LAS DIFICULTADES DE LA SALVACIÓN
Revisé mi teléfono cuando me desperté a la mañana siguiente.
Y, por supuesto, el chat grupal del grupo Ayanokouji se incrementó mucho mientras dormía.
Ni siquiera había pasado un día entero desde que Chabashira-sensei aninció el examen suplementario, por lo que era comprensible que estuviera en el centro de su discusión.
—En verdad son impulsados por su ansiedad, ¿no?
La preocupación de Airi era particularmente obvia dada la forma en que había escrito sus mensajes.
Las cosas se complicarían si alguien de nuestro grupo se convertía en un objetivo. No estaba seguro de cuánto me iba a involucrar, y también era cierto que era una situación difícil de contrarrestar. Aunque mi intención era hacer los arreglos necesarios para Hirata y Kei, no había garantías.
Aunque se amenace a alguien y se le obligue a llegar a un acuerdo, existe la posibilidad de que cambie su voto en el último minuto. Simplemente no hay forma segura de evitar la expulsión si eres el blanco de un gran número de votos de desaprobación.
En cualquier caso, todo el mundo tenía que sufrir al menos una cierta cantidad de riesgo.
Mientras me desplazaba por los mensajes, había una interesante propuesta de Keisei. Empecé a leer desde allí.
Keisei: [¿Qué les parece si uno de nosotros va a la escuela temprano durante los próximos tres días para recopilar información?]
Akito: [Ya que somos un grupo tan pequeño, sería una buena idea. Estoy contigo].
Haruka: [Esa podría ser una buena jugada. Tengo curiosidad por saber qué tipo de cosas dirán otros grupos].
Airi: [Yo también estoy de acuerdo.]
Haruka: [Lo haré mañana ya que saldré temprano.]
Todos llegaron unánimemente a un acuerdo. Hablaron de esperar para escuchar mi opinión sobre el asunto, pero como por lo general tardaba un poco en revisar mi teléfono, al final decidieron seguir adelante con ello y ver qué pensaba más tarde.
—Ya veo.
Aunque no creía que la información cayera en nuestras manos tan fácilmente, era mejor que no hacer nada.
Como estrategia, no sólo era simple, sino que los resultados potenciales también valían la pena.
Como toda la conversación había ocurrido anoche, Haruka probablemente ya estaba en el aula.
Dada la fluidez de su conversación, parecía que los demás asumirían el papel de ir a la escuela temprano durante los otros dos días, así que sin duda estaría bien aunque yo no hiciera nada.
La votación tendrá lugar en tres días. En otras palabras, los detalles sobre en quiénes íbamos a centrar nuestros votos de desaprobación tendrían que estar listos para hoy a más tardar. Por el momento, sería una suerte si el grupo Ayanokouji pudiera obtener información valiosa por las mañanas, como planeó Keisei.
Por el momento, mientras esperaba la respuesta de Kei sobre las chicas de la clase, pensé en buscar información sobre los chicos de Horikita, que reinaba sobre Sudou, o de Hirata.
Después de todo, es importante conocer la información lo antes posible.
PARTE 1
Sentía que finalmente me estaba acostumbrando a mi vida cotidiana aquí.
Sin darme cuenta, había pasado casi un año completo desde que empecé a vivir en los dormitorios.
—Se siente como si el tiempo ya no pasara como antes.
El paso del tiempo se siente diferente dependiendo de lo mucho que estés disfrutando.
Honestamente, cuando me enteré por primera vez de este fenómeno, no entendí muy bien su significado.
Antes de empezar la preparatoria, cada segundo de mi vida se sentía exactamente igual. Pero ahora, era diferente.
Obviamente, los días seguían pasando a la misma velocidad de siempre. Quedaban aún dos años para la graduación.
Pero era extraño. Cuanto más lo pensaba, más sentía que el día de la graduación llegaría en un abrir y cerrar de ojos.
—¡Buenos días, Ayanokouji-kun~!
Escuché a Ichinose llamarme por la espalda tan pronto como salí. Debe ser porque los dos nos íbamos a la escuela a la misma hora todas las mañanas. Miré detrás de mí y le respondí.
—Ah. Buenos días, Ichinose.
Por extraño que parezca, tan pronto como la llamé, Ichinose se quedó rígida.
—¿Hmm?
Estaba perfectamente quieta, congelada con la mano en alto.
—¿Qué pasa?
Mi pregunta pareció sacarla del trance en el que se encontraba mientras caminaba. Aunque, sus movimientos eran todavía un poco rígidos en algunos aspectos.
—Vaya, uhh.... hace bastante frío hoy otra vez, ¿eh?
—Supongo que sí.
Nuestra respiración era visible en el aire mientras hablábamos.
—¿Planeabas caminar a la escuela con alguien?
—En absoluto. Suelo estar solo por las mañanas.
—Bueno, entonces... ¿te importa si me uno a ti?
Es probable que no haya ni un solo estudiante capaz de rechazarla cuando lo pide así.
Respondí asintiendo con la cabeza.
—…
—……
Cuando los dos terminábamos solos en el pasado, Ichinose solía ser la que empezaba la conversación. Esta vez, sin embargo, el único sonido que rompía el silencio entre nosotros era el de nuestros pasos mientras Ichinose caminaba a corta distancia detrás de mí.
Así que decidí preguntarle sobre el examen.
—Este próximo examen especial debe ser muy difícil para ti y tu clase, ¿no?
En comparación con las otras clases, la Clase B tenía un trabajo en equipo abrumadoramente sólido y un fuerte sentido de camaradería en general.
Estar obligados a decidir a qué estudiante expulsar será muy doloroso para todos ellos.
—Ah, bueno... Sí, creo que este examen es el más difícil que hemos tenido por mucho.
—Probablemente.
Podía decir lo mismo basándome sólo en su nublada expresión.
Ichinose, como líder de su clase, era la única que estaba absolutamente a salvo.
Comparada con Hirata o Kushida, se encontraba en una situación completamente diferente. Parecía ser la única estudiante con garantía de aprobar el examen.
Y es por eso que tener que eliminar a alguien de la clase es una decisión tan dolorosa para ella.
Es mejor que se quede al margen y no se involucre en la votación para nada. De esa manera, sería menos estresante para ella.
Podría ser posible que Ichinose hiciera algo así, pero...
—Ante un examen tan espantoso... no tengo más remedio que hacer algo, ¿no?
—Bueno, probablemente.
—...Sí. Debo hacer algo.
Caminaba a mi lado mientras decía esto.
De costado, pude ver una sonrisa en su rostro.
—¿Estás... pensando en retirarte tú misma, Ichinose?
—¿Eh? Claro que no. Definitivamente no dije nada de eso.
Lo negó, pero la mirada en sus ojos daba otra impresión.
Que estaba totalmente preparada para tomar esa decisión si lo necesitaba.
—Para que conste, tus compañeros no estarían dispuestos a votar por ti muy fácilmente.
—Te dije que nunca dije nada sobre que me expulsen. Pero, si realmente lo piensas, entonces supongo que probablemente tengas razón en eso.
—El hecho de que lo has considerado está escrito en tu cara.
—¿D-De verdad?
Ichinose rápidamente trató de confirmarlo.
¿Fue natural o lo hizo a propósito?
Parecía ser lo primero esta vez.
—Haa.... Mantenlo en secreto para todos, ¿de acuerdo?
—¿Estás dispuesta a sacrificarte por el bien de alguien más?
—No exactamente. Siento que tengo que luchar y asumir la responsabilidad del riesgo yo sola.
“Asumir la responsabilidad del riesgo yo sola”, ¿eh?
En otras palabras, no tenía intención de tomar la salida fácil observando pasivamente desde fuera.
—No lo entiendo. ¿Es esta tu manera de rendir homenaje al compañero que sea expulsado?
Aunque significaría más viniendo de Ichinose que de alguien más, aun así no sería algo que ellos quisieran.
De cualquier manera, simplemente no podía imaginarme a ese estudiante dejando la escuela con una sonrisa en la cara.
—No hay mucho más que pueda decirte. No es algo que me gustaría que otros oyeran. Además, estás en la clase C. No importa qué tipo de examen sea, hay veces en las que simplemente no podemos colaborar.
—Eso es muy cierto.
En todo caso, lo máximo que pudimos discutir entre nosotros fue sobre los votos de aprobación.
Si fueras capaz de conseguir el voto de Ichinose, estarías en una posición de partida algo favorable para el resto del examen.
Sea como sea, Ichinose no es una estudiante que necesite votos de aprobación. Aun así, no se limitaría a entregar su voto a cambio de puntos privados. Así que ni siquiera intenté mencionarlo.
Y aunque, por si acaso, comprara su voto, al final no sería más que un amuleto de la suerte.
—De todos modos, la escuela es horrible, ¿no? Con lo de hacer que alguien deje la escuela y todo eso. Aunque consigas los votos de aprobación de los chicos de las otras clases, alguien tiene que irse al final.
No todo el mundo acogía con satisfacción este examen, sobre todo porque forzaban las expulsiones justo cuando el primer año estaba llegando a su fin.
—¿Estarás bien, Ayanokouji-kun?
—Bueno, es difícil de decir... no soy un estudiante muy importante en mi clase.
—Entonces, si estás de acuerdo con ello, tal vez pueda hacer algo.
—¿Qué quieres decir?
—Ya que tengo un voto de aprobación que puedo usar en alguien de otra clase, podría usarlo en ti.
Planteó un tema que yo había decidido intencionadamente no mencionar unos momentos antes.
—Aunque, es sólo un voto, así que puede que no valga mucho....
—Agradezco tu oferta, pero debo rechazarla. Tu voto se desperdiciaría en alguien como yo.
—¡Eso no es para nada cierto! Más bien, honestamente creo que sería el voto más justificado en todo el examen. Se supone que es para alguien digno de admiración en otra clase. Sí, no puedo pensar en nadie más digno que tú, como el que me salvó.
Sus palabras fueron extremadamente difíciles de responder.
—Ya veo. Bueno, entonces, si surge algo, me pondré en contacto contigo.
—Fantástico. Lo recordaré.
Con eso, Ichinose muestra una sonrisa.
—Buenos días, Honami.
Escuché a alguien llamar a Ichinose desde atrás.
—Buenos días, Asahina-senpai.
—¿No estás muy animada hoy? Por cierto, ustedes dos están en clases diferentes, ¿no? Entonces deben estar en buenos términos, ¿verdad?
—Err, sí. Es un buen amigo...
Ichinose parecía un poco avergonzada con su respuesta.
—¿Oh~? Un buen amigo, ¿eh?
Habría causado menos malentendidos si ella no hubiera respondido así.
—Bueno, lo que sea. De todos modos, me gustaría pedir prestado Ayanokouji-kun por un momento, ¿está bien?
Asahina se nos acercó, esperando que Ichinose se marchara para poder hablar conmigo a solas.
—Entiendo. Bueno, entonces, Ayanokouji-kun, seguiré adelante.
Sin signos particulares de descontento, Ichinose inclinó la cabeza, cumpliendo la petición de Asahina.
—Lo siento, Honami. Nos vemos.
—¡Oh, no! Por favor, discúlpenme.
No sentí nada raro en su corta conversación.
En vez de eso, parecía que las dos compartían una relación senpai-kouhai como es debido.
—Es una niña muy buena, ¿no? Linda. Inteligente. Ni siquiera en el segundo año, nadie tiene nada malo que decir sobre ella.
—Eso es cierto. También Ichinose parece muy popular entre casi todo el mundo en el primer año.
—¿Podría ser que te hayas ganado su afecto?
Al parecer, el comportamiento algo extraño de Ichinose no pasó desapercibido.
—Imposible.
Independientemente de Ichinose, quería que mi tiempo con Asahina fuera lo más corto posible.
Despertaría sospechas si fuéramos vistos por uno de los subordinados de Nagumo. Si realmente tiene algo que decir, entonces lo mejor es que lo haga rápido.
—Si tienes asuntos conmigo, te escucharé.
—Qué aburrido. Bueno, no importa. Los vi a los dos actuando amigablemente, así que quería decirte algo —Asahina estuvo sonriendo alegremente durante un tiempo, pero esa sonrisa desapareció rápidamente—. He escuchado un poco sobre el examen de primer año. Alguien tiene que dejar la escuela, ¿no?
—Eso parece.
La noticia ya había llegado a los estudiantes de segundo año.
—Honami se preocupa mucho por sus amigos, o cómo decirlo... Sabes que ella no es el tipo de persona que se sentaría y dejaría que expulsen a alguien de la clase B, ¿verdad?
—Eso es verdad. Creo que a todo el mundo le interesa saber dónde va a terminar la clase B, aunque nadie hable de ello.
Mi respuesta fue un poco sosa, pero logró transmitir mis pensamientos con suficiente facilidad.
—Entonces, ¿cómo crees que Honami afrontará el examen?
Asahina me miró con ojos curiosos.
En lugar de sentir curiosidad por mi respuesta, era más bien como si estuviera tratando de sonsacarme una respuesta en particular.
En cuyo caso, darle una respuesta indirecta podría ser contraproducente.
—Asumiendo que ella planee prevenir la expulsión... La clase B tiene una cantidad considerable de puntos privados ahorrados. Así que de alguna manera sólo tendría que compensar el resto de los puntos que necesita y evitar que la expulsión ocurra. Algo así, ¿verdad?
—Bingo. Bueno, esa es la única conclusión lógica.
Si estuvieras trabajando bajo el supuesto de que ella trata de evitar la expulsión, cualquiera habría llegado a la misma conclusión.
Lo difícil era que no había mucha gente que pudiera hacerlo.
Lograr reunir de alguna manera 20 millones de puntos privados era sumamente difícil.
—Parece que ha ido a pedirle ayuda a Miyabi. ¿Puedes adivinar cómo respondió?
—¿Él accedió inmediatamente?
—...Bingo otra vez.
Basado en el curso de los acontecimientos hasta ahora, simplemente no había ninguna otra posibilidad.
—Te lo preguntaré sólo para asegurarme, pero no hay forma de que le presten suficientes puntos privados sin ninguna condición, ¿verdad?
A pesar de que la Clase B poseía un gran número de puntos privados, todavía les faltaba una cantidad considerable.
Varios cientos de miles de puntos aún no serían suficientes.
—Por supuesto que no la hay. Claro, sería una historia diferente si sólo estuviéramos hablando de unos pocos miles de puntos. En ese caso, habría mucho espacio para discutir. ¿Pero una vez que llega a los cien mil o a los millones? Nadie va a regalar tanto —Contestó Asahina sin dudarlo—. Los estudiantes de tercer y segundo año tienen que estar bien preparados para los exámenes especiales que nos esperan. Que necesitemos o no nuestros propios puntos privados no nos quedará claro hasta el final, así que no debería haber espacio para la caridad sólo por un par de estudiantes de primer año.
Debe de tener razón.
Esta fue también la razón por la que Chabashira-sensei habló de ello tan pasivamente.
Aunque consiguieras algunos puntos privados de los alumnos mayores, sería casi imposible para ellos entregar una cantidad importante. Podrías endulzar el trato ofreciéndote a devolverlo con intereses, pero eso no significaría nada para los de tercer año que están tan cerca de graduarse. Además, incluso si logras conseguir un préstamo de un estudiante de segundo año, sigue pareciendo imposible conseguir un número tan grande de puntos.
—Si hay alguien capaz de satisfacer estas expectativas, el presidente Nagumo es el único que me viene a la mente.
— Al fin y al cabo, ha ahorrado muchos puntos.
—Entonces, ¿qué pasó?
Le pregunté esto, pero basándome en el flujo de la conversación, la respuesta ya estaba clara como el día.
Aún así, dado que Ichinose parecía dudar sobre algo, probablemente había condiciones vinculadas a la colaboración de Nagumo.
—No estés tan ansioso. Estoy en la misma clase que el tipo, por lo que tengo mis dudas de que vaya a prestar un número tan grande de puntos a una kouhai. Honami es una chica tan linda, ¿verdad? No hay absolutamente ninguna manera de que sea expulsada a causa de este examen, ¿cierto?
—Supongo que sí. Parece que la estrategia es evitar que expulsen a uno de sus compañeros.
—Personalmente, no me gusta que ella haga este tipo de trato con él. Por supuesto, es en parte por el bien de mi propia clase, pero.... más que eso, supongo que lo siento por ella.
—¿Las condiciones que ha establecido son demasiado duras? ¿como una tasa de interés obscenamente alta?
—Ese tipo.... La condición que puso para prestarle los puntos... es que los dos entren en una relación.
—Entiendo.
Considerando todo lo que Nagumo ha hecho hasta ahora, esto definitivamente se ve como algo que él haría.
Una relación a cambio de un préstamo de puntos privados.
En términos generales, esta condición era todo menos normal. No sería extraño que lo rechazaran inmediatamente. Pero, si era por el bien de proteger a su clase, había una posibilidad de que Ichinose estuviera de acuerdo con ello, y Nagumo también lo entendía.
—¿Está bien? ¿que me cuentes todo esto?
—Ya te lo he dicho. Es por mi clase. Si Miyabi presta todos esos puntos privados a una estudiante de primer año, el resto de nosotros podemos sufrir como resultado. Además, a cambio de proteger a sus amigos, Honami tendrá que pasar por algo doloroso.
—Tal vez sí, pero ¿por qué me lo dices a mí? Estoy en la clase C. Tenemos una relación hostil con Ichinose.
—No lo sé. Pero, si eres tú, probablemente serás capaz de hacer algo al respecto de una manera u otra.
—Me estás sobreestimando. No hay forma de que pueda costear la falta de puntos de la clase B.
Sería otra cosa si fuera posible conseguir suficientes puntos sin depender de Nagumo, pero eso tampoco funcionaría.
—Oh, ¿en serio? Bueno, ustedes dos son rivales...
Ayudar en forma activa a una clase rival sería demasiado tonto cuando deberíamos estar agradecidos por la pérdida de una amenaza potencial. En primer lugar, se necesitarían varios millones de puntos, por lo que todos en la clase C tendrían que unirse para ayudar. Sería absolutamente imposible.
—No puedo hacer nada al respecto.
—Está bien. Aunque no hagas nada, no te lo echaré en cara. De todas formas, es sólo un deseo de mi parte. Dicho esto, aunque digas que no puedes, pienso que podrías arriesgarte de todos modos.
Después de darme una palmada en la espalda, Asahina empezó a irse.
—En fin, te he dicho todo lo que necesitas saber. ¡Te dejaré el resto a ti!
Con eso, Asahina corrió hacia la escuela sin decir una palabra más.
Basado en su comportamiento y su forma de hablar, no parecía estar mintiendo.
—Hacer un trato con Nagumo, ¿eh?
No era muy apropiado para ella, pero parece que esta es la estrategia de Ichinose.
Si realmente lo hace, podrá evitar la pérdida de uno de sus compañeros de clase. Era una forma de luchar a su disposición sólo por la unión de su clase y la enorme suma de puntos que acumularon juntos. Pero por la forma en que hablaba Asahina, parecía que el requisito de una relación era un gran obstáculo para Ichinose. Después de todo, si la condición de Nagumo no le pesaba mucho, sería más seguro pedir prestados los puntos privados antes de que Nagumo pudiera cambiar de opinión.
Bueno, es difícil tomar una decisión rápida cuando se trata de una relación de pareja con alguien del sexo opuesto.
Estaría bien si se tratara simplemente de una cuestión de cooperación, pero no había absolutamente nada que pudiera hacer sobre tantos puntos privados.
Probablemente, la Clase B estaba corta por unos cuatro o cinco millones de puntos, lo que excedía con mucho el alcance de algo en lo que podía ayudar.
Sería más rentable cortar la relación con tus compañeros de clase, pero ¿cómo sopesaría Ichinose las opciones si pusiera la condición de Nagumo en la balanza....?
—Dada su personalidad...
¿Cómo saldrían las cosas en el futuro? No era muy difícil de imaginar.
PARTE 2
El examen especial era un tema difícil de tratar en clase.
Había una atmósfera tan mala en el aula que se sentía como si se pudiera alcanzar y sentir la tensión en el aire.
—Buenos días, Kiyopon.
—Buenos días.
Intercambié saludos con Haruka mientras me sentaba en mi asiento.
No podía sentir ningún entusiasmo por las expresiones de los estudiantes que ya habían llegado al aula.
La idea de ser blanco de los votos de desaprobación se interponía entre las relaciones de clase normales, haciéndolas imposibles de mantener. Esto continuaría hasta el final del examen especial.
Y probablemente continuaría por un tiempo después de eso.
[El ambiente del aula es súper sombrío, ¿no?]
Haruka me envió un mensaje de texto.
[¿Algo inusual?]
[Nada todavía. Por supuesto, todos están en guardia, ¿no?]
En el aula, era imposible saber cuándo alguien podía estar escuchando.
Nadie se atreverá a dar nombres específicos sobre a quién pretenden votar.
[Entonces, aquí está la esperanza de tener mejor suerte mañana.]
[Sí.]
Después de este breve intercambio, guardé mi teléfono.
Sin sobresalir ni causar problemas a la clase, simplemente nos sentábamos y esperábamos a que pasara la tormenta.
Si tan sólo nuestros compañeros de clase nos permitieran tener una salida fácil de esto.
PARTE 3
Cuando llegó la hora del almuerzo, me dirigí a la biblioteca.
No es que estuviera insatisfecho con pasar el tiempo junto al Grupo Ayanokouji; es sólo que sentía que era importante que pasáramos algún tiempo separados de vez en cuando. Además, en la biblioteca, había una estudiante en particular que amaba los libros tanto como yo.
Por supuesto, Shiina Hiyori también vino hoy a la biblioteca. Casualmente escogí un libro de los estantes, y poco después de sentarme y hojearlo un poco para decidir si quería tomarlo prestado o no, alguien habló.
—Buenas tardes, Ayanokouji-kun.
Recién llegada la hora del almuerzo, sólo había unas pocas personas en la biblioteca, así que notó mi presencia inmediatamente.
Estaba sosteniendo en su mano un libro que era de un género similar al mío.
—Parece que eres tan ratón de biblioteca como siempre.
—Bueno, la biblioteca es un lugar maravilloso.
Después de pedir suavemente permiso, Hiyori se sentó en el asiento a mi lado.
Juntos, los dos leímos en silencio nuestros libros.
Los estudiantes con un amor natural por la biblioteca no tenían necesidad de una conversación excesiva.
Se podría decir que el acto de leer un libro era, en sí mismo, una forma de conversación.
Así de fácil, leemos nuestros libros sin decir una palabra hasta justo antes del final del almuerzo.
Pasó alrededor de media hora antes de que yo hablara.
—Ya es hora de que volvamos.
—Eso parece.
Después de mirar el reloj para comprobar la hora, decidí no irme todavía.
—Por cierto, Hiyori. Hay algo que me gustaría preguntarte.
—¿Qué pasa?
Insegura de lo que quería preguntar, levantó curiosamente la vista de su libro.
—Se trata de la situación actual de Ryuuen.
—La situación de Ryuuen-kun, ¿verdad...? Para ser honesta, no es muy buena.
—Así que es la mejor opción para la expulsión.
—Sí. Casi todos en la clase han accedido a emitir un voto de desaprobación por él.
—¿El propio Ryuuen también lo ha aceptado?
—Creo sí. De hecho, ha visitado la biblioteca después de la escuela últimamente y he podido conversar un poco con él, así que estoy bastante segura de ello.
El libro que estaba leyendo cuando lo vi en el café antes fue tomado de la biblioteca.
Me hizo pensar que seguramente había estado en contacto con Hiyori, lo cual, después de venir aquí, me pareció correcto.
—¿Qué piensas de todo esto, Hiyori?
—Es una pena, pero no podemos evitar la expulsión. Por lo tanto, estoy dispuesta a aceptar el hecho de que vamos a perder a alguien, incluso a mí. Aunque, si la clase D realmente quiere llegar a la cima otra vez... He comenzado a pensar que podríamos necesitar Ryuuen-kun...
Es probable que tenga algunas dudas sobre Ryuuen, pero reconoce sus verdaderas capacidades.
Hablando de eso, no recuerdo que Ryuuen haya tratado a Hiyori con dureza antes.
—Siento haberte preguntado. Sólo estaba interesado en el estado actual de la clase-
Me interrumpí, quedé sin palabras.
—No... supongo que no quiero que Ryuuen sea expulsado de la escuela.
No necesitaba venir hasta aquí hoy.
Sin embargo, quería saber qué estaba pasando con Ryuuen, así que terminé viniendo de todos modos.
—Es mejor tener tantos amigos como puedas, ¿no?
—...Sí.
Me pareció un poco extraño de alguna manera. No se suponía que fuéramos más que enemigos.
—Uhm...
—¿Hm?
—Mmm... no creo que alguien como yo deba decir esto, pero...
Aunque parecía un poco difícil de decir, Hiyori continuó.
—Ayanokouji-kun, por favor no dejes la escuela, ¿de acuerdo...? Con todo lo que ha pasado, no quiero que mi querido amigo también desaparezca.
—Haré lo mejor que pueda.
Acepté con gratitud las preocupaciones de Hiyori mientras nos separábamos y regresábamos a nuestras respectivas aulas.
PARTE 4
El mal ambiente persistió incluso después de que terminaron las clases.
Le importara o no, mi vecina Horikita empezó a preparar sus pertenencias en silencio, como siempre.
Era difícil afrontar un examen como éste tú solo. Normalmente, uno querría pensar en hacer tantos aliados como fuera posible, pero Horikita no mostraba ninguna intención de hacer algo así.
Para decirlo con optimismo, Sudou era la única persona garantizada de emitir su voto de aprobación por Horikita.
Dicho esto....
Recordé la confrontación de Horikita con Ryuuen el otro día.
Reflexionar sobre lo que ella quería ganar de él y lo que le faltaba como persona me permitió entender su estrategia para avanzar.
Parecía como si tuviera la intención de manejar este examen de una manera diferente a la de todos los demás, pero ese no era un camino fácil de tomar.
Sin embargo, si realmente pudiera lograrlo, sería un deseo hecho realidad en lo que a mí respecta. Podría tratar a su estrategia y a la mía como la misma cosa, y hacer que Horikita asumiera la responsabilidad de todo ello.
Me giré y miré por toda la clase, imaginando cómo Horikita veía a nuestros compañeros.
—Es raro que no hayas intentado pedirme consejo todavía. ¿Estás bien con el examen?
Aunque sólo había pasado un día, decidí confirmar si Horikita había cambiado o no.
—Aunque te pidiera consejo, no me darías una respuesta directa.
—Por supuesto.
Horikita empezaba a comprender poco a poco que yo no le daría consejos tan fácilmente.
—Además.... Este no es exactamente el tipo de examen en el que puedes ir y pedir ayuda a tus compañeros.
—Muchos de los demás estudiantes han formado grupos para conseguir votos de aprobación.
—Si la gente quiere hacer eso, entonces son perfectamente libres de hacerlo.
Horikita terminó de recoger sus cosas y se levantó de su asiento.
—Entonces, ¿qué vas a hacer?
—Lo que pueda.
Con estas palabras, Horikita abandonó el aula.
Como tenía un poco de curiosidad, decidí seguirla.
—¿Qué pasa?
Me miró con el ceño fruncido, disgustada porque la seguí.
—Estoy un poco interesado en lo que vas a hacer.
—Normalmente no te gusta involucrarte conmigo, así que ¿por qué ahora?
¿Por qué, eh?
En pocas palabras, era porque deseaba conocer la estrategia que había decidido.
Si realmente la ponía en acción, quería apoyarla completamente.
Dicho esto, no tenía intención de decirle eso aquí.
—Aún no te has unido a un grupo, ¿verdad? Si estás en apuros, puedo ayudarte.
—¿Es así como es? Más o menos, estás preocupado por mi situación, ¿no? Si te pidiera ayuda, ¿me dejarías unirme al grupo del que eres parte?
—No sería molesto para nosotros acoger a otra persona.
—Aunque aprecio la oferta, debo rechazarla. No eres la persona que estoy buscando ahora mismo.
Al parecer, ya se ha decidido.
Sin embargo, sus recursos son limitados y todavía se encuentra en un punto en el que se siente impulsada por su ansiedad.
Probablemente yo no sea la persona adecuada para compensar esas deficiencias.
—Tú realmente...
Me frunció el ceño con más intensidad que antes.
—¿Qué?
—Sólo déjame en paz.
Habló con dureza, deteniéndome en seco.
Si continúo siguiendo a Horikita, solo serviría para enfurecerla más.
Después de verla marchar, miré por un momento por la ventana del pasillo, contemplando la vista.
—Supongo que me iré a casa por hoy.
—...¿Podría molestarte un momento, Ayanokouji-kun?
Como si sólo estuviera pasando, Hirata apareció. Me hizo preguntarme si él también me había seguido.
A juzgar por el momento, seguramente esperaba a que Horikita y yo nos separáramos.
—Si te parece bien, ¿podrías venir conmigo un rato después de la escuela? Necesito hablar contigo.
Era una rara invitación de Hirata, una que no tenía ninguna razón en particular para rechazar.
Mientras yo le respondía con un gesto de asentimiento, Hirata suspiró aliviado.
Después de pasar un día entero inmerso en la atmósfera tensa del aula, parecía ser el estudiante más agotado de la clase.
Por supuesto, podía deducir que esto estaba relacionado en gran medida con el examen especial.
—Muy bien, ¿qué tal si nos encontramos cerca de la entrada sur del centro comercial Keyaki a las cuatro y media?
—Claro.
Eso fue todo lo que nos dijimos.
No me pareció que fuera algo de lo que pudiéramos hablar aquí.
Después de todo, los estudiantes que se dirigían a las actividades de club y volvían a casa caminaban constantemente a nuestro lado.
Había planeado reunirme con Keisei y los demás después de la escuela hoy, así que tuve que decirles que iba a llegar un poco tarde. Hirata estaba muy ocupado hablando con sus amigos por ahora, así que decidí ir al Centro Comercial Keyaki antes que él.
PARTE 5
Después de salir del aula, me dirigí inmediatamente hacia la entrada principal de la escuela.
En el camino, me encontré con Sakayanagi Arisu de la Clase A. Podía ver a Kamuro de pie junto a ella.
—Ayanokouji....
En guardia, el cuerpo de Kamuro se endureció.
Sin embargo, como siempre, Sakayanagi no mostró ningún cambio. Se mantuvo serena, con movimientos relajados y tranquilos.
Las reacciones contrastantes entre las dos fueron un poco interesantes.
—Qué coincidencia. Ayanokouji-kun.
—En efecto. ¿Hay algo que necesites con la clase C?
Las dos parecían dirigirse hacia la clase C.
Sin embargo, en lugar de responderme, Sakayanagi ignoró mi pregunta con una sonrisa mientras me hacía una a mí.
—¿Adónde vas ahora?
—Tengo planes de encontrarme con un amigo en el Centro Comercial Keyaki en media hora.
—¿Es eso cierto? Es como si vivieras tu vida al máximo. Si no te importa, ¿podrías dedicarme un poco de tu tiempo?
Sakayanagi sacó su teléfono y verificó la hora.
¿Vino por aquí sólo para encontrarse conmigo? No, eso es difícil de imaginar.
Sólo son las cuatro y diez minutos.
Aunque se demorara varios minutos en llegar al Centro Comercial Keyaki, aún quedaban más de diez minutos hasta las 4:30.
—¿Te parece bien estar de pie mientras hablamos?
—Sí. Aunque llamaremos la atención si hablamos aquí. ¿Qué tal si nos movemos a otro lugar?
—Está bien.
También quería evitar destacar tanto como fuera posible.
Habría sido distinto si fuera con una compañera de clase, pero Sakayanagi era el tipo de persona que llamaba la atención tanto si quería como si no.
Como ella misma era consciente de eso, empezamos a movernos a un lugar menos concurrido.
Igualando el lento paso de Sakayanagi, el tiempo pasó mientras nos movíamos por el edificio.
—En cualquier caso... Ayanokouji-kun, Masumi-san. ¿No creen que este examen suplementario es demasiado irracional? Han decidido forzarnos la expulsión sólo porque nadie ha sido expulsado todavía. Preparar un examen como este.... Pensándolo racionalmente, es ridículo.
—Totalmente. Mashima-sensei suele ser bastante tranquilo, pero incluso él ha estado dando una especie de sensación agitada últimamente.
Parecía que los otros profesores tampoco estaban satisfechos con el examen suplementario.
Sakayanagi y Kamuro continuaron hablando.
—Hay una razón para eso.
—¿Qué, sabes algo?
—Es un asunto personal del que estoy un poco avergonzada, pero mi padre fue suspendido de su puesto hace unos días.
—Suspendido.... Tu padre... Si no me equivoco, es el presidente de la junta, ¿verdad?
Sabiendo ya lo del padre de Sakayanagi, Kamuro presionó para obtener más información.
—No he oído hablar de ello en detalle, pero parece que han surgido bastantes cosas desfavorables con respecto a Padre. El padre que conozco no es el tipo de persona que se ensucia las manos con esas cosas. Por supuesto, no puedo descartar la posibilidad de que yo, como su hija, simplemente no lo supiera, pero... también es cierto que alguien pudo planear todo esto para forzar a Padre a abandonar su puesto.
En la superficie, estas palabras fueron pronunciadas para Kamuro, pero en realidad, eran para mí. Si el padre de Sakayanagi fuera realmente inocente, no sería sorprendente que 'ese hombre' tuviera algo que ver en todo esto.
La impresión que tenía del padre de Sakayanagi puede no haber sido un malentendido.
—Dicho eso, es algo que no tiene nada que ver con estudiantes como nosotros. No es más que una simple charla.
Sakayanagi no veía la suspensión forzada de su padre como algo a lo que valiera la pena prestarle atención.
—Aun así, ¿qué tiene que ver eso con el examen?
—¿No crees que es posible que la escuela haya preparado el examen apresuradamente... con el fin de forzar la expulsión de alguien?
—Alguien....
Kamuro me miró durante un instante antes de volver inmediatamente su mirada a Sakayanagi.
—He intentado que no me moleste hasta ahora, pero tú... ¿Por qué has estado vigilando Ayanokouji?
Preguntó Kamuro mientras caminaba junto a Sakayanagi.
—¿Oh? Has intentado que no te moleste hasta ahora, ¿verdad?
—... Por supuesto que sí.
Kamuro negó las implicaciones de Sakayanagi, pero la mirada en la cara de Sakayanagi parecía entenderlo todo.
Sin embargo, en vez de seguir presionando, volvió a la pregunta de Kamuro.
—Simplemente lo conozco de hace mucho tiempo. ¿No es esta respuesta lo suficientemente aceptable?
Contrastando con la preocupación de Kamuro, Sakayanagi contestó con indiferencia.
Considerando el hecho de que no le había dicho nada a Kamuro antes, fue una respuesta bastante reveladora.
También es posible que estuviera tratando de medir mi reacción. Si yo reaccionara mal o interrumpiera descuidadamente su conversación, entonces podría terminar siendo expuesto como una debilidad.
Bueno, en realidad, no me importaba.
—Entonces, ¿están diciendo que ustedes dos se reencontraron aquí por casualidad? Es una posibilidad muy remota.
—Sí. La posibilidad es muy remota. Verdad, ¿Ayanokouji-kun?
—Tal vez sí.
Aunque nunca la había conocido antes de venir aquí, técnicamente no había nada incorrecto en lo que decía.
En ese entonces, nuestro conocimiento del otro era definitivamente de un solo lado.
—Entonces, ¿es realmente una persona difícil de manejar? Lo siento, pero no lo veo en absoluto.
Igual que Sakayanagi había hecho antes, Kamuro fue directo al grano.
En cierto sentido, quizás las dos eran realmente similares.
—Últimamente te has vuelto muy curiosa, ¿no? Hasta ahora, no creo que me hayas hecho este tipo de preguntas.
Parecía como si las pocas veces que había hecho contacto directo con Kamuro le hubieran dado algunas ideas.
Quizás esto también había despertado algún tipo de curiosidad incontrolable en Sakayanagi.
—Puedes preguntarle a cualquiera y ellos pensarán lo mismo. Nunca has estado tan obsesionada con alguien así antes.
—Me pareciste una persona particularmente indiferente a la que no le gustaba interferir en los asuntos de otras personas. Por eso no tenía reservas en pedirte que le echaras un ojo a Ayanokouji-kun, pero... no tienes remedio, ¿verdad?
Sakayanagi sonó un poco sorprendida, aunque también un poco encantada en algunos aspectos.
Creí que solo decía esto para ver mi reacción, pero quizás estaba haciendo estas preguntas mezquinas porque estaba interesada en las respuestas de Kamuro.
Mientras hablaban, llegamos a nuestro destino.
—Nadie nos molestará si hablamos aquí.
Llegamos al edificio especial. Sin duda era tranquilo, dado que se habían acabado las clases.
—Bueno, Masumi-san. Me disculpo, pero por favor, vuelve a los dormitorios sin mí.
Sakayanagi hizo que Kamuro caminara hasta aquí simplemente porque quería una compañera para conversar.
—... Como sea.
Sakayanagi finalmente decidió enviar a Kamuro de vuelta a casa sin hablar demasiado de mí.
Kamuro se giró y bajó la escalera sin oponer resistencia, haciendo que me preguntara si ella sabía desde el principio que esto iba a acabar así.
—¿Estuvo bien?
—Sí. ¿No te hubiera molestado que revelara algo?
—No particularmente.
Si muestro algún signo de debilidad, le daré la oportunidad de aprovecharlo.
Además, no había necesidad de dar a Sakayanagi ninguna información adicional.
—Veo que me han reconocido como tu enemigo. Supongo que estoy dispuesto a aceptarlo por el momento.
Mi respuesta y el razonamiento detrás de ella fueron tan obvios que Sakayanagi entendió el significado de mis palabras sin ningún problema.
—Yendo tan lejos como para dejar que Kamuro regrese sin ti, ¿de qué quieres hablarme?
Pasamos mucho tiempo viniendo aquí, así que no quedaba mucho hasta que me reuniera con Hirata.
Le pedí que fuera al grano.
—Es sobre la promesa que nos hicimos.
—Acepté enfrentarme a ti en el próximo examen especial. Es decir, este examen.
—Sí, ese era indudablemente el plan. Sin embargo.... si te parece bien, me gustaría aplazarlo hasta la próxima vez. Este examen suplementario no es una competencia entre las clases. Más bien, es un proceso de selección para que evaluemos a nuestros compañeros. La única manera de influir en las otras clases es con votos de aprobación, y no podemos atacarnos aunque queramos... ¿No estaría bien si posponemos nuestro duelo hasta la próxima vez?
En otras palabras, estaba aquí para decirme que este examen especial no cuenta, ya que no era un escenario adecuado para nuestra competencia.
—¿Estás dispuesto a aceptar esta propuesta?
—Toma la decisión que quieras.
Como le había dado la respuesta que estaba buscando, Sakayanagi expresó respetuosamente su gratitud.
—Muchas gracias. Me preguntaba qué tendría que hacer si no estabas de acuerdo. Ahora, seré libre de centrar mi atención en la política interna de la clase A. Aunque...
—¿Aunque?
—Como hemos acordado un alto el fuego, supongo que te diré algo para ganarme tu confianza. Para este examen, no haré nada que te ponga en desventaja. Es decir, no les daré ningún voto de desaprobación.
Dio su palabra, restringiendo sus acciones futuras.
—En el improbable caso de que interfiera con la Clase C y de alguna manera impacte negativamente sus resultados... no me importaría aceptar mi derrota. Sería perfectamente aceptable que te negaras a tener un combate conmigo en el próximo examen.
—Si mis compañeros concentran sus votos de desaprobación en mí, no habrá una próxima vez.
Entonces me expulsarían. Fin de la historia.
—Sin duda tienes razón en eso. De cualquier manera, por favor, ten un poco de tranquilidad. Eso es todo lo que intento decir.
Sus palabras eran más que corteses, pero supongo que estos eran los pasos que necesitaba seguir para ganarse mi confianza.
—Tal vez tus subordinados te traicionen antes de que pueda ocurrir nuestro combate.
—Fufu, eres muy gracioso.
Casi todos los estudiantes de la clase A formaban parte de la facción Sakayanagi.
Estaba convencida de que la clase no se atrevería a intentar eliminar a su líder.
—Ya había decidido quién sería expulsado tan pronto como se anunció el examen.
—¿Decidiste desde el principio quién sería removido? Suena como la decisión correcta.
Sakayanagi pudo tomar esta decisión precisamente porque estaba en lo más alto de su clase.
—Entonces, ¿cuándo planeas decirle a tu clase quién es?
—Ya se lo dije a todos hace mucho tiempo. Si hubiera esperado hasta el último minuto para informarles, habría causado ansiedad. Haciéndolo saber con anticipación, es más fácil para el resto de la clase, ¿no crees?
Sería insoportable para el estudiante que está programado para ser expulsado de la escuela.
Sin embargo, el resto de la clase podría evitar caer en el caos.
—¿Sabes a quién he elegido, si puedo preguntar?
—Quién sabe. No tengo la menor idea.
A pesar de haber dicho lo contrario, tuve una idea bastante buena.
—Katsuragi Kouhei-kun.
—¿Una elección razonable?
—Es el antiguo líder de la clase A que se opuso a mí a principios de año. No hay necesidad de que dos personas estén en lo más alto de la misma clase.
Katsuragi es una persona tranquila y serena.
Lo más probable es que comprendiera que él sería el chivo expiatorio en el momento en que escuchó los detalles del examen.
Parecía haber aceptado su destino sin resistencia.
Aún había algunos estudiantes que continuaban siguiendo a Katsuragi como Yahiko, pero eran superados en número.
—Sé que lo has visto como un enemigo desde el principio, pero tenía la impresión de que había dejado de intentar liderar la clase.
Incluso en la Clase A, Katsuragi ocupaba un lugar destacado en términos de excelencia general.
Sentí que sería una pena perderlo, pero al parecer Sakayanagi pensaba diferente.
—Entre mis amigos, muchos ya lo odian. Sencillamente no pueden estar de acuerdo con su forma de pensar conservadora. Siendo ese el caso, puedo levantar la moral mostrándole la puerta.
Por lo visto, estaba haciendo un trueque entre perder poder de combate y aumentar la moral de la clase en su conjunto.
—¿Está bien que me digas esto? ¿Sobre quién es tu objetivo?
—No es como si fueras a hacer algo detrás de escena para protegerlo, ¿verdad, Ayanokouji-kun?
No me parece que vaya a obtener ningún resultado que haga que valga la pena el esfuerzo.
—¿Qué planeas hacer con la clase C?
—Quién sabe. No participaré en ella. Tengo la intención de dejar la toma de decisiones a mis compañeros de clase.
—Cuando se trata de eso.... es tan simple como quitar uno de los molestos, o incluso uno de los incompetentes —Sakayanagi parecía estar disfrutando mientras pensaba en ello—. No hay necesidad de pensar en lo que la clase D pretende hacer. Claramente se van a deshacer de Ryuuen-kun.
No tenía ninguna objeción para ella.
En el caso de la Clase A, no había ventajas particulares en echar una mano a Ryūen
Lo más probable es que la Clase A quisiera verlo expulsado, aunque eso significara renunciar a la oportunidad de deshacerse del contrato vinculante que había firmado con Katsuragi.
—Aunque no tengo ni idea de lo que hará la clase B. Durante todo este examen, deseo ver quien es el expulsado de esa clase tan íntima. Aunque, ¿tal vez Ichinose-san ha encontrado algo interesante?
—Lo siento. Ya es hora de que me vaya.
Era libre de tener todos los delirios que quisiera. Es sólo que prefiero que lo haga ella sola.
—Tienes razón. Por el momento, podemos dejar nuestra conversación aquí. Después de todo, el próximo examen especial empieza la semana que viene.
El distintivo ruido de su bastón golpeando el piso resonó por todo el pasillo.
Por una fracción de segundo, la mirada de Sakayanagi se dirigió a las cámaras de vigilancia instaladas cerca del techo.
El movimiento fue tan sutil que no lo habría notado si no la hubiera estado observando de cerca.
No pude determinar si fue intencional o sólo una mirada casual y al azar a otra parte.
—Pues bien, nuestro duelo se decidirá en el examen especial final del año, tal y como lo habíamos previsto en un principio. Es una promesa.
Respondí con un pequeño asentimiento con la cabeza antes de salir del edificio especial.
PARTE 6
No había muchas tiendas que fueran lo suficientemente buenas para reunirse después de clases.
Normalmente, la gente se reunía en el café del Centro Comercial Keyaki, pero hoy era diferente.
—Gracias por venir hoy.
—No es gran cosa, Hirata. Yo también quería hablar contigo.
—Me alegra oír eso. De todos modos, ¿qué tal si caminamos un rato?
Después de reunirnos en la entrada sur, Hirata hizo una rápida revisión de los alrededores antes de empezar a caminar.
—Lo siento Ayanokouji-kun. ¿Te importa si cambio un poco nuestros planes?
—¿Cómo es eso?
—¿Es un problema si mejor hablamos en mi habitación? Creo que me sentiría mejor si lo hiciéramos.
—No me importa en absoluto.
—Gracias por entenderlo.
Por lo que parecía, el centro comercial no era un buen lugar para lo que quería hablar.
No quería que nadie escuchara nuestra conversación.
Hirata inició una pequeña charla mientras caminábamos hacia los dormitorios.
—Nuestro primer año ya casi ha terminado. ¿Cómo te fue en el tuyo, Ayanokouji-kun?
Soltó un suspiro mientras miraba hacia el cielo.
—Entre ser enviado a la isla deshabitada y ser forzado a participar en el campo de entrenamiento, fue un año agotador.
—Sí. Definitivamente fue duro, pero aún así me divertí. Desde que me inscribí aquí, siento que he sido capaz de construir con éxito relaciones de confianza con la gente que me rodea.
—Sí, yo también lo creo.
No lo negué. Todavía había mucha gente en la clase que se odiaban entre sí. Sin embargo, supongo que el enemigo de un enemigo es un amigo. A lo largo de todo el proceso de ser obligados a trabajar juntos, los vínculos habían comenzado a tomar forma gradualmente.
—Honestamente.... Nunca hubo problemas hasta que empezó este examen.
Una sombra se cernió sobre la sonriente cara de Hirata.
—¿Es eso de lo que quieres hablar?
—Sí. Lo siento.... soy muy consciente de que no quieres hablar de ello.
No me involucraría activamente, sin importar el tipo de examen especial que fuera.
Durante los exámenes anteriores, Horikita siempre ignoró mis sentimientos y me pidió ayuda.
Curiosamente, fue precisamente lo contrario para este examen.
Horikita no acudió a mí en busca de ayuda, mientras que Hirata sí.
Era como si Horikita fuera cada vez más madura en estos días.
Tal vez se dio cuenta de que yo no iba a ayudar, ya que la frecuencia de sus peticiones también se iba agotando, poco a poco.
—Este examen... no se me ocurre una solución. No importa cuántas veces lo piense, no se me ocurre nada.
—No importa cuántas veces...
Mirando de cerca, pude ver círculos oscuros bajo los ojos de Hirata.
Entonces me pregunté si había pensado en el examen toda la noche, incapaz de dormir lo suficiente.
—Suena difícil. En un examen como éste, cuanto más piensas en tus compañeros, más difícil es.
—¿Eh...?
—No importa, no te preocupes.
Si digo algo descuidado, Hirata se hundirá aún más en la oscuridad.
Por ahora, lo mejor es dejarlo en paz.
—Si... si hay una manera de salvar a la clase, por favor, dímelo.
Debido a mi respuesta, de alguna manera se había hecho una idea equivocada, pensando que yo tenía una respuesta para él.
—¿Realmente crees que es imposible ahorrar 20 millones de puntos privados?
—He intentado hacer los cálculos, pero no es posible conseguir tantos puntos. Ayer, traté de hablar de ello con mis superiores en el club de fútbol, pero todos están esperando los exámenes especiales a los que se enfrentarán después de esto.
—¿Entonces no pudieron darnos ningún punto?
—Sí...
Al final del día, el número de métodos disponibles para evitar perder a alguien es muy limitado.
—Lo siento, no puedo pensar en otra cosa. Definitivamente te lo diré si lo hago.
—¿Es así...? Bueno, gracias.
Fue la mejor respuesta que pude darle en este momento.
Tratando de sonreír con todas sus fuerzas, Hirata me dio las gracias.
Este examen especial era muy fácil, pero también muy difícil.
Si cambias un poco tu punto de vista, la verdadera meta de este examen se vuelve increíblemente clara.
Pero Hirata no podía verlo.
Esto sólo es un examen para que eliminemos a un estudiante innecesario.
Desde el momento en que Chabashira-sensei explicó las reglas, tanto Kouenji como yo ya habíamos determinado el objetivo final del examen.
Por supuesto, no hay forma de saber 'quién' será expulsado. Todo lo que importa es asegurarse de que no seas tú.
Sin embargo, es diferente para gente como Hirata.
Nunca podrá superar el saber quién será expulsado.
Por eso se había quedado atrapado en un laberinto, incapaz de encontrar la salida.
—Ayanokouji-kun, ¿crees que está bien que alguien sea expulsado?
—Sería bueno que nadie fuera expulsado cuando termine el examen. Pero eso es difícil en este caso.
—...Por supuesto. Tienes razón. Pero, debe haber algo-
—¿No te ha costado dormir porque ya sabes la respuesta a eso?
Hablé, interrumpiéndolo.
—Eso....
El silencio se interpuso entre nosotros al acercarnos a la entrada de los dormitorios.
Esto se debió principalmente a que pudimos ver a varios estudiantes charlando en el vestíbulo.
El verdadero problema, sin embargo, era un poco más profundo.
Nuestros ojos se encontraron con cierta persona sentada en uno de los sofás del vestíbulo.
—Bueno, bueno, bueno. Pero si son el chico Hirata y el chico Ayanokouji. Qué coincidencia tan graaande debe ser esta.
—Hola, Kouenji-kun. ¿Esperas a alguien?
Se fijó en nuestras miradas inmediatamente después de entrar en el edificio.
—¿Estás diciendo que te preocuparía si tuviera planes de reunirme con alguien?
Kōenji respondió a la pregunta de Hirata con una pregunta suya.
—Me parecería inusual.
—No me desagrada tu honestidad, pero desafortunadamente no espero a nadie.
Aunque respondió a la pregunta, eso no explicaba lo que estaba haciendo aquí.
En general, Kouenji no era el tipo de persona que pasaba su tiempo en un lugar como este.
—Vámonos.
Hirata se dirigió al ascensor y se acercó para apretar el botón para llamarlo.
Entonces, Kouenji habló abruptamente desde detrás de nosotros.
—Bueno, será mejor que hagas todo lo posible para reunir la sabiduría necesaria para superar este examen.
—...Nunca cambias, ¿verdad, Kouenji-kun?
Preguntó Hirata, la actitud de Kouenji pesa un poco en su mente.
El dedo de Hirata se había detenido antes de presionar el botón.
—No hay razón para que cambie para un examen como este.
—¿Es eso realmente cierto?
Era raro ver a Hirata alterarse así.
Se dio la vuelta y se enfrentó a Kouenji Por supuesto, todavía no lo miraba fijamente.
Hirata siempre ha sido una persona calmada y tranquila, hasta el final.
—Dices que no hay razón para que cambies, pero honestamente, me pregunto si tú eres el que más necesita cambiar. Me preocupa que.... nuestros compañeros te pongan como ejemplo.
Esta era la forma que tenía Hirata de mostrar preocupación y hacer una amenaza.
Fueron palabras que expresaron con fuerza su deseo de cooperación.
Hirata esperaba que Kouenji tuviera algún interés, aunque fuera poco.
—Tus preocupaciones son infundadas. ¿No deberías ser tú, el líder de la clase, el que haga algo para salvarme?
Hasta el final, Kouenji no tenía intención de cambiar su postura de 'no hacer nada'.
—Hay cosas que ni siquiera yo puedo hacer. Puede que no sea capaz de estar a la altura de tus expectativas.
—Oh, definitivamente puedes.
A pesar de la falta de confianza en sí mismo de Hirata, Kouenji lo llenó de expectativas sin la menor vacilación.
Me preguntaba si estaba siendo sincero o no, pero no podía decirlo.
Levantándose del sofá, Kouenji se acercó a Hirata y le dio una palmadita en el hombro.
—Cuando termines de lamer las heridas de tu compañero, asegúrate de tirar la basura innecesaria.
En el momento en que estas palabras salieron de la boca de Kouenji, Hirata apretó firmemente el botón del ascensor.
—... Vámonos Ayanokouji-kun.
—Sí.
El tono de Hirata, que había sido amistoso hasta ese momento, contenía ahora ligeros rastros de ira.
Hay basura entre tus compañeros.
Hirata no pudo evitar sentirse irritado por lo que Kouenji implicó.
Sólo habló después de que la puerta del ascensor se cerró detrás de nosotros.
—Haa.... Lo siento. Te dejé ver algo un poco indecoroso.
—No te preocupes por eso. Las opiniones de Kouenji son problemáticas.
Hirata forzó una ligera sonrisa y bajó un poco la cabeza.
—En el fondo, sé que evitar la expulsión es algo poco realista. A pesar de todo, en algún lugar de mi interior, ya me he dado por vencido.
El ascensor llegó al piso de Hirata. Bajamos y nos dirigimos a su habitación.
—Adelante, entra.
—Perdón por molestar...
Esta es la primera vez que estoy en la habitación de Hirata. Fundamentalmente hablando, la decoración interior es sencilla, similar a la de la mía. Había un ligero y suave aroma en el aire, similar al de un ambientador.
A pesar de que era un poco claro, se estaba convirtiendo en él. Una habitación muy bien arreglada.
—Toma asiento. ¿Quieres un poco de café?
—Sí. Siento molestarte.
—No te preocupes por eso. Yo fui el que preguntó.
Esta era una experiencia relativamente nueva para mí, ya que yo solía ser el único que recibía invitados.
—Como continuación de lo que estábamos hablando hace un momento....
Habló una vez más mientras preparaba el café en la cocina.
—Me pregunto si realmente no hay manera de salvar a todos.
—No lo sé. Tal vez no puedo pensar en nada.
Di la misma respuesta que antes.
A pesar de saber que esta sería mi respuesta, Hirata todavía parecía estar buscando la salvación.
Tenía la intención de que mi respuesta lo consolara, pero parecía haber sido contraproducente.
—Si no puedes pensar en nada, dudo que alguien más pueda hacerlo.
—Me estás dando demasiado crédito.
No tenía ni idea de cuándo empezó a evaluarme tan bien.
—He sentido que eres una de las personas más confiables de la clase desde ese asunto con Karuizawa-san.
Hirata habló como si hubiera visto la verdadera naturaleza de mi corazón.
—No estoy seguro de que eso sea acertado.
Cuando el agua terminó de hervir, me dio una taza de café.
—Estoy siendo honesto. Aunque eres una persona modesta, así que seguramente lo niegues.
En este punto, no importa lo que diga, sería un desperdicio de esfuerzo.
Incluso si negara sus afirmaciones, Hirata no me creería.
Empecé a pensar en cómo sería mejor cambiar de tema, pero Hirata rápidamente continuó, anticipando mi intención de hacerlo.
—El hecho de que alguien tenga que ser expulsado durante este examen... no puedo aceptarlo, por mucho que lo intente. No existe tal cosa como alguien a quien no le importe si un compañero se ve obligado a marcharse.
—No es que no sepa a qué te refieres, pero simplemente no tienes otra opción. Sólo tenemos hasta el fin de semana para tomar una decisión.
—Una decisión, ¿eh? Ayanokouji-kun.... ¿Crees que alguien en particular debería ser expulsado?
Me miró con ojos penetrantes.
Aunque tenían un aspecto suave, también parecían contener algo completamente distinto.
—En realidad no.
Puede que se haya interpretado como una declaración injustamente neutral, pero fueron mis pensamientos honestos sobre el asunto. A pesar de que había algunos estudiantes en consideración, nadie quería nominar abiertamente a uno para su expulsión. Sería mejor determinar a quién expulsar con una discusión en la clase.
—No tenemos más remedio que aceptarlo, quienquiera que sea.
—Qué sensato. Comparado con alguien como yo, estás más hecho para ser el líder de la clase.
Hirata tomó la iniciativa de organizar la clase a principios de año, pero ahora sus palabras estaban llenas de una tímida incertidumbre.
Había una sola cosa específica que podía hacer para prepararse.
—¿Qué debo hacer para seguir adelante? ¿Exactamente cómo debo hacer frente a este examen?
Puede que sea un poco fuera de lugar darle consejos, pero Hirata siempre ayuda a los que le rodean.
Quería hacer algo para ayudarle....
—No quiero que te fíes de mi palabra, pero te diré lo que pienso.
—De acuerdo.
—Pongamos a un lado por un momento los pensamientos idealistas sobre “salvar a todos”. Desde hace tiempo te has devanado los sesos, preguntándote: "¿De quién debemos deshacernos?", pero aún no has podido tomar una decisión.
Mis palabras le preocupaban un poco, pero Hirata finalmente asintió con la cabeza.
—En cuyo caso, ¿qué tal si intentas hacer lo contrario? En vez de pensar: "¿De quién debemos deshacernos?", piensa: "¿A quién debo salvar?".
—¿A quién debo salvar...? Por supuesto que quiero salvar a todos...
—Asigna una prioridad a cada estudiante de la clase. Clasifica a todos, incluyéndote a ti, uno a la vez de mayor a menor importancia. Por supuesto, puede haber algunos estudiantes con aproximadamente la misma importancia, pero debes tratar de hacerlo de todos modos. Puedes hacerlo simple y basarlo en quien más te agrade, o puedes basarlo en cuánto han contribuido a la clase hasta ahora.
Con la elaboración de un ranking como éste, inevitablemente habrá un estudiante en último lugar.
—Eso.... Pero...
Era una solución increíblemente sencilla.
Sin embargo, Hirata no sería capaz de hacerlo. Su corazón seguía empeñado en salvar a todos.
Pensaba que clasificar a sus compañeros de clase de esta manera sería un acto escandaloso.
—Digamos que hago un ranking. La lista que yo haga no será necesariamente la misma que la de nuestros compañeros.
Con esta excusa, siguió huyendo.
A este ritmo, el día del examen especial llegaría y él estaría completamente indefenso.
—Eso está bien. Creo que primero debes tomar tu propia decisión.
Por ahora, este era el único consejo que podía darle.
Además, cualquier decisión que tomara a partir de ese momento le correspondía tomarla a él mismo.
Agradecido, tomé un sorbo del café que me preparó.
Era de una marca diferente al café que yo suelo comprar, ya que tenía un amargor algo potente.
—Bueno, sí. Probablemente tengas razón.... Recientemente he estado consumido por el deseo de huir de todo esto.
Hirata siguió mi consejo e hizo todo lo posible por aceptarlo.
No creo que vaya a ser fácil de inmediato. La idea puede dejar un mal sabor de boca y terminar siendo rechazada por completo.
Sin embargo, hizo todo lo posible para aceptarlo con una mente abierta.
—Haa.... Muy bien. Gracias.
Hirata pronunció palabras de agradecimiento.
Por el momento, nuestra conversación pareció llegar a su fin.
—¿Puedo preguntar algo un poco insensible?
De repente, al cambiar de tema, decidí preguntar sobre algo que me causaba curiosidad.
—¿Hm? ¿Qué pasa?
—¿Alguien se te ha confesado desde que rompiste con Karuizawa?
—Bueno, esa es una pregunta inesperada. Nunca pensé que me preguntarías algo así, Ayanokouji-kun.
Había una mezcla de sorpresa y desconcierto en la cara de Hirata.
Me interesaba el potencial de los intereses amorosos de Hirata debido a mi conversación anterior con nuestra compañera de clase, Mii-chan. Antes del examen de fin de año, ella me pidió consejo porque estaba interesada en Hirata, así que tenía curiosidad por saber qué había pasado con eso. Me preguntaba si ya había tomado acción.
—Bueno, no diré quién, pero... sí, una chica se acercó a mí.
En otras palabras, las chicas ya estaban empezando a confesarse a Hirata.
Tanto si se trataba de Mii-chan como si no, no tenía intención de presionarlo más para averiguarlo.
A pesar de todo, los tipos atractivos como Hirata son realmente increíbles. Las chicas se lanzaban constantemente sobre él, aunque no haga nada. No, más bien, la popularidad de Hirata provenía de la forma en que se comporta. No holgazanea de ninguna manera.
—¿Vas a salir con esta chica?
—Por supuesto que no. No voy a salir con nadie ahora mismo.
Afirmó con decisión su postura al respecto.
—¿Hay alguien que te guste o algo así?
Podría entender lo que decía si él sólo tuviera ojos para la persona a la que su corazón estaba dedicado.
—Salir con alguien... es demasiado para mí ahora mismo. No estoy cualificado.
—Si así es para ti, entonces no debe ser más que una quimera para alguien como yo.
En primer lugar, cuando se trata de enamorarse, no hay necesidad de cualificaciones.
—No soy apto paro el amor.
Cuanto más capaz es la persona, más humilde es.
Cuanto menos capaz es la persona, más arrogante es.
Finalmente, nuestra conversación terminó sin que ninguno de los dos profundizara demasiado.
PARTE 7
—Perdón por llamarte tan tarde, Ichinose.
Esa noche, a las once y media, invité a Ichinose a mi habitación.
No hubiera sido extraño que estuviera en guardia y rechazara la oferta, pero no parecía tener ningún problema con ella.
—¡Está perfectamente bien! Aunque, es muy raro que te acerques a mí de esta manera.
—Es porque realmente quiero hablar contigo. Por el momento, si te parece bien, siéntete libre de sentarte en la cama. El suelo puede estar un poco frío.
Después de expresar su gratitud, Ichinose se sentó en la cama.
—Este.... Mi corazón late un poco rápido...
—¿Hm?
—Oh. No, no es nada. ¿Cómo es que no pudimos hablar por teléfono?
¿Por qué, eh?
Tomé una taza blanca mientras ponía a hervir un poco de agua en una tetera.
—Quería confirmar un montón de cosas contigo que son difíciles de transmitir con sólo hablar por teléfono.
—Ya veo.
—Supongo que iré al grano y te preguntaré directamente. ¿Qué vas a hacer con el examen?
—¿Quieres continuar la conversación de esta mañana? Bueno, he estado pensando mucho en cómo pasar el examen sin expulsar a nadie... supongo.
—¿Y se te ha ocurrido algo específico?
Eché un vistazo por encima del hombro y observé cómo intentaba responder a la pregunta.
Por supuesto, era algo que había dicho por cortesía.
Los dos sabíamos que no había otra forma de hacerlo que no fuera a través de la entrega de más de veinte millones de puntos privados.
—Por desgracia, aún no... ya no queda mucho tiempo, así que me estoy poniendo un poco ansiosa.
No pude ver ninguna señal de que escondiera algo basado en sus palabras o su comportamiento. Me recordaron que, durante el examen especial del crucero, me había impresionado la inesperada cara de póquer de Ichinose.
—Pensaba que podrías ir a pedirle ayuda al presidente Nagumo.
—¿Qué clase de ayuda?
Si no están adecuadamente preparados para ello con anticipación, hacer una pregunta como ésta podría hacer que la otra persona se ponga nerviosa, pero Ichinose aún así me devolvió la pregunta como si no nada revelador se hubiera preguntado en absoluto.
Sin embargo, lo que iba a decir a continuación seguramente sería suficiente para romperle la cara de póquer.
Cuando el agua de la tetera empezó a hervir, preparé una taza de chocolate caliente y se la di.
—Gracias.
—Este examen suplementario es diferente a los que hemos tenido antes. No se puede resolver sin que alguien sea expulsado por la fuerza, con la única excepción de ahorrar veinte millones de puntos privados. No importa cuántos puntos de la Clase B se hayan acumulado, no hay forma de que hayas alcanzado los veinte millones. Con esa suposición en mente, no tendrías otra opción que buscar ayuda de un tercero.
Los ojos de Ichinose se movieron hacia su chocolate, soltando pequeñas y constantes respiraciones para enfriarlo.
—¿Es eso verdad? Bueno, Asahina-senpai también lo sabía. Aunque, no pensé que te lo diría, Ayanokouji-kun.
Se dio cuenta de que no servía de nada tratar de ocultarlo más, e inmediatamente se percató de cómo lo sabía.
—Entonces, ¿supongo que también has escuchado de su condición para prestarme los puntos que necesitamos?
Mientras respondía con un pequeño asentimiento, una amarga sonrisa tomó forma en la cara de Ichinose.
—¿No es ridículo? ¿En muchos sentidos...?
Prestar puntos privados con la condición de entablar una relación.
Además, estaba pensando seriamente en aceptar esta condición.
Esto que quizo decir con “En muchos sentidos”.
—Nagumo-senpai más o menos me prohibió revelar algo sobre nuestro trato. Me dijo que si lo hacía, podría olvidar que alguna vez existió. Aunque, ya que Asahina-senpai es la que te lo dijo, debería estar a salvo por el momento.
—No te preocupes por eso.
—Dices eso, pero esto no tiene nada que ver contigo, ¿verdad....?
—Muy cierto.
Es un problema de la clase B y una decisión de Ichinose.
—¿Cuántos puntos más necesitas?
—Un poco más de cuatro millones.
Sólo por entrar en una relación, los cuatro millones de puntos que su clase necesitaba serían contabilizados y podrían pasar el examen sin que nadie fuera expulsado.
—Vaya condición te ha dado Nagumo.
—Sí. Normalmente sería imposible para alguien como yo pedir puntos y salir con Nagumo-senpai. En términos generales, como me está prestando los puntos, es lógico que esté en posición de pedirme algo a cambio.
Mientras escuchaba su opinión sobre el asunto, tuve una idea de lo que estaba pensando. No había manera de que permitiera que alguien fuera expulsado de la clase B. Por esa misma razón, se estaba preparando para sacrificarse.
—Es la única manera de salvar a todos los de la clase B.
—¿De verdad...?
En este momento, no hay nada que pueda decir para ayudarla.
Los puntos privados eran lo único físicamente capaz de ayudar a Ichinose ahora mismo.
Siendo realistas, cuatro millones era un número que ni siquiera yo podía adquirir, por mucho que lo intentara.
—¿Estás.... preocupado por mí?
—Lo siento si estoy siendo impertinente.
—No, en absoluto. Más bien, estoy súper feliz.
A pesar de su respuesta, su expresión aún estaba un poco nublada.
—Pero, honestamente, sigo un poco preocupada.... No habría vacilado en mi decisión si no hubiera hablado contigo.
Ichinose lentamente tomó un sorbo de su chocolate.
—...Entonces ¿qué piensas, Ayanokouji-kun?
—¿Sobre el trato con Nagumo?
—Sí. Desde tu punto de vista, ¿qué opinas de lo que intento hacer?
Los ojos de Ichinose se fijaron en los míos.
Le contesté, cargando con todo el peso de sus expectativas.
—Es un método disponible para ti y sólo para ti, que puede evitar que un compañero sea expulsado. Está disponible para ti porque te uniste al consejo estudiantil e hiciste conexiones con el presidente Nagumo. Llegar a un acuerdo con él para alcanzar los 20 millones de puntos es definitivamente una forma de hacer todo esto.
—¿No me desprecias por eso?
—No hay necesidad de menospreciarte. Aunque, para ser completamente honesto, no estoy seguro si vale la pena pagar veinte millones de puntos privados sólo para salvar a un compañero.
—...¿En serio? —Ichinose lentamente tomó otro sorbo de su chocolate—. —Digamos, Ayanokouji-kun.
Continuó manteniendo contacto visual.
—¿Hmm?
—Ayanokouji-kun, ¿tal vez eres alguien realmente increíble?
Que me llamara alguien realmente increíble, no sabía cómo reaccionar.
Solo le había dicho exactamente lo que había oído de Asahina.
—¿Qué te lleva a creer que lo soy? Lo siento, pero no es algo de lo que esté al tanto.
—Sólo te hace aún más asombroso si eso es verdad. Después de todo, tú...
Se reservó las palabras que iba a decir.
—¿Qué pasa?
—No, nada en absoluto.
Era como si no entendiera del todo lo que quería decir.
Como si su boca se hubiera movido un paso más rápido que su cerebro.
—...¿Qué es esto?, me pregunto...
Ichinose murmuró en voz baja, haciéndose esa pregunta a sí misma. Aunque había sido un poco forzado, me alegró oírlo de ella en persona.
Pude ver que, pase lo que pase, Ichinose actuará por el bien de la Clase B.
Después de toda esta ansiedad, Ichinose tomará una decisión.
Es decir, entrar en una relación con Nagumo Miyabi.
Ahhh, Ayanokouji que te costaba decir "ichinose no quiero que seas nada de nagumo quedate conmigo"
ResponderBorrarEste wey si sabe que pedo con la vida
BorrarJajaja opino lo mismo :(
BorrarQuede con mucha intriga pero que se le va hacer, gracias a los que lo traducen al español para los tontos como yo que no saben ingles :D
ResponderBorrarPd:yo creo que ayanokouji va a expulsar a kushida por el acuerdo de ptos que hizo antes
Cual acuerdo que no me a cuerdo
BorrarJusto estava pensando en eso
BorrarDudo que sea en este examen por las pocas posibilidades que hay, pero es Kiyopon asi que todo es posible xD.
BorrarYo creo que va a ser en el siguiente examen especial.
Solo digo que el que va ser expulsado de la clase c es uno de los 3 idiotas que se juntan con ayanokouji
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ResponderBorrarcuando saldrá la continuación :(
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ResponderBorrarEsperando con ansias la próxima parte. Muchas gracias por aceptar el trabajo de traducir esta novela, es mi favorita, gracias :)
ResponderBorrarNo han penasado que si los alumnos de la clase b le dan puntos de salvacion al escojido para expulcion de la clase c y viceversa ambas clases se salvan de la expulcion
ResponderBorrarBueno, tu estas pendejo o que hijo.
BorrarDime si ala clase B le faltan puntos para que le daría puntos ala clase C así viseversa que no pones atención 🤷🤦
BorrarCuantos capitulos tiene este volumen?
ResponderBorrarOh por favor no quiero que Ichinose este con Nagumo, no quiero un emergence :/
ResponderBorrarTodas las clases hicieron un buen trabajo con no dejar a nadie ser expulsado, pues eso les quitaria puntos, pero ahora no tienen de otra. Quien priorize a la clase no dudara en elegir a alguien para que se vaya mientras protegen a otros y de paso aprovechar para "optimizar" su clase, pero ah surge el problema sobre la personalidad de las clases. La actual clase D eliminara al que menos quiera, la clase A sacara a Katsuragi salvo que algo especial ocurra, la clase B parece debatirse sobre si mantener a sus estudiantes y vaciar sus ahorros o dejar marchar a uno, y la actual clase C esta a punto de probar que tanta union hay entre sus compañeros.
ResponderBorrarCuriosamente, Kushida no ha aparecido, solo se la ha mencionado.
Alguien más pensó en la posiblidad de que ichinose salga con el presidente del club estudiantil por los cuatro millones y después de esto terminar con el, porque desde que empecé a leer en ningún momento se mencionó que la relación debía ser duradera.
ResponderBorrarSoñar no cuesta nada
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