en cuando, pero podría ser la perspectiva de un espectador. Sin embargo, nadie ha podido invitar a Horikita con éxito.

— Con que es así… Bueno, te invitaré en otra ocasión.

— Espera un momento, Kushida-san.

Horikita llamó a Kushida. Por casualidad, ¿aceptará la invitación de Kushida?

— Por favor no me invites de nuevo. Es una molestia—. Dijo con un tono frío.

Sin embargo, Kushida no se vio afectada y siguió sonriendo.

— Te invitaré en otra ocasión.

Kushida corrió hacia sus amigas, y salieron por el pasillo.

— Kikyou-chan, por favor deja de invitar a Horikita-san. La odio. 

Cuando la puerta se cerraba, la voz de la chica se escuchó levemente.

Esas palabras debieron ser escuchadas por Horikita, que estaba cerca. Pero no hubo indicios de que lo hubiera hecho

— Tú no dices cosas innecesarias como esa, ¿verdad?

— No. Te entiendo lo suficientemente bien. Es inútil.

— Eso es bueno.

Horikita, que terminó de guardar sus cosas, salió del aula.

Me quedé un rato en el salón, pero me aburrí y me levanté de mi asiento. Hora de ir a casa.

— Ayanokouji-kun, ¿tienes tiempo?

Me encontré con Hirata, que todavía estaba en la escuela. En voz baja, le respondí a Hirata. Es extraño ver a Hirata hablar primero con alguien.

— Se trata de Horikita, me preguntaba si hay algún problema. Las chicas estaban hablando de ella antes. Después de todo siempre está sola.

Rechazando las invitaciones de Kushida, siempre estaba sola.

— ¿No puedes decirle que se lleve mejor con las demás?

— ¿No es cosa de ellas? Además, no está molestando a nadie.

— Por supuesto que lo entiendo. Sin embargo, también hay otras personas que están preocupadas. No quiero que surjan problemas de intimidación en la clase.

¿Acoso? Él me habló de forma inesperada, pero con esas palabras, suena como un mal presagio. ¿Me estás advirtiendo? Hirata me miraba con intenciones puras.

— Creo que es mejor que se lo digas directamente a ella, en lugar de decírselo a través de mí.

— Sí, supongo. Perdón por decir algo extraño.

Horikita está sola todos los días. Si eso continúa, en un mes, ella probablemente se convertirá en el tumor de la clase.

Sin embargo, ya que este es problema personal de Horikita, no es algo con lo que deba involucrarme.



1

Después de salir de la escuela, me dirigí a los dormitorios. Kushida, que se fue antes con una amiga, estaba esperando a alguien mientras estaba apoyada contra la pared. Al notarme, me miró con una sonrisa en la cara.

— Eso es bueno. Estaba esperando a Ayanokouji-kun. Tengo algo de qué hablar. ¿Tienes tiempo?

— Sí, no tengo nada más que hacer.

Por casualidad, ¿es una confesión? No, hay un 1 % de probabilidad de que eso suceda.

— Te preguntaré francamente. Ayanokouji-kun, ¿has visto a Horikita-san sonreír alguna vez?

— ¿Eh? No... no recuerdo.

Parece que Kushida se acercó a mí para hablar de Horikita. Además, ahora que recuerdo, nunca he visto sonreír a Horikita. Agarrando mi mano, se acercó. ¿Es el olor de las flores? Un olor agradable entró por mi nariz.

— Sabes... Quiero hacerme amiga de Horikita-san.

— Tus sentimientos le están llegando. Al principio mucha gente trataba de hablar con ella, pero ahora eres la única que queda. 

— Ayanokouji-kun, pareces conocer a Horikita-san bastante bien.

— Por supuesto que conocerías a alguien que se sienta a tu lado todos los días.

Chicas siendo chicas, estaban realmente impacientes hacer grupos desde del primer día de escuela. Son más conscientes de las facciones y grupos que los hombres, y alrededor de 4 personas tenían todo el "poder" de entre 20. Las chicas dicen que sólo están conociendo a mucha gente.

Sin embargo, la única excepción a esta regla es Kushida. Todos los grupos tienen un montón de gente, pero sólo Kushida está empezando a ser increíblemente popular. Sin renunciar nunca, siguió tratando de ser amiga de Horikita. No es algo que un estudiante común pueda hacer. Probablemente por eso es popular.

Además, es linda.

Después de todo, la lindura se correlaciona con la popularidad.

— ¿No fuiste rechazada por Horikita? No creo que lo que le digas la haga entender.

Sé que ella no es del tipo de andarse con rodeos. Si hablas con ella descuidadamente, probablemente te dirá un montón de insultos. Honestamente, no quiero ver a Kushida lastimada.

— ¿No me… ayudarías?

— Bueno…

No respondí inmediatamente. Por lo general, si una chica linda me pidiera ayuda, estaría de acuerdo sin dudarlo. Sin embargo, como me gusta evitar problemas, no podía decir que sí inmediatamente. Eso es porque no quiero ver a Horikita ofendiendo verbalmente a Kushida. Me rehusaré gentilmente.

— Entiendo tus sentimientos, pero...

— ¿No?

Linda + solicitud + ojos de cachorro = fatal.

— Bueno, no se puede evitar. Sólo esta vez, ¿de acuerdo?

— ¿¡De Verdad!? ¡Ayanokouji-kun, gracias!

Después de que accedí a ayudarla, Kushida tenía una sonrisa encantada en su rostro.

Linda. Ya que dije que la ayudaría, no puedo ser precipitado y hacer algo loco.

— Entonces, ¿qué vamos a hacer exactamente? Incluso si dices que quieres ser su amiga, no es así de simple.

Para alguien como yo que no tiene amigos, es un problema difícil al que no puedo responder fácilmente.

— Hmm... El primer paso es hacer sonreír a Horikita-san.

— Hacerla sonreír, ¿eh?

Hacerla sonreír requiere el ambiente y la atmósfera adecuados para que tengamos éxito.

Ese tipo de relación podría llamarse "amistad".

Afortunadamente, Kushida parece saber cómo hacer sonreír a la gente.

— ¿Tienes alguna idea de cómo hacerla sonreír?

— Um... creí que podíamos pensar juntos.

Con un "Teehee", golpeó ligeramente su cabeza.

Si hubiera sido una mujer fea, la habría golpeado de inmediato, pero estaba bien porque era Kushida.

— Sonreír…

Ya que Kushida me pidió ayuda, mi objetivo ahora es hacer sonreír a Horikita. ¿Esa meta es posible? Muy cuestionable.

— De todos modos, después de la escuela, trataré de invitar a Horikita. Cuando regrese a los dormitorios, probablemente no tenga brazos ni piernas. ¿Hay algún lugar al que deba invitarla?

— Hmm, ¿qué tal Pallet? Voy a Pallet con frecuencia, así que puede que nos haya escuchado hablar de ello.

Pallet es probablemente el primer o segundo café más popular en el campus.

Ciertamente, a menudo escucho hablar de Pallet cuando Kushida y sus amigas van después de la escuela.

Si yo he oído hablar de ello a menudo, Horikita inconscientemente también habría sabido sobre ello.

— ¿Crees que funcionaría si ustedes dos entran en Pallet, ordenan, y luego “inesperadamente” nos encontramos?

— No... Creo que es demasiado simple. ¿Y si tus amigas también ayudan?

Al momento que Horikita vea a Kushida, probablemente regresará a casa inmediatamente. Si es posible, sería mejor crear una situación en la que sea difícil levantarse. Le dije a Kushida la idea que se me acababa de ocurrir.

— Oh~ ¡Ciertamente eso suena como si pudiera funcionar! ¡Ayanokouji-kun, eres inteligente!

Kushida me escuchó con ojos brillantes mientras asintió con la cabeza y dijo "Sí, sí".

— No creo que eso tenga nada que ver con mi inteligencia. De todos modos, ese es el plan.

— Ok, espero mucho, ¡Ayanokouji-kun!

No, estoy preocupado por tus expectativas.

— Si Kushida invita a Horikita, probablemente te rechazaría, así que ¿debería invitarla yo?

— Bien. Después de todo, creo que Horikita-san confía en ti.

— ¿Por qué piensas eso?

— Hmm, bueno, ¿parece que ella lo hace? Por lo menos, ella confía en ti más que en cualquier otro de la clase.

Eso no significa que yo sea la persona más apropiada para la tarea.

— Eso es porque la conocí por casualidad.

La conocí en el autobús por casualidad y me senté al lado de ella por casualidad.

Si una de esas cosas no hubiera ocurrido, probablemente no hablaría con Horikita en absoluto.

— ¿No conoces a las personas por casualidad? Luego se convierten en tus amigos, tu mejor amigo... y a veces tu pareja y tu familia.

— Ya veo.

Supongo que esa es una forma de verlo. Hablar con Kushida también fue el resultado de una coincidencia.

En otras palabras, Kushida y yo podríamos estar en una relación en poco tiempo.



2

Fue al terminar las clases. Todos los estudiantes se marcharon a su divertida vida después de la escuela, mientras hablaban de adónde ir. Miré a Kushida y le señalé que estaba comenzando el plan.

Horikita, el objetivo, había comenzado su rutina habitual de prepararse para ir a casa.

— Oye, Horikita. ¿Estás libre?

— No tengo tiempo de sobra. Tengo que volver a los dormitorios y prepararme para mañana.

¿Prepárate para mañana? Estoy bastante seguro de que sólo tiene que prepararse para la escuela.

— Quiero que vayas a un lugar conmigo.

— ¿Qué estás tratando de hacer?

— ¿Crees que te estoy invitando con un objetivo particular en mente?

— Si me invitaste repentinamente, es natural dudar de ti. Sin embargo, si hay algo concreto de lo necesitas hablar, no me importaría escuchar.

Por supuesto, no hay tal cosa.

— ¿Sabes que hay un café en el campus? Hay demasiadas chicas, así que no tengo el coraje de entrar yo solo. Se siente como si los chicos están siendo excluidos.

— Ciertamente la proporción de chicas es alta, pero ¿no pueden entrar los chicos también?

— Sí, pero ningún chico entra solo. Siempre van con otras chicas. Sólo ese tipo de chicos va al café.

Horikita trató de recordar información sobre Pallet mientras reflexionaba sobre ella.

— Eso suena correcto. Es inusual que Ayanokouji-kun tenga una opinión razonable.

— Pero aun así estoy interesado en el lugar. Así que pensé en invitarte a venir conmigo.

— Naturalmente, ya que... no tienes a nadie más a quien invitar, ¿verdad? 

— Esa es una manera ruda de decirlo, pero sí. 

— ¿Y si me niego?

— Entonces eso es todo. No tengo más remedio que rendirme. Después de todo no puedo forzarte a renunciar a tu tiempo privado.

— Entendido. Lo que dijiste parece ser cierto. Sin embargo, no puedo pasar demasiado tiempo. ¿Está bien?

— Sí. No estaré allí mucho tiempo.

Añadí "probablemente" en mi mente. Si sabía que Kushida estaba involucrada, seguramente me reprocharía.

Debido a que puedo hablar con Kushida y fui capaz de invitar a Horikita, comencé a pensar que tal vez podría haberme convertido en amigo de Horikita por mis propios medios.

Después de todo, a los clubs o al café, Horikita fue conmigo, a pesar de quejarse todo el tiempo. Es un milagro considerando que me resulta difícil hacer amigos.

Después de salir juntos, finalmente llegamos al café, Pallet, en el primer piso del edificio de la escuela.

Las chicas comenzaron a reunirse una por una para divertirse después de la escuela.

— Parece bastante lleno. 

— ¿También es tu primera vez aquí después de la escuela? Oh, cierto. Siempre estás sola.

— ¿Era eso sarcasmo? Infantil.

Era sólo una broma, pero como de costumbre, Horikita me insultó verbalmente.

Después de pedir, nos dieron nuestras bebidas. Pedí panqueques.

— ¿Te gusta la comida dulce?

— Sólo quería comer panqueques.

No me gustaban o disgustaban especialmente, pero acabo de inventar una razón plausible.

— No hay asientos.

— Supongo que tendremos que esperar un poco. Ah, no importa, hay asientos por allí.

Después de notar que dos chicas se levantaron de sus asientos, rápidamente aseguré la mesa. Dejé que Horikita pasara al otro lado. Colocando mi mochila en el suelo, me senté y miré a mi alrededor.

— Oye, me acabo de dar cuenta. Si alguien nos mira de lejos, pareceríamos una pareja... no.

El rostro de Horikita era inexpresivo y gélido como siempre. Sintiéndome nervioso por los alrededores, mi estómago empezó a doler.

Escuché a dos chicas a nuestro lado decir "Vamos" mientras sostenían bebidas en sus manos.

E inmediatamente después, otra persona se sentó. Era Kushida.

— Ah, Horikita-san. ¡Qué casualidad! ¡Ayanokouji-kun también!

— Sí.

Kushida nos saludó, pretendiendo que nos encontramos por casualidad. Horikita miró a Kushida con los ojos entrecerrados, luego se volvió hacia mí. Por supuesto, esto era algo que habíamos planeado antes. Reservamos dos mesas con cuatro de las amigas de Kushida, y luego, cuando Horikita y yo llegamos a Pallet, les indiqué que hicieran lugar para nosotros dos. Después de un rato, las otras dos se irían para que Kushida pudiera llegar.

Como resultado, nuestra reunión parecía una coincidencia.

— ¿Ayanokouji-kun y Horikita-san vinieron juntos?

— Por pura casualidad, sí. ¿Viniste sola?

— Sí, hoy yo-

— Me voy a casa.

— O-oye, acabamos de llegar. 

— No me necesitas ahora que Kushida-san está aquí, ¿verdad?

— No, no eres un problema. Después de todo Kushida y yo sólo somos compañeros de clase.

— Tú y yo también somos sólo “compañeros de clase”. Además—… Ella nos miró a mí y a Kushida fríamente—. No me gusta esto. ¿Qué estás planeando?

Parece que vio a través de nuestro plan.

— N-no, ¡es sólo una coincidencia!

Si era posible, no quería que esto sucediera.

Lo correcto habría sido hacer un pequeño encogimiento de hombros y decir, "¿Qué quieres decir?"

— Cuando estábamos sentados, las dos chicas antes de nosotros eran de la clase D. Y luego, las dos que estaban a nuestro lado también eran de la clase D. ¿Es sólo una coincidencia?

— Wow, notaste eso... yo no me di cuenta en absoluto.

— Además, vinimos directamente aquí tan pronto acabó la escuela. No importa lo rápido que las otras chicas llegaran aquí, estuvieron quizás 1, 2 minutos como máximo. Es demasiado pronto para volver a casa. ¿Me equivoco?

Horikita es una persona mucho más observadora de lo que pensaba.

No sólo recordaba los rostros de sus compañeras de clase, sino que comprendía lo que sucedía casi al instante.

— Um...

Sintiéndose perpleja, Kushida me miró en busca de ayuda.

Horikita notó que me miraba. La actuación había terminado.

— Lo siento, Horikita. Arreglamos esto.

— Ya me lo imaginaba. La situación me hizo pensar que algo era sospechoso.

— Horikita-san. ¡Por favor, se mi amiga!

Kushida le preguntó directamente, ya no intentaba ocultar nada.

— Ya lo he dicho muchas veces, déjame en paz. No tengo intención de convertirme en una molestia para la clase. ¿Eso no está permitido?

— Pasar el tiempo siempre sola conducirá a una vida escolar solitaria y triste. Quiero llevarme bien con todos en la clase.

— No estoy tratando de negar tus deseos. Sin embargo, es malo involucrar a otras personas contra su voluntad. No me siento triste por estar sola.

— P-pero…

— También, por el bien de la discusión, ¿crees que sería feliz si me obligas a llevarme bien contigo? ¿Crees que amistad o confianza resultarán de una relación forzada?

Las palabras de Horikita no están equivocadas. No es que no quiera hacer amigos, es que siente que son innecesarios. Kushida piensa de una forma, Horikita piensa de otra manera.

— Esta vez, fue mi culpa por no decírtelo claramente. Así que no te culparé. Sin embargo, si lo intentas de nuevo, no te perdonaré la próxima vez.

Agarró su café latte intacto y se levantó.

— Quiero llevarme bien con Horikita-san por cualquier medio. Cuando te vi por primera vez, no sentí que fuera nuestro primer encuentro, creo que Horikita-san se sintió de la misma manera.

— Esto es una pérdida de tiempo. Me estás haciendo sentir incómoda.

Horikita la interrumpió mientras levantaba la voz. Kushida involuntariamente tragó saliva.

Aunque estuve de acuerdo en ayudar a Kushida, no tenía intención de interferir. Sin embargo—

— No es que no pueda entender la manera de pensar de Horikita. También he cuestionado si los amigos son necesarios en varias ocasiones.

— ¿Estás diciendo eso? Desde el primer día de clases has querido amigos.

— No estoy negando eso. Sin embargo, soy el mismo tipo de persona que tú. Al menos hasta que me gradué de la secundaria. Nunca había podido hacer amigos hasta que entré en esta escuela. Nunca había sabido la dirección de contacto de nadie, ni jugado con nadie después de la escuela. Estaba completamente solo—. Kushida se sorprendió cuando dije esas palabras—. Creo que por eso empecé a hablar mucho contigo.

— Eso es nuevo. Sin embargo, incluso si tenemos algo en común, todo lo que viene después es diferente. No hiciste amigos aunque quisieras amigos. No hice amigos porque son innecesarios. Decir que somos similares es incorrecto. ¿Me equivoco?

— Tal vez. Pero decirle a Kushida que es incómoda es ir demasiado lejos. ¿Estás realmente bien con eso? Decir que no te llevas bien con nadie ahora significa que estarás sola los próximos 3 años. Es mucha soledad para el futuro.

— Estoy bien porque será mi noveno año consecutivo. Ah, si incluyes el jardín de niños es aún más.

¿Acaso dejó caer algo intenso? ¿Se queda sola todo el tiempo porque ha estado sola tanto como puede recordar?

— ¿Me puedo ir a casa ahora?

Horikita soltó un profundo suspiro y miró directamente a los ojos de Kushida.

— Kushida-san, si no te convences, no diré nada. Prométeme. Ya que no eres estúpida, sabes lo que estoy diciendo, ¿verdad?

Horikita salió de la tienda con un "Pues bien". Ella nos dejó a Kushida y a mí en el atestado café.

— Eso fue un fracaso. Traté de ayudar pero no sirvió. Se acostumbró demasiado a estar sola.

Kushida, que no podía decir nada, se sentó de golpe. Sin embargo, ella se recuperó inmediatamente con su habitual rostro sonriente.

— No, gracias Ayanokouji-kun. No pude ser su amiga, pero... aprendí algo importante. Estoy satisfecha con eso. Lo siento, Horikita-san podría odiarte porque me ayudaste.

— No te preocupes. También quería que Horikita supiera los beneficios de tener amigos.

Debido a que teníamos cuatro asientos para nosotros dos, me trasladé a la mesa de Kushida.

— Aun así, me sorprendió. Cuando dijiste que no tenías amigos. ¿Es eso cierto? No parecía así en absoluto. ¿Por qué estabas solo?

— ¿Hmm? Oh, es verdad. Sudou, Ike y compañía son los primeros amigos que hice. No sé si fue mi culpa o simplemente el ambiente en el que crecí.

— ¿Estás feliz porque hiciste amigos? ¿Es divertido?

— Sí. Es molesto a veces, pero también es muy divertido.

Los ojos de Kushida brillaban mientras ella asentía con la cabeza y decía “Sí, sí”

— Horikita tiene un concepto y propósito para su manera de pensar. No hay nada que podamos hacer al respecto. 

— ¿Es así? ¿Es imposible para ella hacer amigos?

— ¿Por qué estás tan desesperada? ¿No tienes ya muchos amigos? No hay razón para obsesionarse con Horikita.

A pesar de que no era capaz de llevarse bien con todos en la clase, no significa que deba tratar desesperadamente de convertirse en amiga de Horikita.

— Yo quiero ser amiga de todo el mundo. No sólo la clase D, sino también con todas las demás clases. Sin embargo, si no puedo llevarme bien con una chica de la clase, entonces ya he fallado.

— Piensa en Horikita como un ser especial. Y luego espera a que ocurra una verdadera coincidencia.

No algo forzado, sino una verdadera coincidencia.

Cuando eso sucede, hacerse amigos puede convertirse en una posibilidad.



No hay comentarios.:

Publicar un comentario