CONFUSIÓN
Tras finalizar la ceremonia de apertura en el gimnasio, los nuevos alumnos de tercer año regresaron a clase.
Unos minutos más tarde, el timbre de la segunda hora estaba a punto de sonar.
—...Es extraño.
Horikita ladeó la cabeza, mirando varias veces hacia el pasillo.
—¿Qué pasa? ¿Estás preocupada por algo?
Sudou, que había tomado asiento diagonalmente detrás de ella, preguntó con un deje de preocupación.
—No he visto a Ayanokouji-kun desde que terminó la ceremonia de apertura. Ya es hora de empezar las clases y todavía no ha llegado.
Como de costumbre, todos estaban presentes en el aula-excepto Ayanokouji.