Youkoso Jitsuryoku Shijou... Segundo Año Volumen 5 - Capítulo 7

 LA DESICIÓN DE HORIKITA SUZUNE

 

―Entonces, ahora anunciaré los resultados de la votación.

Resultados de la décima votación: 1 en apoyo, 38 en Oposición.

La escena que me había cansado de ver se repitió de nuevo. Pedirles que se manifiesten no cambiará eso. Tampoco lo hará ningún tipo de discusión. El número de votos de apoyo no aumentará ni disminuirá.

Los resultados harán que uno se pregunte si realmente se está produciendo una votación justa y no sólo se repite la misma pantalla.

―Como no se ha logrado la unanimidad, el intervalo comenzará ahora.

Incluso Chabashira-sensei, que anunció con las frases estándar, mostró signos de fatiga. Ahora que nos había hablado de su pasado, lo único que podía hacer era ver pasar esta moción como una profesora.

―¿Por qué.....? ¿De verdad hay alguien que vota intencionalmente en apoyo?

Era comprensible que Keisei planteara una pregunta así. En este punto, aunque quisiéramos continuar la discusión, ya no había nada que discutir. Me pregunto cuántas veces Horikita y Yousuke habrán intentado persuadir al culpable.

―Todos los que votan en contra........ ¿sería posible que levantaran la mano?

Como llamar al que apoyaba la moción era inútil, Yosuke pidió que levantáramos la mano los que nos oponíamos. Aunque propusiera una inversión sin sentido de la tendencia, su diligente figura en busca de un avance no vaciló.

Las manos de ambos lados se extendieron hacia arriba. Por supuesto, yo también levanté la mano. De esta manera, se podía ver que 38 personas, incluyendo a Yousuke, estaban en segura oposición.

El único que no levantó la mano fue Kouenji......

―No levanté la mano, pero voté en oposición, así que preocuparse es inútil.

Kouenji respondió a Yousuke, que le miró con ansiedad.

―¿Podemos realmente confiar en ti, Kouenji? De hecho, creo que fuiste tú el que votó a favor de ......

―¿Cuántas veces han sido? Esta discusión. Realmente nunca te cansas de ella.

Al no tener otra forma de evitar esta situación, Sudou pinchó a Kouenji. No era tan difícil de creer que alguien de esta clase siguiera mintiendo. Después de todo, podía haber alguien que levantara la mano con orgullo para decir que votaba en contra, y sin embargo, en realidad podía estar votando a favor.

―No quiero pensar que algunos de los que levantaron la mano ahora estén mintiendo, pero a partir de ahora miraré a todos y cada uno de ellos y les preguntaré directamente. Si alguno lo está haciendo, que me diga sinceramente... No, quiero que la próxima vez vote en oposición.

Diez minutos de lucha. Horikita no escatimó tiempo ni esfuerzo para enfrentarse a cada persona individualmente. Mis otros compañeros seguramente están agotados por esto, pero claro, no es como si pudieran decir eso en voz alta en una situación así.

Haruka, Airi, Keisei, Akito.

Ike, Sudou, Mii-chan, Matsushita, Kushida, Onodera, Okitani, Mori. Todos ellos miraron directamente a los ojos de Horikita y respondieron.

Que yo (yo) voté en contra.

(TN: ore(boku), masculino (femenino))

Finalmente, Horikita llegó a la entrada del aula, la última persona. Sus ojos eran una mezcla de impaciencia y ansiedad, pero seguían ardiendo de pasión.

―¿Qué tal tú, Ayanokouji-kun?

―Por supuesto, voté en oposición.

―...... Así es.

Con esto, suponía que una vez más, se hizo un pseudo-interrogatorio a todos.

No hubo ningún cambio en la declaración de que todos mis compañeros votaron efectivamente en oposición. Lo único que quedaba por hacer, en realidad, era apelar a los remordimientos de conciencia que le quedaban en el corazón y rezar para que votara en oposición a ella.........

―Ya casi estamos en el minuto diez. Vuelve a tu asiento, Horikita, y comenzaremos la votación.

Llegó de nuevo el momento de la votación. La respuesta fue:

11º resultado de la votación: 1 en apoyo, 38 en oposición.

El resultado no fue diferente. No había más palabras que añadir. Se mostraron los mismos, mismos, mismos y mismos resultados.

―¡Ah cielos! ¡Me voy a volver loco! ¿Qué está pasando?

Rascándose la cabeza caóticamente, Sudou golpeó su codo con fuerza sobre el escritorio.

―H-hey, pero en serio, ¿qué vamos a hacer? Se nos acaba el tiempo, ¿no?

Hasta ahora, todo el mundo tenía la suposición de que hasta el que apoyara la moción con insistencia acabaría por romperse. Estoy seguro de que Horikita y mis otros compañeros sabían que no debía haber nadie que pudiera elegir quedarse sin tiempo.

Absolutamente, bastante seguro, probablemente, la persona que vota de acuerdo votará en oposición por miedo a quedarse sin tiempo. Y justo a tiempo, pero por unanimidad en oposición, aprobarían el examen especial.

Después trabajarían en los próximos festivales deportivo y cultural. Ya deben haber pintado ese cuadro. Sin embargo---

El voto de apoyo no se movió. Esperar otros 10 minutos, 30 minutos o incluso una hora no cambiará esa respuesta. Lo único que nos esperaba era el peor camino posible: se nos acaba el tiempo.

Faltaban nueve minutos para la siguiente votación. Estos nueve minutos ya no eran sólo nueve minutos. Después de este punto, estaremos bajo un plazo de dos horas.

Durante las últimas tres horas, Horikita luchó duramente contra este desafío final. No es que la estrategia de Horikita fuera ingenua. Aunque hubiera hecho todo lo posible para conseguir un voto unánime en contra, simplemente hubiese sido "imposible".

¿Cuál era el motivo? ¿Cuál era la razón de fondo? Era porque todas las formas de persuasión, negociación y todas las demás acciones de este tipo no tenían sentido. El que estaba de acuerdo luchaba sólo para evitar una oposición unánime.

Lo más aterrador de todo es que la persona que votó a favor no consideró que el agotamiento del tiempo fuera lo más negativo. Normalmente, eso no sería posible en este examen en particular. Si analizamos esta cuestión con objetividad, las prioridades de las tres opciones están de hecho fijadas y determinadas.

Oponerse ApoyoEl tiempo se acaba

Se trata de una desigualdad absoluta que es común a las cuatro clases y a todos los alumnos. Esta prioridad se solidifica, es la premisa básica, por así decirlo, sobre la que se basa el examen especial. Sin embargo... ¿qué ocurre cuando sólo hay un alumno con un signo de desigualdad diferente?

Apoyo El tiempo se acaba Oponerse

Si las prioridades se dispusieron en un orden tan distorsionado, el examen especial se vuelve insostenible.

Por ello, la escuela dispuso de un control exhaustivo y de normas para evitar cualquier intervención de otras clases. Para evitar que firmen contratos con gente como Sakayanagi y Ryuuen, que los invitarían a sus respectivas clases si los dejan sin tiempo, o les transfieren un gran número de puntos privados.

Los exámenes especiales se volverían caóticos y confusos, ya que las personas que no lo tuvieran claro se mezclarían.

Aunque sigamos siendo obstinados, lo único que nos aguarda es "quedarnos sin tiempo".

Entonces, ¿qué debemos hacer? En las dos horas que quedan, sólo hay una cosa que debo conseguir. Un de acuerdo unánime. Esa es la mejor solución. No había otra manera de abrir la puerta que hacer que esto suceda.

Seguramente ya está en la mente de Horikita. Pero fue incapaz de aventurarse. Cuando se trata de expulsar a tus compañeros de clase, desde luego no es fácil. Seleccionar a una persona para expulsarla de la escuela es más difícil que hacer que el voto sea unánime en oposición.

Una vez que se da el primer paso, no hay vuelta atrás. Porque no se podía volver a oponerse a la moción porque, efectivamente, no se podía expulsar a nadie. Pero aun así, dudé en seguir adelante con mi plan cuando llegó el momento de votar.

Me pregunto por qué. La ruta ideal estaba fuera, y ya me estoy quedando sin tiempo para hacer las cosas que tengo que hacer para completar el plan. El tiempo extra retrasará el progreso para hacer la votación unánime en apoyo y posteriormente la selección del expulsado.

Pero aun así, quiero intentar que sea unánime en oposición sólo una vez más, aunque me lleve más de mi precioso tiempo. Un sentimiento irracional que nunca antes había tenido afloró en mi mente. Me pregunto qué tipo de decisión habrías tomado en una situación como ésta, le pregunto a Horikita Manabu en mi mente.

No había forma de obtener una respuesta, pero decidí modificar mi plan. Decidí apostar por una última oportunidad, aunque no cambiaré mi estrategia.

―Entonces, los resultados.......

Chabashira-sensei, que había terminado el recuento, se quedó momentáneamente sin palabras

―..... se mostrarán ahora.

Resultados de la 12ª votación: 2 de acuerdo, 37 en oposición.

―¿¡Estás bromeando, verdad!? ¿¡Por qué!? ¿¡Aumentó!?

Después de un largo período de tiempo, una persona pasó de los 38 que se habían opuesto sistemáticamente hasta el momento, a uno que estaba de acuerdo.

El impacto debió ser suficiente para resquebrajar la oposición, que se había mantenido unida.

―Parece que tengo un mal sueño......

La persona que emitió este voto fui yo, precisamente. No fue un voto aislado. Fue un fuerte voto de apoyo de una de las 37 personas que estaban firmemente unidas y Kouenji. Horikita, que ya no tenía los pensamientos de antes, se puso a pensar de nuevo.

¿Qué es lo que debemos hacer si no podemos llevar el número de votos de apoyo a cero? Horikita comprendió inmediatamente que se trataba de una votación que se había realizado para evitar la opción de "agotar el tiempo". Aparte de esto, sólo quedaba la peor opción de todas.

Es decir, quedarse sin tiempo. Aunque no hubiera expulsados, los puntos de clase se restarían en 300. Suponiendo que todas las demás clases hubieran aprobado, la diferencia sería de 350, y si hubiera una clase que hubiera aprobado la última moción por unanimidad en apoyo, la diferencia sería de hasta 450 puntos.

Con una diferencia tan grande, no había ninguna garantía de que pudiéramos recuperarnos aunque nos quedara más de un año de clase. No, de hecho, podría decirse que era casi imposible.

Evitar la expulsión de alguien a cambio de renunciar a la clase A no era cosa de risa.

Y una vez que esta idea se generaliza, es inevitable que la gente empiece a cuestionar el sentido de seguir votando en contra. Empezarán a pensar que es más fácil movilizar los votos de la oposición, que tienen el potencial de moverse al unísono, que movilizar el voto de apoyo, que no ha cambiado.

Aunque nos espere el mayor obstáculo de a quién expulsar, podremos dar medio paso adelante desde esta situación de mezquindad.

―H-hey. Creo que no tenemos más remedio que votar en apoyo, ¿no crees?

―¿Qué demonios estás diciendo? Si hacemos eso, alguien tendrá que ser expulsado.

―Pero, ¿sabes? ...... si el tiempo se agota, estamos todos acabados, ¿no?

La erosión gradual de los votos de apoyo.

Los primeros candidatos que iniciaron la jugada fueron los que confiaban en que no serían expulsados.

Por otro lado, los que siguieron votando en contra quizá eran los que pensaban que podrían ser expulsados.

El voto a favor de la moción siguió creciendo en nosotros. Sin embargo, es probable que ni siquiera una persona admitiera que había votado en apoyo. Era natural. Si se descubría que votaban a favor, podrían ser ellos los expulsados.

Sólo cuando el voto es unánime en apoyo de la moción, se puede pasar a la siguiente fase, que es la de seleccionar al expulsado en igualdad de condiciones.

Resultado de la decimotercera votación: 5 en apoyo, 34 en oposición.

Tres votos más fueron en apoyo. ¿Quién votó en apoyo?, tal voz aún permanecía fuerte en el aire, pero esto fue lo más lejos que llegó.

Resultado de la 14ª votación: 12 en apoyo, 27 en oposición.

El aumento constante del número de votos de apoyo no se detuvo, y la cifra no hizo más que crecer. Finalmente, por primera vez, el número de votos de apoyo alcanzó los dos dígitos, llegando a casi un tercio de la clase.

En la siguiente ronda de votaciones, seguramente habrá aún más votos de apoyo. Después de llegar a este punto, el tiempo límite era de sólo una hora y media.

―E-Esperen un momento, chicos. Si realmente piensan que es una buena idea que apoyemos, ¡están equivocados!

Incapaz de aguantar la crisis, Yousuke pide a los que votaron a favor de la moción que esperen.

―Entiendo que tenemos que evitar que se nos acabe el tiempo. Pero eso no significa que apoyar esta moción por unanimidad sea la solución, ¿no creen?

―S-sí ......Después de esto, tendremos que alcanzar la unanimidad sobre un individuo de los 39 que somos. Es todavía más difícil conseguir la unanimidad a favor que en contra. Sólo nos queda una hora y media. ¿Se dan cuenta de eso?

Para terminar esto en apoyo de la moción, tendremos que decidir quién dejará la escuela.

―No es demasiado tarde. Creo que deberíamos votar en contra.

―Estoy de acuerdo. No se dejen llevar por los votos.

Compañeros de clase que siguen afectados emocionalmente. Es el momento en el que ya no es posible hacer un juicio normal sobre si votar en apoyo u oposición es correcto.

―Sobre todo, ustedes mismos saben que no deben votar a favor. Este hecho se puede demostrar por las doce personas que han votado a favor, y ni siquiera una de ellas se ha presentado. ¿No estoy en lo cierto?

Aunque se repita la votación y aumente el número de votos a favor, no habrá unanimidad ideal sin una intervención importante para forzarla. En un principio, pensaba hacerlo para conseguir la unanimidad en la próxima votación, pero decidí adelantarlo en mi agenda y utilizarlo aquí y ahora.

―¿Puedo compartir mi opinión?

―¿Eh...?

Como si Horikita no lo hubiera esperado, se quedó un poco desconcertada por mi repentina interrupción.

―Horikita. Voté en apoyo en la 14ª ronda.

Esto era una mentira. Ya había votado en apoyo desde la 12ª ronda.

Pero nadie puede probarlo.

―¿Ayanokouji-kun lo hizo? Por qué.......

―No importa, si seguimos oponiéndonos, se nos acabará el tiempo. No hay otro camino para nosotros que votar en apoyo. Creo que todos deberíamos saberlo ya.

Para aumentar el número de votos de apoyo, este papel lo tenía que hacer alguien. Desde el asiento de al lado, Satou me miraba con ansiedad. No, no era sólo Satou. Todos los preocupados por esta situación lo estaban.

―Esto no resolverá la raíz del problema. Sólo acabaremos discutiendo sobre a quién expulsar.

―Lo sé. Pero al menos podemos salir del estancamiento. Aunque descubramos quién está votando a favor de la moción, no creo que esa persona vote en contra. En otras palabras, no podemos esperar que el voto sea unánime en contra. Pero ahora, tener un voto unánime en apoyo es posible. Y entonces podemos juzgar al único desertor y juzgarlo nosotros, las 38 personas. Es un poco forzado, pero es posible que obtengamos la unanimidad.

Hay una persona que tanto Horikita como yo deberíamos tener en mente. Por supuesto, no hay garantía de que sea esa persona, pero ella debería saber a qué me refiero.

―Eso es──

―¿Juzgarlo? ¿Crees que tenemos derecho a juzgar a alguien sólo porque vota en apoyo?

Yousuke capta el final de las palabras y lo contrarresta.

―Sí. Si no conseguimos que haya unanimidad, nunca podremos pasar a la clase A. No creo que nadie piense que el culpable que sigue votando en apoyo a pesar de saber esto, no es culpable en absoluto.

―Pe-pero, pero eso es..... si se agota más tiempo, estoy seguro de que el autor hará──

―¿Más? Sólo hay unas pocas oportunidades más para que votemos. ¿Vas a involucrar a todos nuestros compañeros en esa escasa posibilidad? Cuantas menos oportunidades nos queden, más se cierra el camino hacia el apoyo. Eso nos quitaría por completo hasta la posibilidad de alcanzar la unanimidad.

Aunque no me haya molestado en decirlo, estoy seguro de que tanto Yousuke como mis compañeros lo saben. La razón por la que muchos de mis compañeros no dieron el primer paso es porque el mayor obstáculo para ellos es votar en apoyo de esta moción.

―Es cierto que hay muchos que dudan en votar a favor. Por eso me gustaría identificar al que primero empezó y sigue votando en apoyo de la moción y organizarlo para que sea el expulsado. En otras palabras, podemos garantizar la seguridad de los que han votado en contra.

Satou, que había estado escuchando mi explicación más que nadie, levantó su pequeña mano.

―Me alegro de oír eso... pero será inútil si no sabemos quién ha estado votando en apoyo. Al final, cuando se acabe el tiempo, sólo tendremos que proponer candidatos al azar para la expulsión....... Da miedo.

―Si no podemos acotar el autor, podemos optar por volver a agotar el tiempo. Lo que tenemos que evitar ahora es quedarnos aquí y no dar ese paso cuando hay posibilidad de aprobar.

A mis otros compañeros que dudaban les di un empujón en la espalda, dándoles más cosas a tener en cuenta en sus decisiones.

―Horikita sacó el tema un poco antes, pero tengo un indicio de quién es la persona que vota continuamente en apoyo.

―Si ese es el caso, ¿por qué no decirlo aquí y ahora? Pero tampoco Horikita dijo el nombre de esa persona. ¿No significa eso que sólo es un farol? Para ser exactos, pensabas que, si amenazabas al autor, éste también votaría en contra, ¿no?

Aunque el razonamiento de Miyamoto no era correcto, desde luego no es descabellado que lo pensara.

―Si realmente tienes una idea de quién es, vamos a intentar convencer a esa persona.

―Estoy haciendo esto ahora porque no puedo hacerlo. Si mencionara el nombre de esa persona, nunca podremos conseguir su voto de apoyo. En cambio, se endurecerá y seguirá adelante hasta el final. Quiero evitar eso.

Esto era tanto un incentivo para votar en apoyo como una súplica de última hora por mi parte. Si al autor se le dice todo esto, seguramente sabrá que hemos sido conscientes de que siguió votando en apoyo.

Si tuviera miedo de ser expuesto, podría que votara en contra en la siguiente ronda.

―Decídete, Horikita. Tu oponente está tratando de hacerte caer. No hay otro camino que cazar o ser cazado.

Dejé atrás a la silenciosa Horikita y dirigí mi mirada a otra persona.

―Y Yousuke. Entiendo cómo te sientes, no quieres que expulsen a nadie en nuestra clase. Si realmente no quieres que nadie sea expulsado pase lo que pase, tenemos que obtener resultados antes de que se acabe el tiempo. Lo sabes, ¿no?

El día antes de que comenzara este examen especial, advertí a Yosuke sobre esto. Comprendí que estaba luchando bien sólo con verlo de reojo. No entendía por qué quería seguir resistiendo.

―Pero, yo.......

―La próxima ronda de votaciones decidirá nuestro destino.

―.......Yo.......

Era una decisión dolorosa, pero aun así Yousuke era diferente al de antes. A partir del examen de la isla desierta y de la votación en clase del año pasado, donde lo único que pudo hacer fue quedarse quieto, ha crecido.

―Tienes razón. Es..... molestar a toda la clase sólo por mis propios pensamientos, eso no es bueno.....

Con la cabeza gacha, decidió hacer su jugada.

―Voy a votar en apoyo. Y como dijo Ayanokouji-kun, creo que debemos hacer desaparecer a la persona que ha votado en apoyo todo el tiempo.

La decisión de Yousuke, el corazón de la clase, cambiará la situación aún más drásticamente.

―Sólo quedas tú, Horikita. Es hora de que te decidas, así evitaremos llegar al límite de tiempo.

El tiempo se agotaba antes de la siguiente ronda de votaciones. Pronto comenzaría.

―Por favor. Sólo una vez más para que logremos la unanimidad en oposición. Si no conseguimos una oposición unánime en la próxima votación...... entonces me...... decidiré.

Ya no habría próxima vez. Logramos crear esa situación. Comenzó la última ronda para la votación de la unanimidad de una auténtica oposición.

Todos ellos no tardaron nada y completaron la votación en segundos. Sin embargo, las cosas a veces divergen mucho entre lo ideal y la realidad.

Resultados de la 15ª votación: 1 en apoyo, 38 en oposición.

―¡Maldita sea! Sigue sin funcionar.

Fue peligroso forzar que los votos que habían empezado a fluir a favor de la moción se volvieran de nuevo en contra. Al acercarse el límite de tiempo, incluso esa última estrategia para hacerla unánime en oposición fue un fracaso.

Pero con esto, todo el mundo lo entendió. El autor que sigue votando a favor se preparó para que se nos acabe el tiempo.

―Horikita, Yousuke. ¿Está bien ahora?

Logré confirmar la determinación de los dos y obtener claramente su consentimiento.

En cualquier caso, los preliminares necesarios para la batalla de sacar al que pronto será expulsado de la escuela ya estaban en marcha.

Ahora que las intenciones de los dos protagonistas, Horikita y Yousuke, han quedado claras, la mayoría de los votos irán en apoyo. Pero aun así, es fácil imaginar que aquellos que estén preocupados por la posibilidad de ser expulsados dudarán en votar a favor.

Por eso, los que estén dispuestos a lanzar su voto en contra deben tener también una dosis adecuada de decisión.

―Si el próximo voto es en oposición, necesitamos que digan claramente por qué. Ya deberían saber lo doloroso que es consumir diez minutos de tiempo con una sola votación.

Si aún quedara tiempo, no sería descabellado que algunos expresaran sus quejas. Pero a falta de casi una hora, la vía de escape estaba completamente cortada. Es un trabajo duro, obligar a compañeros que no tienen capacidad de decisión a hacerlo.

―Ahora que llegamos a esto...... no tenemos más remedio que elegir quién será expulsado.

―¿Lo dices en serio?

―Yo tampoco quiero perder a ninguno de mis compañeros. Pero si no expulsamos a alguien aquí, el daño causado a la clase será enorme. Eso es algo que hay que evitar.

Si se observan los cambios en el recuento de puntos de la clase hasta ahora, el dolor de la pérdida de 300 puntos seguramente se sentirá. Los intervalos están obligados a durar 10 minutos. Deben estar dispuestos a resistir el impulso de huir y votar en contra.

Resultados de la 16ª votación: 39 en apoyo, 0 en oposición.

Fue unánime. Junto a este resultado, el miedo y la ansiedad de todos era palpable.

―Unanimidad en apoyo ¿eh?......

Chabashira-sensei murmura, como si se hubiera preparado para que esto sucediera y continuara avanzando.

En el momento de hacer esta elección, el único camino que quedó fue elegir a alguien que sea expulsado o quedarse sin tiempo. Por supuesto, esto último significaría que esta clase habrá sido derrotada hasta su graduación.

Es decir, de los 39 alumnos de esta clase, pronto habrá un expulsado dentro de una hora. Por supuesto, sé quién es la persona que debería ser expulsada.

―Para la determinación del candidato, cada individuo sólo puede ser nominado una vez. Deben nominar a una persona presionando su nombre en sus tabletas. Pero si no hay nominados, o si sus votos no superan la mitad de la clase, entonces, como se ha explicado de antemano, harán una votación para una persona elegida al azar.

Por fin llegó el momento de decidir quién será expulsado de la escuela, y naturalmente había muchos de mis compañeros mirándonos tanto a mí como a Horikita. Dense prisa en nombrarlo. La presión aumentaba continuamente sobre nosotros. Este fue un intervalo inestimable, incomparable con los anteriores. Aunque aún quedaban diez minutos, también debíamos elegir a quiénes nombrar.

―Ya que el voto unánime en apoyo de la moción está definido....... como mínimo, me gustaría que esperáramos a que el autor confesara en este intervalo. Según las circunstancias, podríamos optar por agotar el tiempo y ayudarlo.

Por supuesto, una propuesta de este tipo no podría suprimir las críticas. Eso es porque nadie aceptaría semejante elección, provocando la pérdida de puntos de la clase. Sin embargo, Horikita guardó silencio y siguió escuchando y soportando las quejas.

En cuanto a mí, necesitaba encontrar el momento adecuado, así que seguí su plan y me mantuve en silencio. Pasó un tiempo oscuro y duro con las quejas dirigidas a nosotros y con cada uno de mis compañeros echando miradas furtivas a sus compañeros de asiento al lado. No había forma de que alguien seleccionara a un alumno en concreto para ser expulsado. Se acercaba la hora del intervalo.

Si mis compañeros vieran su nombre en el monitor, sentirían como si les hubieran agarrado el corazón. Especialmente si es en la primera votación, la unanimidad al dejarse llevar no puede ser ignorada.

―Sensei, no hay problema si me nomino yo mismo, ¿verdad?

―Por supuesto que no.

―Entonces, por favor, voten por mí.

Dicho esto, Yousuke se presentó como ese alumno en concreto justo antes de que se acabara el tiempo.

Que Hirata Yousuke sea expulsado

En apoyo, en Oposición.

Este voto tenía un peso diferente al anterior. Si hubiera gente que votara a favor, sería como si le dijeran directamente a Yousuke que no les importaba que desapareciera, y que querían que lo hiciera.

Resultados de la 17ª votación: 6 en Acuerdo 32 en Oposición.

El silencio fue tan grande que se pudo escuchar el jadeo de cada uno de mis compañeros. La sensación de alivio ante la mayoría de la oposición y la presencia de las seis personas invisibles que votaron a favor de la moción normalmente seguirían persiguiéndolo durante algún tiempo.

Sin embargo, en lo que respecta a Yousuke, puede que incluso se sienta más aliviado con el hecho de haber podido superar el primer obstáculo con su candidatura.

―¿Qué hacemos.......? ¿Realmente vamos a expulsar a alguien de aquí........?

―Se nos acaba el tiempo. Ustedes dos, por favor, dígannos. ¿Quién fue el que votó en apoyo todo el tiempo?

Como si no pudiera esperar más, Keisei gritó exigiendo una respuesta.

―Por supuesto que les daré el nombre del autor que tengo en mente. Pero también creo que no es tan sencillo.

―¿No es tan sencillo? Ya no tenemos elección. Ya que decidimos expulsar a alguien, tenemos que averiguar quién es lo antes posible, aunque sea un segundo antes.

Muchos de mis compañeros seguían lamentando su decisión de votar en apoyo y ahora se sentían ansiosos. Seguramente también se sentían mentalmente presionados por la pérdida de los diez minutos anteriores.

Por eso querían algo que les hicieran sentir que no se habían equivocado al elegir el voto de apoyo.

―Para la próxima votación, si el tiempo pasa así, alguien será elegido al azar, ¿correcto......?

Era comprensible que Sudou se sintiera inquieto. Incluso Yousuke obtuvo 6 votos.

―No te preocupes, Ken. Votaré en contra si te eligen.......s-así que asegúrate de protegerme también, ¿de acuerdo?

―Eso debería ser obvio, Kanji. Sí. Si nos protegemos mutuamente, estaremos completamente bien, ¿verdad......?

―......Uuu......

Mis compañeros estaban perdiendo la compostura. Un débil grito se filtró entre ellos.

Ella se tapó la boca y luego trató de ocultar sus ojos, pero su voz se pudo escuchar claramente.

―K-Kikyou-chan..... ¿Es-Estás bien?

Mii-chan se apresuró a acercarse y puso su mano en la espalda de Kushida.

―Mm, lo siento.......Por qué las cosas terminaron así ......Cuando comencé a pensar en ello, no pude dejar de sentirme arrepentida.......

―A mí también me pasa lo mismo. Pero alguien tiene que..... ser expulsado.

La mayoría de mis compañeros de clase se sentían así.

Se vieron obligados a hacer algo poco realista.

―Ahora mismo me estoy arrepintiendo mucho de mi elección........ Debería haber seguido votando en contra hasta el final pase lo que pase.......

―Eso es lo mismo para todos nosotros. Pero no tenemos elección. Si se acaba el tiempo, perderemos 300 puntos de clase.

Como para justificar su decisión de votar a favor, Keisei dijo que era casi inevitable.

―Pero aunque sea así..... nunca me quitaré este arrepentimiento de haber votado a favor de algo como esto......"

Aunque el apoyo fue unánime, confiesa su arrepentimiento por haber participado en ello. El color comenzó a manifestarse con más fuerza en las personas que sentían lo mismo, pero no con palabras.

―No seas tan dura contigo misma, Kushida-chan. Es lo mismo para todos nosotros..... ¿verdad?

Sudou e Ike también, consolaron a Kushida.

―Tan frustrante.....es tan frustrante.

Las lágrimas corrían por sus mejillas. Mientras las limpiaba, Kushida sostuvo su cuerpo tembloroso y levantó la cabeza.

―Creo que realmente teníamos la oportunidad de hacer una oposición unánime, ¿no creen? Si seguíamos persuadiéndolo, creo que el que estaba a favor acabaría entendiendo.....

―Eso es──pero el tiempo.......

―Es cierto que entiendo lo que decían Horikita-san y Ayanokouji-kun. Teníamos que evitar que se nos acabara el tiempo, ¿no? Sí, lo entiendo.......Pero aunque nos penalizaran, deberíamos haber sido una clase en la que nadie se quedara fuera, ¿no?

Kushida escupe todos los sentimientos que había acumulado hasta ahora.

―No, pero definitivamente es culpa de quien siguió votando en apoyo. Sin duda.

―Nadie merece ser expulsado sólo por su capacidad académica o atlética, todo eso son cosas triviales. Sólo eso no puede decidir quién merece ser expulsado.

A pesar de ser la persona que estaba de acuerdo con esta moción y que era la causante de esta situación, Kushida afirmó que realmente quería defenderlos.

―P-pero.....Si ese es el caso, ¿cómo se decide a quién expulsar?

―E-entonces.....¿Qué tal si lo echamos a suertes?

―No podemos hacer eso. Estoy segura de que nadie estará satisfecho....... si alguien es expulsado así.....

Secándose las lágrimas con la punta de los dedos, continuó.

―Estoy preparada para ser criticada.

Poniendo su mano en el pecho, Kushida se dirige a nuestros compañeros.

―Yo... creo que Horikita-san, que fue la líder de este examen especial...... o Ayanokouji-kun que nos instó a votar en apoyo, deberían asumir la culpa.

Como era de esperar, esto sucedería. El primer movimiento hecho por Kushida. Para Kushida. No había ningún beneficio que obtener si personas como Ike o Sudou fueran expulsadas.

Las palabras eran el intenso deseo de la persona anónima que había votado inequívocamente a favor de la moción.

―Estoy tan disgustada que me voy a odiar por nombrarlos, pero no puedo dejar que se nos acabe el tiempo. Alguien tiene que cargar con este peso... Por eso hago el papel de resentimiento...

Nadie quiere ser expulsado. Pero aun así, mientras alguien tenga que ser expulsado, la elección es inevitable. Al igual que los que son descartados, los que condenan a otros a ser expulsados sufrirán lo mismo.

Kushida se buscó ese papel. Hace falta mucha determinación y razón para nombrar a alguien. Conseguí que mis compañeros reconocieran nuestros nombres, que era mi objetivo.

Kushida es mucho más inteligente de lo que yo pensaba. Normalmente, en la posición de Kushida, ella misma no sería expulsada si permaneciera en silencio hasta el final, ya que era de confianza y tenía muchos amigos, por lo que habría mucha gente que votaría en contra de su expulsión. Sin embargo, Horikita y yo ya nos hemos dado cuenta de que Kushida era la votante anónima. Si uno de nosotros levantara el puño y pusiera en evidencia la reputación de Kushida, podría darse una situación inesperada. Siendo así, sería más efectivo para ella recibir una herida no mortal y utilizarla como medio para defenderse.

Mencionando los nombres de Horikita y yo con anticipación, aunque haga una declaración que deprecie a Kushida, ella podría inducir que se debe al resentimiento por haber propuesto la decisión de expulsarme.

―¡No jodas!

El primero en objetar la idea de Kushida no fue Horikita ni yo, sino Kei.

―¿Por qué hay que expulsar a Kiyotaka? Se nos estaba acabando el tiempo, así que lo único que hizo fue pedirnos que votáramos a favor de la asquerosa moción. ¿Cuál es la responsabilidad que debe mantener al respecto?

―......Sí. Tienes razón. Sé exactamente lo que quieres decir, Karuizawa-san. Sinceramente, creo que está mal dar nombres ahora..... pero nunca podremos avanzar si no lo hacemos.

―No voy a votar por la expulsión de Kiyotaka. En este punto, sabes que nunca vas a ser expulsada, ¿verdad?

―Espera Karuizawa. Eso es un poco egoísta ¿no crees?

―¿Ja? Acabas de prometer votar contra Hondou-kun y Onizuka-kun, ¿no? Es lo mismo.

―Uhm, sí, p-pero no estoy diciendo que debamos votar unánimemente en apoyo de ello......

―Tú eres la única que es egoísta. Si no declaro mis intenciones, ¿no será su expulsión un hecho? ¿No poder pasar a la clase A porque el tiempo se acabará? ¿Y qué? Kiyotaka lo es todo para mí. ¿Clase B? ¿Clase D?, eso me importa un bledo.

Kei no dejaba de arremeter con rabia, pero ya era hora de que parara.

―Basta, Kei. Lo que dice Kushida es correcto.

―¡Pero!

Insatisfecha, Kei se quedó mirando a Kushida sin ocultar su irritación, pero se detuvo ahí.

―Si te dejas llevar por tus emociones y sigues discutiendo, la identidad del primero que debe cargar con la responsabilidad de las palabras de Kushida se desdibujará, y el objetivo pasará a ser Horikita y yo. Lo sabes, ¿verdad?

―......Sí......

Si hubiera perdido la calma, le habría gritado, pero eso no ocurrió. Fue capaz de contenerse siempre que le diera una orden lo suficientemente razonable. Resultó que no era malo que un compañero dijera lo que pensaba.

―Te diré que no estoy de acuerdo con la idea de que expulsen a Suzune. Puede que no sea la decisión unánime ideal, pero no es culpa de Suzune. Es culpa del bastardo que está sentado todo el día y no se manifiesta. ¿De verdad crees que seremos capaces de ascender a la clase A sin Suzune? Todo el mundo estaba convencido de que ella era lo suficientemente fiable como para darle el punto de protección. ¿Verdad Yukimura?

―......Desde luego, se decidió que le demos un punto de protección a Horikita-san. Pero al final, si fallamos en este examen especial, la acción en sí no tendrá sentido; ¿no sería lo mismo si perdiéramos 350 puntos de clase? ―respondió Keisei mientras sostenía sus gafas.

―¡Si Suzune está aquí, aún podemos darle la vuelta!

―No subestimes a esta escuela. Los 300 puntos que obtuvo Kouenji en el examen de la isla desierta fueron una especie de milagro. Si excluimos eso, ¿cuánto tiempo nos llevará alcanzar finalmente los puntos de nuestra clase actual? No es muy realista, ¿verdad? Horikita es un gran agujero que hay que rellenar, pero no es suficiente para que perdamos 350 puntos de clase.

Podríamos cubrir la desventaja de 350 puntos con Horikita, o podríamos luchar de igual a igual sin Horikita.

Es difícil poner un valor simple, pero lo que Keisei estaba diciendo, en cierto sentido es generalmente cierto.

―No estoy de acuerdo con la decisión de expulsar a Kiyopon o a Horikita ahora mismo. No es debido a las relaciones personales, sino porque creo que deberíamos escuchar su versión de la historia primero. Sobre el que siguió votando en apoyo de esto, como dijo Sudou-kun, ¿verdad?

Hasta Kushida tenía una expresión de sorpresa en su rostro, como si no hubiera esperado que Haruka se metiera en la conversación. Su explicación no fue en forma de proteger a ninguno de los dos por sus relaciones personales, sino más bien en forma de decir que aún era demasiado pronto para decidir.

―......T-tienes razón. Creo que perdí un poco la calma.......Pero si Ayanokouji-kun obtuviera el nombre de la persona que votó continuamente en apoyo del mal......o incluso si no lo hiciera, si dijera su nombre, todas sus relaciones se destruirán.

Qué pasaría si me equivocara al identificar al autor. Esa presión se podía sentir en el aire. En cualquier caso, en este punto, el bastón de mando volvió a recaer sobre mí.

―Sé que todavía están en medio de una conversación, pero creo que deberían dejarlo aquí. Tenemos diez minutos para decidir a quién queremos expulsar. Si no podemos hacerlo, tendremos que votar a alguien que será elegido al azar.

―.....Entonces está bien. De todas formas no tenemos mucho tiempo antes de la votación. No tendré más remedio que hacerlo. Por favor, déjame hacerlo.

―¿¡O-oye, Suzune!? ¿Qué demonios estás haciendo?

―Si vamos a tener una votación intermedia de todos modos, quiero confirmar algo. Es decir, ver cuántos de ustedes quieren que me expulsen.

Como para poner a prueba a sus propios compañeros, Horikita levanta la mano y se ofrece a ser votada.

Si la votación fuera unánime en apoyo, sería expulsada. Por otro lado, si la votación fuera unánime en contra, quedaría exenta de la auto-nominación de nuevo.

Y si la votación no fuera unánime en ninguna de las dos direcciones, tendremos que empezar de nuevo con la selección de a quién votar, incluyendo a Horikita.

―Entonces, ahora comenzaremos el tiempo de votación de 60 segundos para Horikita Suzune.

La votación en apoyo u oposición a la expulsión de Horikita comenzó. Cuántas personas votarán a favor de la expulsión de Horikita...... Después de unos treinta segundos, todos los votos fueron emitidos, y Chabashira-sensei mostró los resultados en el monitor.

18º resultado de la votación: 16 en apoyo, 22 en oposición.

Me pregunto si fui el único que pensó que este era un resultado interesante. Objetivamente hablando, la única persona que podría votar claramente en oposición a la expulsión de Horikita es Sudou.

Y el siguiente en la lista sería Kouenji, que probablemente no querría renunciar a su única aliada, Horikita. Por otro lado, el resto de los compañeros de clase votaban únicamente por si estaban de acuerdo o no con la desaparición de Horikita. Para los 16 compañeros invisibles, la presencia de Horikita no era tan importante.

¿O es que había un sector de la población que estaba dispuesto a aceptar a cualquiera con tal de no tener que ser expulsado?

―¿Están todos locos? Levanten la mano si votan a favor o los mato.

Sudou se levantó irritado, como si pensara que sólo unos pocos votos, como mucho, apoyarían la expulsión de Horikita.

―Basta, Sudou-kun.

―¡Cómo puedo...!

―Sólo pierdes el tiempo haciendo un escándalo. Hablemos de forma más constructiva.

―Hori-Horikita-san tiene razón, Sudo-kun. La unanimidad es la regla de hierro para este examen especial. Aunque haya treinta y siete votos a favor, mientras sigas oponiéndote, Horikita-san no será expulsada.

Yousuke lo convence, que no hay necesidad de que vuelque su ira en ningún lado. Era exactamente como él decía, aunque estuviera descontento, mientras se convierta en esa única persona que se mantiene de su lado, no será expulsada.

Esa es también la única manera de evitar absolutamente la expulsión de este examen especial. Sólo un voto. Con un voto defensivo sin fisuras en la oposición, se puede evitar el destino de la expulsión. Por otro lado, cuando se pierda ese último voto, ya no habrá forma de evitar la expulsión.

―Se nos está acabando el tiempo. Ya es hora de que nos des el nombre del responsable que crees que ha provocado esta situación.

―Ya lo sé. Sólo quiero hacer una sugerencia antes de decirlo.

―¿Sugerencia?

―Sí. Ahora les daré el nombre, pero esto no va a ser una simple declaración. Si digo la persona equivocada, la palabra daño a la reputación no podrá cubrir mi error.

―Eso es......, en efecto, cierto.

―Por eso no será sólo una 'mera' declaración. Por el contrario, si resulta que efectivamente dije la persona equivocada, entonces asumiré la responsabilidad y me nominaré a yo mismo, tras lo cual todos podrán votar para expulsarme.

―¿¡Espe-, Kiyotaka!?

Yo mismo, asumiré la responsabilidad. Al escuchar estas palabras, la clase se alborotó.

―¿Estás realmente seguro de esto? Ayanokouji-kun.....No quiero que ninguno de mis compañeros de clase......pero Ayanokouji-kun sigue siendo uno de ellos también, ¿no es así......?

―Agradezco tu preocupación, Kushida. Pero está bien.

―Dices eso pero Karuizawa-san votará en contra de la expulsión de Ayanokouji-kun, ¿verdad? Entonces no tendrá sentido───

―No dejaré que eso ocurra. Asumir la responsabilidad también significa detener esos votos que se oponen. Si llega el momento, convenceré a Kei de que vote a favor. ¿Les parece bien?

―......Lo entiendo, pero tengo fe en que no se llegará a eso.

―Por las palabras de Kushida, estoy de acuerdo con una cosa. Que al haber guiado a la clase a ponerse de acuerdo, debería asumir parte de la responsabilidad. Pero hubo una persona anónima que se obstinó en votar en apoyo. Sigo creyendo que esta persona en particular debe asumir la responsabilidad.

―Así es. Alguien de esta clase intentó sacar la mejor parte del asunto, para aprovecharse del anonimato y hacer que alguien fuera expulsado en secreto.

Aquí es donde decide intervenir Kei, para protegerme.

―¡Yo también lo creo......! Esa persona debería rendir cuentas......

―Sí, eso es cierto. El culpable es el que siguió votando en apoyo.

Airi, Haruka e incluso Akito siguieron esta tendencia para dar su apoyo.

―Ya tomaste tu decisión... ¿no es así?

Su último consejo, los ojos incómodos de Kushida, estaban sobre mí.

―Estoy dispuesto a pagar el precio de nombrar a alguien. Sobre todo, porque estoy casi 100% seguro de que estoy dispuesto a arriesgar mi propia expulsión para hablar.

―Lo entiendo. En ese caso, confiaré en Ayanokouji-kun.

Confiar. Con esas palabras, los fuertes ojos de Kushida siguen dirigiéndose a mí. El momento del anuncio que se había retrasado, aumentó aún más el interés de mis compañeros de clase.

Aparte de ese estudiante que realmente votó en apoyo, el resto de mis compañeros estaban inherentemente menos preocupados.

Por eso, todos esperaban en silencio el nombre del autor y el voto de apoyo a su expulsión. Deseando una buena razón para golpearlo con todo lo que tienen, todos esperaban el momento adecuado para gritar improperios hacia el perpetrador con sus gargantas resecas.

―El nombre del perpetrador es .......

La persona que debería expulsar a partir de ahora, y la persona que he decidido expulsar. Voy a revelarlo todo aquí.

───Kushida. Eres tú.

El silencio creció. Un mundo en el que el sonido desapareció por completo, y ni siquiera el zumbido de los oídos llega. Sé cómo te sientes, Horikita. Aunque hayas llegado a la conclusión de que ahora tenemos que ponernos de acuerdo, sé muy bien la razón por la que no puedes seguir adelante.

Sin embargo, Kushida no se echó atrás ni un poco. Estaba decidida a hacer que Horikita o yo fuéramos expulsados con esta moción, y siguió votando a favor. Que ella se diera cuenta o no de que era una mala jugada ya es una cuestión trivial.

Juzgué que la rehabilitación de Kushida iba a ser imposible, pero tú, querías enfrentarte a ella hasta el final. Un sacrificio por la clase. A pesar de haber visto la posibilidad, hiciste bien en no nombrarla hasta ahora.

Puede que no hayas podido salvar a Kushida, pero tampoco es necesario que te sacrifiques. No sé en qué estaba pensando Horikita en ese momento, pero pude ver claramente que me miraba con más calma de la que esperaba.

Ahora Kushida ha elegido interponerse como tu difícil enemiga. Puesto que ese es el caso, no hay más remedio que luchar. Asumiré el papel de derrotar a este oponente.

―¿Eh───?

Se filtró una voz que no podía entender nada.

Seguro que esas palabras no sólo las soltó Kushida, sino casi todos nuestros compañeros al mismo tiempo.

―¿Y-o?

Kushida se señala a sí misma, aún sin creerse que hayan dicho su nombre. O tal vez, ya había adivinado que su nombre sería pronunciado. Por eso también venía preparada para ello, preparando las cosas de antemano.

Pero aún así, Kushida no pensó que realmente la vendería. Más aún porque piensa que tiene algunas debilidades contra mí.

―Así es. Tú eres la que siguió tercamente votando en apoyo a pesar de que se te instó a votar en oposición.

Hasta mis compañeros, que estaban listos para golpearla con palabras abusivas, no pronunciaron una palabra.

―No me digas...... ¿fue porque dije que Horikita-san y Ayanokouji-kun deberían asumir la responsabilidad?

Al ver que las lágrimas de Kushida brotaban de la pena, Hondou se apresuró a seguir.

―No importa cómo lo mires, Ayanokouji, ¡no puede ser Kushida-chan.....! Estar resentido también está bien.

―Eso es irrelevante. He estado pensando en esto desde antes de nombrarla, o mejor dicho, desde la primera votación de la quinta moción.

―E-Espera. Estuve votando en contra hasta el último momento, ¿sabes? Entonces, ¿por qué estás.....?

―Una acusación falsa, ¿eh? Bueno, por supuesto que lo parece dadas las circunstancias.

Era sólo una excusa chapucera inventada para que no me expulsaran.

Obviamente, a cualquiera le parecería así.

―No hay pruebas que demuestren que, de hecho, estabas votando en contra. Por supuesto que no las hay, estas votaciones se hacen de forma anónima. Pero aun así, puedo demostrar que ella es la culpable aquí, con pruebas. ¿Hay alguna objeción?

―C-cómo es posible que digas algo así. Pero estaba preparada para esto...... Después de todo, fui la primera en nombrarlos a ustedes dos. Decidí que, aunque sea objeto de mentiras y calumnias, me sacrificaré para proteger a mi clase.

Todo lo que diré a partir de ahora será mentira. Poniendo esa línea de defensa, se asegurará de que los demás la defiendan.

―En primer lugar, les diré por qué creo que Kushida fue la que siguió votando a favor. Es porque tiene gente en esta clase a la que realmente quiere expulsar. Por supuesto, es difícil de creer, pero por favor, escúchenme hasta el final. Las personas que Kushida quiere expulsar son, como ella misma ha mencionado, Horikita y yo.

Mucha gente estaba confundida en cuanto a qué demonios estaba hablando yo.

Kushida, que debería estar más disgustada que nadie, parecía angustiada, pero elegía con calma y cuidado sus palabras. Era un debate en el que no se permitía ni un solo error.

―Los nombré a los dos. Así es como va a ser, no es así...

―No, no es así. Kushida ha considerado a Horikita como un estorbo más que a nadie desde que se matriculó en esta escuela.

Ya que llegué hasta aquí, Kushida debería entender, aunque no quisiera. Que voy a revelar toda la información que sé sobre ella en este lugar. Sin embargo, no puede ordenarme que me detenga.

Mientras siga haciendo el papel de niña bonita y lamentable, no habrá forma de que me detenga.

―Kushida Tienes algo en común con Horikita que nuestros otros compañeros no tienen, ¿verdad?

―¿Eh? ¿Algo que tenemos en común......?

Ella misma lo sabe, pero tuvo que tomar la actitud como si no supiera nada al menos una vez. Podría interrumpir esa actuación suya, pero no me atrevo.

Es porque su instinto defensivo la hará sufrir aún más a partir de ahora.

―Um....... Ah, ¿podrías estar hablando del hecho de que somos de la misma secundaria?

Nadie había oído hablar de una cosa así antes. Mis compañeros se sorprendieron al escuchar la información de primera mano.

Yo mismo no tuve que revelar las cosas que ella ha estado ocultando, sólo tuve que hacer que las revelara ella misma.

―Sí. Ni uno solo de nuestros compañeros lo sabía, ¿verdad?

La persona en cuestión, Horikita, tenía la mirada fija en el podio, así que no pude ver su expresión. Por otro lado, podía ver fácilmente las miradas de mis otros compañeros.

―Pero, ¿espera? Es cierto que nunca se lo he contado a nadie, pero es que no he tenido la oportunidad de hablar de ello. Era una escuela razonablemente grande, y ni siquiera estábamos en la misma clase. Me llevó mucho tiempo confirmar que Horikita-san había ido a la misma escuela que yo........

Kushida decía que era imposible que quisiera que la expulsaran desde el principio. Y aquí, mis compañeros, incapaces de soportar por más tiempo la situación de Kushida, empezaron a tomar medidas.

―Ya basta, Ayanokouji. Dijiste que nos dirías el nombre del culpable que había votado continuamente en apoyo, así que te escuchamos tranquilamente, ¿pero que sea Kikyou-chan? Eso es imposible.

Fue Ike quien lo negó y pronto su voz se extendió por toda la clase.

―¡Sí! Lo que dices, Ayanokouji-kun, es una locura.

―A pesar de llevarnos a estar de acuerdo contigo para votar en apoyo, ¿sólo mencionas el nombre de Kushida-san por despecho? ¿Qué estás haciendo?

―En primer lugar, ¿por qué iba a expulsar a alguien sólo por estar en la misma secundaria que ella? Ahora que lo pienso, por cómo va esta historia, ¿Ayanokouji también estuvo en la misma escuela secundaria que ellas?

Preguntas obvias fueron planteadas por mis compañeros de clase.

Los agravios que estallan se multiplican de uno a dos, a dos a tres. Una tras otra, sus tropas de amigos aparecieron sin que ella lo pidiera. No cabe duda de que ésta es la poderosa arma que posee Kushida Kikyou.

―Ahora que lo pienso, ¿siempre fuiste de este tipo de personas? Has estado actuando de forma extraña desde hace un tiempo, Ayanokouji.

―E-Eso es cierto. Da un poco de miedo...... aunque siempre te he considerado del tipo tranquilo...

Además de protegerla, algunas personas comienzan a desconfiar de mí por mi inusual comportamiento.

―......Por favor, no lo culpen entre todos. Estoy segura de que incluso Ayanokouji-kun tampoco quiere hacer esto. Sé lo que es estar en una situación como esta y querer culpar a otro por ello.....

Ella retoma las palabras de nuestros compañeros con delicadeza y las pone en movimiento mientras finge protegerme.

―No deberías dejarle decir lo que quiera. Eres demasiado amable, Kikyou-chan.

Automáticamente, cuando los portavoces de Kushida se descontrolan, se revoca mi derecho a hablar. Pero yo también tengo mis propias armas para contrarrestarlos.

―Es Ayanokouji-kun quien debería tener la conversación importante en este momento. No deberíamos interferir de mala manera.

Así dice Yousuke, mientras hace un comentario a los que me interrumpieron.

―Vamos, Hirata. Es inútil seguir escuchando las mentiras de Ayanokouji.

―Debemos esperar a tener todo el material antes de comentar si algo es verdadero o falso. Por supuesto, si resulta ser falso, tampoco lo aprobaré.

―¿Realmente es algo que merece la pena escuchar?

―Sí, es algo que necesitamos escuchar. Afectará mucho no sólo a Kushida-san, que fue nombrada, sino también a la propia vida escolar de Ayanokouji-kun. ¿No es así?

Yo mismo le había dicho a Yousuke por adelantado que podría haber gente que intentara controlar las votaciones si se nos acababa el tiempo. Sin embargo, no había forma de que alguien pudiera saber de antemano cuáles serían las mociones, y por supuesto él tampoco sabía lo de Kushida.

Como persona puramente neutral, tenía que asegurarse de que el juicio que se iba a producir fuera justo.

―No tengo nada que ver con el origen de las dos. El hecho de que hayan ido a la misma secundaria tampoco significa mucho, sino que Kushida tiene un gran secreto en su secundaria que no puede contar a nadie.

―Para, Ayanokouji-kun..... no acumules más mentiras.....

Las lágrimas comienzan a correr por sus mejillas, y Kushida comenzó a llorar en el acto.

―Oye Kiyopon, estoy de tu lado......pero al mismo tiempo, también estoy del lado de Kyou-chan. ¿Cómo puedo decir esto, realmente tenemos que seguir hablando de esto?

Como había dicho antes, aunque Haruka no formara parte del grupo Ayanokouji, seguiría intentando protegerme. Haruka no tiene muchos amigos, pero se lleva bien con Kushida incluso sin necesidad de que formen un grupo.

Si ella se preocupa por ambas partes, es natural que intente detener este conflicto.

―Haruka. Has estado esperando que salga a la luz la existencia del autor anónimo, ¿verdad? Si es así, tienes que escuchar esta historia hasta el final.

―Pero, quiero decir, Kikyou-chan........

―¿No es así? Entiendo que pienses eso, pero Kushida no es la persona que crees que es. Lo siento, pero déjame continuar. El secreto de Kushida reside en su verdadera naturaleza.

―¿La verdadera naturaleza de Kikyou-chan.....?

―Sí. En la superficie, Kushida parece ser una buena persona para todos. Es una perfecta estudiante de honor, amable y cariñosa, alguien que puede estudiar y hacer deporte. Pero, ¿y si la verdad es que es más celosa que nadie y sólo puede estar satisfecha si es la primera? ¿Y si, como resultado, incluso tuvo un historial de llevar a su clase a la ruina cuando se reveló su verdadera naturaleza en la secundaria?

―...... Honestamente, me resulta difícil creer esta historia. Pero aunque fuera cierta, no tiene sentido. Desde luego, en el caso de Horikita-san, que también asistió a la misma secundaria que ella, es posible que conozca su pasado. ¿Pero cómo lo sabe Ayanokouji-kun? Tampoco creo que Horikita-san se lo cuente sin más.

―Eso es porque poco después de inscribirme en esta escuela, casualmente tuve la oportunidad de ver la verdadera naturaleza de Kushida. Fui testigo de cómo Kushida escupía emociones negativas que no se parecían en nada a su habitual aspecto apacible.

Incluso cuando hablo de ello, Kushida nunca actuó como si fuera a mirarme con desprecio. Sigue interpretando el papel de chica amable que mira fijamente a su pobre compañero de clase que elige continuamente mentir y mentir.

Ella confiaba en que si hacía esto, estaría perfectamente bien. Por supuesto, que se digan cosas malas de ti, sean verdaderas o falsas, es un factor negativo que ensombrecerá tu futura vida escolar. Sin embargo, también es una señal de su firme voluntad de expulsar a Horikita.

―Kushida quiere ser vista como una persona amable. No quiere que se conozca su verdadera naturaleza. Por otro lado, no podía soportar la situación de tener a Horikita y a mí aferrados a su debilidad. ¿Por qué? Es porque ella siempre quiere tomar la montura desde arriba.

―......El intervalo terminará en un minuto.

Mientras estábamos en medio de una conversación, Chabashira-sensei nos informó de la hora.

―¿Qué hacemos? Sobre la próxima votación.

―Eso es.....por ahora, sólo tendremos que votar por Ayanokouji, ¿verdad?

En la situación actual, por supuesto que sería el siguiente.

―Basta ya───

Sin embargo, fue Kushida quien lo paró, ni Kei ni Haruka.

―Ya basta.....M-mi corazón no puede soportar más esto.....

―Ku-Kushida-san?

―La verdad es que no quiero que nada cambie... No quiero que Horikita-san o Ayanokouji-kun sean expulsados. Al nombrarlos a los dos, incluso hice que Ayanokouji-kun inventara mentiras... No quiero seguir teniendo una conversación tan dolorosa y amarga... Así que... Me rendiré... Si hago eso entonces todos volverán a la normalidad ¿verdad?

Kushida se ofrece como candidata a la expulsión. Entre los criterios para las nominaciones en este examen especial, si alguien se nomina a sí mismo, tal y como hicieron Horikita y Yousuke hace un rato, su nominación será reconocida aunque sea la única.

―¿Estás segura de esto, Kushida? Una vez que digas esto, no podrás retractarte.

―Sí, no me importa........ ¿Pueden estar todos de acuerdo en que me expulsen? Por favor.....

Cuando el nombre de Kushida fue seleccionado con esas palabras, la votación apareció en la tableta. Mis compañeros se quedaron atónitos ante su inesperada candidatura.

Resultados de la 19ª votación: 5 en apoyo, 33 en Oposición.

Con el tiempo, la votación de Kushida se llevó a cabo, dando como resultado una votación en oposición abrumadora por unanimidad.

―Chi...cos...... ¿por qué?

―No importa, es imposible que expulsemos a Kushida-chan. ¿Verdad muchachos?

Las treinta y tres personas que votaron en oposición respondieron con múltiples asentimientos con la cabeza en una muestra de solidaridad.

―yanokouji. Honestamente, no creo que sea justo que hagas que Kushida-chan reciba el golpe sólo para que tú mismo no seas expulsado.

A excepción de mi voto de apoyo, sólo cuatro personas estuvieron de acuerdo con la expulsión de Kushida. Estoy tentado de decir "sólo", pero me sorprende que haya obtenido cinco votos.

―El siguiente será el turno de Ayanokouji-kun, ¿verdad?

Es cierto que, si las cosas siguen así, habrá una votación para expulsarme. En ese momento, hay una alta probabilidad de que sea unánime en su apoyo. Pero no si puedo cambiar esa decisión en 10 minutos.

―Ayanokoji-kun, dices que la verdadera naturaleza de Kushida-san es otra, pero es realmente difícil de creer que ese sea el caso.

―¡Sí! En primer lugar, ¿ha intentado Kushida-san alguna vez expulsar a Horikita-san? Si realmente quisiera expulsarla, habría tomado medidas hace tiempo, ¿no?

Si espero la oportunidad adecuada, naturalmente encontraré una voz que me exija hablar.

―No es fácil hacer que expulsen a un compañero de clase. Pero como mínimo, he sido objetivo de Kushida una vez, en un examen especial muy similar a este examen especial por unanimidad.

Evitando la expresión directa, dejé que mis compañeros escarbaran en sus recuerdos.

―Ah, la votación de la clase......Estoy bastante seguro de que fue cuando Yamauchi-kun y Kushida-san tuvieron......

Así es. El año pasado fue la primera vez que nuestra clase tuvo que votar para expulsar a un compañero de nuestra clase.

Allí, Yamauchi acabó siendo expulsado de la escuela, pero Kushida fue una de las personas que utilizó a Yamauchi para inducirme a marcharme.

Probablemente aún lo tenían fresco en la mente.

―¿Es una coincidencia? Tuvimos dos exámenes similares, las dos veces me señalaron para la expulsión, y esta vez también, Kushida se involucró. Es demasiado bueno para ser verdad.

Si recordaran aquellos días, seguramente entenderían que fue extraño que Kushida se viera involucrada una vez más.

―Claro, a veces me preguntaba si realmente era una coincidencia. Pero Ayanokouji, si Kikyou-chan estuviera intentando expulsarte a propósito, ¿lo habría programado con tanta coherencia?

Prácticamente dice que yo debería comportarme mejor, pero no es tan sencillo como parece.

―Kushida pensaba que yo estaba de su lado, así que quizá no esperaba que revelara todo a sus espaldas de esta manera.

―...... ¿De mi lado?

―Sí. ¿Dije algo malo? Kushida.

―.....Yo también. Me pregunto cómo debo responder, Ayanokouji-kun...... ¿Cuál es la forma correcta de responder?

En otras palabras, Kushida sólo podía negar o cuestionar. Mientras no pueda afirmarlo, la iniciativa es siempre mía.

―Danos la prueba, Ayanokouji. Si vas a seguir culpando a Kushida-chan más allá de esto, va a ser necesario.

Fue Hondou quien salió a la palestra de forma agresiva. Parece que tiene sentimientos extraordinarios hacia Kushida.

―Es cierto. Sería estéril continuar esta historia sin pruebas. Ahora te diré la razón por la que Kushida confió en mí.

Sin pánico, sin errar. Bañado con agua.

―Fue hace mucho tiempo. Kushida me chantajeó para que firmara un contrato con ella en el que tendría que darle la mitad de mis puntos privados cada mes a cambio de no expulsarme.

Al escuchar algo que nadie había imaginado, incluso los que protegían a Kushida se quedaron, por supuesto, ligeramente sorprendidos.

―¿En verdad? Kushida.

―¿Eh......?

Tal vez ella no había esperado que esto surgiera, o tal vez había estado en el fondo de su mente pero no había decidido cómo responder. En cualquier caso, Kushida se quedó sin palabras.

No podía admitir honestamente que, en efecto, estaba recibiendo los puntos privados. Por otro lado, le resultaba difícil negarlo.

Aunque pudiera decir falsamente que no había recibido ninguno, la verdad saldría a la luz cuando se pudiera confirmar más tarde. Esto se debe al hecho de la persona que había transferido el dinero, a dónde se transfirió y cuánto se transfirió quedará en el historial.

―¿Qué pasa con eso? ¿Puedes decirme sinceramente que no has recibido ni un solo punto privado de mi parte?

―Eso es───

No iba a dejar que se tomara su tiempo. Justo cuando iba a dirigir mi mirada a Chabashira-sensei, Kushida respondió con un temblor de labios.

―....Sin duda.... He estado recibiendo puntos privados cada mes de Ayanokouji-kun......

Kushida había estado negando la mayor parte de lo que había dicho, pero ahora tenía que admitirlo. Si conseguía una confirmación de Chabashira-sensei, ya que podía conocer el flujo de nuestros puntos privados, la situación se deterioraría inevitablemente para ella.

Había cierto escepticismo sobre si nuestra maestra, Chabashira-sensei, estaba al tanto de las transferencias de puntos entre individuos en un momento dado, y si podía o no filtrar esa información personal, pero Kushida no estaba dispuesta a correr ese riesgo.

―¡Pe-pero...... la razón es completamente diferente! Ayanokouji-kun me pidió que se los guardara.......O; por supuesto, no utilicé ni un solo punto, ¿sabes?

Sólo había una o dos formas de justificar la razón por la que recibía la mitad de los puntos privados de un compañero de clase cada mes. Por lo que dijo Kushida, se decidió por una de ellas, que era que le habían pedido que se encargara de ello. La otra habría sido que se los dieron gratis.

Si dijera que se lo dieron por voluntad propia, como en el segundo caso, habría tenido que compensar eso con una razón suficiente, por lo que expuso que le pidieron que los guardara. Bueno, al menos, así es como ella pensaba.

―No te los di sin más. Los usé como pago, a cambio de que no me expulsaran.

―Deja de mentir.....

El contrato para regalar la mitad de mis puntos privados fue hecho por mí. Estoy seguro de que Kushida lo recuerda bien. Hasta se tomó la molestia de registrar cuidadosamente los acontecimientos del día. Sin embargo, algo así podría ser sellado sin ser utilizado, dependiendo de la situación.

No, más bien, sería lo contrario. Volvería como un arma para apuñalarla por la espalda.

―Mentiras, ¿eh? Pero Kushida, cuando firmaste ese contrato conmigo, dijiste que lo habías grabado para asegurarte, ¿no? Si esa grabación sale de tu celular, no podrás salirte con la tuya.

―¿Grabación? No recuerdo haber hecho tal cosa......

Ella negó con la cabeza, a pesar de sentirse abrumada. La grabación debía estar guardada en algún sitio, pero aparentemente no estaba en su teléfono. Supongo que no andaría por ahí con una grabación arriesgada sin más, ¿verdad? Habría sido más rápido, pero en realidad no importaba.

―Es lo mismo, aunque tengas una grabación escondida en algún lugar que yo no conozca. Firmamos este contrato en febrero de este año. Yo también tengo una grabación del contenido de nuestra conversación. La grabé en caso de emergencia si algo salía mal.

Los ojos de Kushida se abrieron de par en par al mirarme. Estoy seguro de que nunca se habría imaginado eso.

―He escuchado la grabación varias veces, así que recuerdo cada palabra que se dijo allí. Te daré la mitad de los puntos privados que reciba a partir de ahora. Creo que así es como empecé.

―E-eso es mentira. No he escuchado algo así.

―Kushida respondió: "Lo siento, pero no tengo necesidad de puntos privados. Supongo que será mejor tener más dinero, pero tengo suficiente".

―..... No recuerdo haber dicho una cosa así.

―Si quieres, puedo hacer que Chabashira-sensei me traiga mi teléfono ahora mismo.

―No me importa. Pero no puedes hacer eso. Estamos en medio de un examen especial, ¿sabes?

―Es inevitable que los teléfonos sean confiscados porque su uso puede llevar a hacer trampa. Sin embargo, lo único que tengo que hacer es dejar el manejo de mi celular a Chabashira-sensei y que ella reproduzca los datos grabados. Así, no habrá lugar para las trampas.

Por supuesto, no creo que esa excepción especial pueda concederse incondicionalmente durante el examen especial. Pero Kushida, impulsada por la ansiedad, no pudo evitar dirigir su mirada a Chabashira-sensei, que seguía de pie en el frente.

―Estarías en problemas si ella trajera mi celular. Todo el trabajo que has hecho para encubrirlo todo será en vano. Pero ya te diste cuenta, ¿no? Que no tengo intención de parar.

Kushida hablaba menos. Me pregunto en qué estará pensando ahora. Se puso de espaldas a mí y dejó de moverse, como si estuviera petrificada, manteniendo la mirada al frente.

Naturalmente, ella recuerda los acontecimientos que tuvieron lugar ese día, y debido a su naturaleza cautelosa, debe haber comprobado si su grabación funciona correctamente. En otras palabras, ella también la había escuchado repetidamente. Al explicar yo toda la conversación, algunas palabras debieron coincidir en los datos de audio de su memoria.

―'Aunque fuera suficiente para utilizarlo como un dinero extra, no tendría ningún problema en caso de que se produjera una emergencia'.

Es indudable que Kushida, que hasta ahora había sido la víctima, estaba experimentando un gran cambio. Ha llegado a un punto en el que ya no es posible que siga haciéndose pasar por un ángel en esta clase.

―Cállate ya......

Al escuchar una voz que no podía entender, un compañero de clase tragó saliva, preguntándose quién era el que acababa de decir eso. La única manera de que no dijera nada más era que mostrara su verdadera cara.

Pero si revelara su verdadera naturaleza, todo se destruiría.

―"Deberías haberte enterado por Chabashira-sensei. Que los puntos privados son para nuestra propia protección───"

―Cállate, cállate, cállate.......

A pesar de recibir las palabras de rechazo e interferencia, no me importó y continué hasta el final.

―"Esa propuesta. Lo mire como lo mire, ¿no estarás en desventaja? Si lo haces porque te pueden expulsar, lo entendería, ¿sabes?". Esta fue la conversación que mantuvimos Kushida y yo antes de llegar al acuerdo. Si todos pudieran escuchar el audio que tiene las mismas palabras que acabo de decir aquí delante de todos nosotros, todo saldrá a la luz.

No importa si realmente tengo la grabación o no. Lo único necesario e importante era que mis frases coincidieran con la realidad de la conversación.

―¡Suficiente dije!

Kushida, que había gritado y luego se había callado, debía de estar esforzándose por recordar lo que sucedió en ese momento.

Todo comenzó durante nuestro primer año, cuando aún éramos estudiantes de primer año. Yo quería la debilidad de alguien de nuestra clase y sabía que Kushida tendría las debilidades de muchos de nuestros compañeros. Cuando le pedí algo a cambio de su colaboración, le propuse ofrecer mis puntos privados. Seguro que la conversación anterior a la propuesta del trato, en la que Kushida me dijo que quería que nos expulsaran a Horikita y a mí, quedará intacta.

Ella pensó que tenía una mano conveniente para jugar, pero se equivocó. Lo único que ha hecho es dejarse un montón de pruebas que sólo la apuñalarán por la espalda.

―Dime exactamente qué parte de la conversación quieres que guarde como secreto. Sé específica para que el resto de la clase y yo podamos entenderlo.

Sus amigos, con la esperanza de que fuera algún tipo de error, sólo pudieron observar a Kushida con ansiedad.

―........Lo siento.

En breve, Kushida murmuró una disculpa.

―¿Por qué? ¿Por qué te disculpas?

―En efecto, prometí no pelear con Ayanokouji-kun a cambio de recibir la mitad de sus puntos privados cada mes. Esa..... es la verdad, así que.....

No era una disculpa hacia mí, sino más bien, una disculpa hacia mis compañeros por haberles mentido.

―¡Pero.... ya no pienso en eso! Realmente quería llevarme bien con Horikita-san y Ayanokouji-kun. ¡No fui yo quien votó en apoyo───!

Kushida se detuvo al alzar la voz para aferrarse a la parte de que ella no era la votante anónima. La forma en que nuestros compañeros miraban a Kushida era muy diferente a la calidez que le habían estado mostrando antes.

Aunque realmente no fuera ella la que había estado votando continuamente en apoyo, ya no era posible que siguiera con su vida cotidiana como antes. Ella misma parecía entenderlo mejor.

Sin embargo, los ojos de Kushida aún no estaban muertos cuando me miró.

―¿No es en realidad Ayanokouji-kun....... el que seguía votando a favor?

―¿Qué quieres decir?

―Ayanokouji-kun quería expulsarme, así que tomó medidas para forzar que la votación fuera unánime en su apoyo. ¿No es extraño? ..... Siempre es tan tranquilo y poco asertivo, pero de repente se vuelve proactivo para conseguir que alguien sea expulsado.......

Kushida, que era la que estaba más cerca de ser la culpable, de repente intenta cambiar el papel de ella hacia mí. Pero lo siento Kushida, ya he asumido que ibas a utilizar esa estrategia.

―Oye, Karuizawa-san.

Rascándose el pelo, Kushida dirigió su mirada a Kei.

―¿Qué?

―Parece que estás saliendo con Ayanokouji-kun, pero ¿sabías que cuando nos inscribimos por primera vez en esta escuela, Ayanokouji-kun se acercaba desesperadamente a mí e intentaba salir conmigo?

―...... ¿Qué quieres decir, de qué estás hablando?

Kei es capaz de ver las cosas con más objetividad y calma que la mayoría de la gente, pero hasta ella tiene sus debilidades. Eso es porque cuando el amor está involucrado, ella explota con emociones incontrolables.

Cuando antes se mencionó mi nombre como candidato a la expulsión, me defendió agresivamente por su cuenta y riesgo. Kushida debe haber sido capaz de ver la brecha en la mente de Kei debido a esto.

―Incluso me tocaste el pecho en la oscuridad cuando no quería que lo hicieras, ¿no es así?

―¿¡Qué-.....pe-pecho!? ¿De qué está hablando, Kiyotaka?

―No lo sabías, ¿verdad? Que hizo algo tan terrible en cuanto nos inscribimos aquí.

Un sentimiento de disgusto comienza a extenderse entre las chicas, incluidos los chicos que secretamente se enamoraron de Kushida.

―Le aconsejé amablemente que dejara de hacerlo en el acto, pero..... estaba demasiado asustada y no pude hacer nada al respecto.

―Parece que dice lo que quiere, pero nunca le he tocado el pecho.

―¡Pero Kiyotaka está diciendo algo más!

―Como era de esperar, eso es lo que diría, no tiene más remedio que decir eso. Pero en realidad, Ayanokouji-kun sí ha tocado mi pecho.

―Kushida. Odio ser el que te diga esto, pero ¿no es indecoroso?

―Yo también tengo pruebas, aunque no es lo mismo que la grabación que tienes. Tengo un uniforme con las huellas dactilares de Ayanokoji-kun por todas partes, y lo conservé tal cual. Sabes lo que pasaría si lo enviara a ......... ¿verdad?

Igual que dije que tenía una grabación de nuestra conversación en el celular, ella iba a usar la misma técnica para vengarse de mí. Si esto resulta ser cierto más adelante, seré yo el que esté en el filo de la navaja.

―Por favor, explícame qué significa esto.

Desde la perspectiva de Kei, a quien se le estaba contando la historia objetivamente, es comprensible que quiera pedir una explicación.

―Eso no es cierto en lo más mínimo. Pero antes de llegar a si eso es verdad o no, dices que hay huellas dactilares en tu ropa, pero ¿cómo se conservan? Si fue justo después de matricularnos en esta escuela, entonces ya pasó un año y medio. No es fácil tomar huellas dactilares de la ropa. Si no se ha conservado bien, entonces por supuesto que no estará en un estado decente para ello. No creo que puedas obtener ninguna huella dactilar de algo así.

Incluso en el mejor de los casos, la superficie de la ropa está llena de irregularidades debido al tejido, lo que hace difícil ver las líneas de las huellas dactilares. Teniendo en cuenta factores como los rayos UV, la humedad y la sequedad, puedo decir que está cerca de ser 100% imposible.

―..............

Al igual que los datos de la grabación, ninguna de las cartas que tienes son utilizables. Da igual el número de cartas que tengas en la mano. Excusas que a cualquiera se le ocurren. No te permitiré usarlas.

―En primer lugar, si realmente hubieras sufrido así, deberías haberme denunciado inmediatamente.

―¿Por qué..... por qué...... por qué...... por qué?

Kushida se acerca y me agarra por el cuello de la camisa mientras me mira intensamente.

Mientras Kushida se enfurecía, yo continué con la conversación de forma clerical.

―En un momento dado, hasta te aliaste con Ryuuen para que nos expulsaran a Horikita y a mí. ¿No es así?

Una tras otra, las acciones de Kushida fueron expuestas a la luz del día. En este punto, aunque yo proporcionara alguna información errónea, no tendría mucho efecto.

―¿Por qué, por qué?

Más poder entró en la mano que sostenía mi uniforme.

―¡¡¡¡¿Por qué me traicionas?!!!! Prometimos no ser hostiles entre nosotros, ¿no es así?

―Por supuesto que no quería enemistarme contigo. Tampoco me interesa que tengas dos caras. Por eso quería que la oposición fuera unánime, sin que ni Horikita ni yo tuviéramos que nombrarte. Pero mientras la expulsión de alguien estuviera en juego, no tuve opción. Es para proteger a nuestros compañeros.

Durante el último año y medio, Kushida estuvo construyendo constantemente un vínculo de amistad con nuestros compañeros de clase. Pero ahora, todo se derrumbó con un estruendo.

Sin que nadie dijera nada, Kushida también empezó a bajar el tono lentamente.

―Ah-..... ah..... ya no sirve de nada. Ya tuve suficiente.

El rostro de Kushida se torció de asco ante su propio comportamiento vergonzoso, como si se hubiera dado cuenta de todo y se hubiera rendido. Pero aun así, rápidamente recuperó la compostura, mató su sonrisa y soltó su mano de mi cuello.

―Haa.......───Así que fui una idiota, ¿eh? Ese trato fue un error...... ¿no?

Su porte enojado desapareció de inmediato y de los labios de Kushida salieron palabras indiferentes.

―Pensaba que sabía que Ayanokouji-kun era un oponente formidable, pero aún así no pensé que me traicionaría aquí. Es inesperado, realmente inesperado.

―Es una mentira, ¿verdad? ¿Kikyou-chan?....Lo que Ayanokoji-kun acaba de decir..... es todo una mentira, ¿no?

―¿Mentira? Lo siento, pero todo es verdad.

―No puede ser .... ¿por qué......?

―Hay cosas que hay que proteger a toda costa. ¿No lo entienden? Es una broma, claro que no lo entienden. Ahah, todo ha terminado.

Se encogió de hombros, despreocupada por su situación.

―Sí. No podía soportar la presencia de Horikita-san y Ayanokouji-kun. No podía perdonarles que conocieran mi secreto, que debería estar oculto. Llevo mucho tiempo intentando tener la oportunidad de expulsarlos.

―Sin duda me sorprendió el contenido de nuestra última moción, pero aun así, sabías que no sería fácil acorralarme, ¿verdad? Sabías lo que pasaría si forzabas esto.

Aunque nos hubiera odiado, tuvo tiempo más que suficiente para detenerse. Aun así, Kushida siguió votando a favor de la moción, y actuó repetidamente de una manera que podría describirse como medio loca. Esto fue algo que no me pareció propio de Kushida durante este examen especial. En ese momento, los ojos de Kushida temblaron mientras lucía alterada por un instante, pero ese color pronto desapareció. Antes de que el examen especial comenzara, Kushida pidió a Horikita que fuera la líder de este examen especial. Parecía que ella esperaba que este tipo de tarea surgiera.......

―No es como si....... No podía soportar la situación de dar a conocer mi pasado. Sabía que sería extremadamente difícil hacer que Horikita-san fuera expulsada, pero no pude resistir el impulso.

Los que la protegían desde antes se quedaron sin palabras. Aunque fuera cierto que ella tenía planeado expulsar a Horikita, sus amigos no tendrían la culpa ya que no lo sabrían.

Por supuesto, ella había cometido un grave delito, haciendo que nuestra clase eligiera la vía de la expulsión al seguir votando en apoyo. Pero aún así, me sería difícil decir que hemos conseguido que los votos estén unánimemente de acuerdo con la expulsión de Kushida. Para asegurarme de que fuera expulsada, necesitaba que hiciera más y más daño a esta clase.

―No pudiste hacer que nos expulsaran ni a mí ni a Horikita. Es una verdadera lástima.

―Seré expulsada en la próxima votación. Esta clase podrá obtener puntos de clase gracias a mi sacrificio. Bien por ustedes, supongo que ya pueden pasar a la clase B.

Sin duda, les costará creer que le estaba diciendo esto al grupo de personas con las que se había llevado bien hasta esta misma tarde.

―No tienes forma de darle la vuelta a las cosas.

―Jajaja, seguramente sea así. Pero.......

Kushida acerca su cara a mi cuello y susurra con frialdad.

―Al menos puedo mostrar un poco de resistencia, ¿no?

Incluso en un susurro, fue más que suficiente para que la clase lo captara. Sin mi necesidad de agitar las cosas, es seguro decir que Kushida se había estado preparando para hacerlo interiormente.

―Eso será imposible. No queda nadie que vote en contra de tu expulsión.

―No es eso lo que quería decir. Si me van a expulsar de todos modos......, también podría destruirlo todo.

Su verdadera naturaleza, que había llevado al colapso de su clase en la secundaria, comenzó a mostrar su cara.

―.......Me pregunto qué diablos es lo que estás diciendo?

―¿No lo entiendes? Soy la única que tiene todos los secretos de esta clase. Todavía queda algo de tiempo antes del final del intervalo, así que se los contaré todo.

―No tendrá ningún beneficio para ti, aunque lo hagas........ ¿me equivoco?

―Tampoco tengo nada que perder. Aunque, Ayanokouji-kun podría tener problemas por ello, así que debería empezar.

Sí, eso es. Deja salir la verdad y el estrés que has estado acumulando durante tanto tiempo. De esa manera, todo el mundo se asombrará con tus giros y vueltas. Sólo entonces desaparece el espacio para la simpatía y se completa la unanimidad.

―Aparte de Karuizawa-san antes... Ah, sí, Shinohara-san, has consultado conmigo muchas cosas, ¿no?

Shinohara Satsuki fue el primer objetivo elegido por la miríada de contradicciones que apuntaban al gran número de chicas.

―¿¡Qué!?

―No es que Shinohara-san sea particularmente linda o bonita, está más bien en el lado feo, ¿no? Tal vez por eso sólo los chicos feos como Ike-kun o Komiya-kun se acercan a ella, es muy gracioso. Era tan gracioso que Karuizawa-san, Matsushita-san, Mori-san y otras se reían de ella, ¿verdad?

Una sola pica se dividió instantáneamente en innumerables pedazos, y uno por uno, los nombres fueron pronunciados y los objetivos fueron dispersados.

―¡Para! ¡Nunca dije algo así! ¡Deja de decir mentiras!

Mori lo negó inmediatamente, pero Kushida no tenía intención de zanjar el asunto.

―¿Eh~? Tú eras la que más se reía diciendo que eran la pareja perfecta. No te preocupes, aunque yo dije 'Ya basta', me estaba riendo por dentro y sentía lo mismo.

―¿Es eso cierto...... Nene-chan?

―N-no..... Yo-yo sólo estaba, um......

―Parece que Shinohara-san se juntó con Ike-kun después de que él le confesara su amor en el crucero, aunque ella estuvo dudando en elegir entre él y Komiya-kun hasta justo antes de eso. ¿O acaso estaba planeando salir con Ike-kun a modo de prueba y luego salir con Komiya-kun, que en realidad estaba más cerca de ser su verdadero amor?

―¡O-oye, Satsuki!

Para Kushida, había muchos materiales inflamables por toda la clase. Tan pronto como el fuego se inicia en un lugar y comienza a extenderse, ella salta rápidamente a otro nuevo material.

―Hablando de relaciones románticas, Wang-san vino a pedirme consejo, ¿verdad?

―¡Por favor, detente!

―¿Detenerme? Con eso, ¿quieres decir que debo dejar de hablar de Hirata-kun, que tanto le gusta a Wang-san?

De repente, en nuestra clase, el interés amoroso de Mii-chan fue expuesto a todos. En un instante, su cara se pone roja y empezó a llorar en el acto al ver que Yousuke la miraba fijamente.

―¿"Detenerme"? Pero si sólo estoy empezando... Estos no son los únicos secretos que me han contado. ¿Debería intentar algo más serio a continuación? Veamos... Para empezar, comencemos con Hasebe-san.

―......Kyou-chan.......

―Ah, deja de llamarme así. Ni siquiera puedes hacer amigos, y llamas a la gente por sus apodos sólo para sentir que te acercas a ellos. Probablemente es molesto para la persona que la llamen así.

Mientras Kushida cambiaba su atención hacia Haruka, Shinohara, Mori y las demás chicas, junto con Ike, seguían presionándose sobre la verdad, sobre lo que se dijo y lo que no se dijo.

El tiempo de intervalo estaba casi terminado, y la decisión unánime de expulsar a Kushida se acercaba.

Si esto se alarga demasiado, Kushida sólo seguirá revelando más información.

 

PARTE 1

Después de sólo unos minutos de escuchar a Ayanokouji-kun, la gente a su alrededor hizo un cambio de 180 grados en su evaluación de Kushida-san. Se suponía que sus amigos tenían una unidad tan fuerte como el grupo de Ayanokouji-kun. Pero ahora, por alguna razón, la relación resultó muy frágil.

Hasta yo, que conocía mejor que nadie la situación de Kushida-san, ahora, si me pidiera que nominara a Kushida Kikyou para la expulsión, podría hacerlo. Así de tremenda fue la consecuencia de la conversación.

Puede que yo misma haya vislumbrado el poder que tiene Ayanokouji-kun antes que nadie. La clase era como un cuadro infernal. La votación para Kushida-san, quien seguramente recibiría la mayoría de los votos para su expulsión después de que este intervalo terminara, pronto comenzaría.

Por eso, este examen especial terminará pronto. Nuestra clase podrá obtener 100 puntos haciendo un sacrificio. Eso será una ventaja valiosa en nuestra búsqueda de la clase A.

Pero.... En efecto, antes que nada, necesito resolver la situación en la que me encuentro.

Estoy segura de que estoy en el mismo flujo de tiempo que todos los demás, pero para mí, el flujo de tiempo que marca un solo segundo se estaba desacelerando lenta pero constantemente. El segundero del reloj analógico, que no parecía algo que pudiera pertenecer a nuestra clase, se hacía cada vez más lento, como si estuviera a punto de dejar de moverse del todo.

Por el contrario, mis sentidos se agudizaban cada vez más.

¿Cuál es mi propósito? me pregunto.

La respuesta, por supuesto, es graduarme dentro de la clase A. Por eso los puntos de la clase son muy importantes.

Eso debería ser obvio. Si ese es el caso, ¿cuánto vale Kushida-san?

Es difícil dar una evaluación clara a cada estudiante.

Pero si me preguntaran si ella valía al menos 100 puntos de clase, diría que no de inmediato.



Como este es el caso, permítanme cambiar mi forma de pensar. Si reprobamos este examen especial, perderemos 350 puntos de clase. Si pudiera proteger a Kushida-san en vez de eso, ¿podría calcular que sus fortalezas nos permitirán recuperarnos de esa desventaja?

...... No creo que sea totalmente imposible, pero es difícil. No se trataba sólo de ella, sino también de mí. No vale la pena perder 350 puntos, así que debemos hacer que expulsen a Kushida-san. Esta es una manera normal de pensar.

Entonces, ¿qué quiero hacer yo, Suzune Horikita? ¿Qué quiero hacer con la estudiante llamada Kushida Kikyou? ¿Quiero ayudarla? ¿Quiero acabar con ella con facilidad?

Al concentrar mi atención, trasciendo el tiempo y borro el concepto de sonidos extraños. ¿Puedo dejarle todo a Ayanokouji-kun? Seguramente no. Entonces vuelvo a pensar: ¿Qué está bien, qué está mal y hay algo que sólo yo pueda hacer?

Reconozco, respeto y replanteo las habilidades de Ayanokouji-kun. Un rayo de luz brilla a través de la oscuridad detrás de mis párpados.

───-Ah, es cierto.

Finalmente, llegué a una respuesta de la que estoy segura. Que Kushida-san será expulsada aquí y ahora. Esa es… "no la respuesta correcta".

Y llegué a la certeza de que yo soy la única persona que puede salvar a Kushida-san aquí y ahora. El tiempo que casi se había detenido se descongela, y el segundero comienza a moverse de nuevo.

 

PARTE 2

Uno a uno, mis compañeros empezaron a estar de acuerdo con la expulsión de Kushida, pero sólo uno se opuso.

―No vayas más lejos, Kushida-san. No podrás dar marcha atrás si lo haces.

―¿Ah? Sólo está comenzando la parte buena. No me interrumpas, Horikita-san.

―No puedo dejar que continúes. No voy a escuchar más historias desagradables.

―¿Es realmente tan fea la verdad?

Quizás tomándolo como un cumplido, Kushida miró a Horikita con la cara más animada que había puesto en todo el día.

―Efectivamente. Como mínimo, no creo que estas revelaciones sean bonitas. Pero no sólo me parecen feas, sino también las personas que ahora te acusan de filtrar sus secretos y piden tu expulsión.

La inesperada regañina y reprimenda hizo que sus compañeras gritaran exasperadas.

―¿Por qué a nosotros también? ¡No hicimos nada malo!

―Ustedes mismos contaron voluntariamente a Kushida-san los secretos que no querían que nadie supiera. ¿Por qué hicieron eso?

―¡Eso es porque pensamos que podíamos confiar en Kushida-san! Y sin embargo.....

―Eso es exactamente. Confiaban en Kushida-san más que en cualquier otra persona de esta clase. Normalmente, no es tan fácil ganarse la confianza de otro. Más aún cuando se trata de confiarle un secreto que uno mismo no quiere que los demás conozcan. Por supuesto, el hecho de que Kushida-san haya filtrado esos secretos no es digno de elogio. Es comprensible que todos ustedes se sorprendan de que ella tenga un lado oculto. Pero nosotros mismos también tenemos otro lado, ¿me equivoco?

Una persona que vive con honestidad y sin mentiras o falsedades sería una persona muy rara.

―Puede que eso sea cierto, pero igualmente, el hecho de que ella fuera la autora que siguió votando en apoyo. Eso es inexcusable, ¿no?

―Eso es cierto. En cuanto a lo que hizo para que me expulsaran a mí o a Ayanokouji-kun, fue sin duda una decisión increíblemente egoísta. Por ello, tenemos que hacerla cargar con el peso de su decisión. Pero en lugar de conformarnos con dejar que la expulsen, deberíamos hacer que utilice sus habilidades para devolvernos el favor una y otra vez.

Después de todo lo dicho, el punto de Horikita se transmitió a nuestros compañeros.

―¿Estás diciendo que no deberíamos expulsar a Kushida-san?

―Así es. Me gustaría que nos quedáramos con Kushida-san en esta clase.

―¿Ah? Justo cuando me preguntaba por qué interrumpiste en medio de nuestra conversación. ¿Por qué te adelantas y dices algo tan egoísta, estás hablando en serio ahora?

La decisión de no permitir la expulsión de Kushida. Fue la propia Kushida la primera en objetar esto.

―¿Por qué demonios me defiendes? ¿Realmente estás sugiriendo que todos voten por otra persona? ¿O sólo estás tratando de mantenerme aquí para utilizarme como una especie de saco de boxeo? Estás bastante mal de la cabeza, ¿lo sabías?

―Lo siento, pero no soy alguien que cuente chistes. Desgraciadamente, hablo completamente en serio.

―Si realmente estás hablando en serio, te haré cambiar de opinión. Vamos a reanudar el infierno.

Pero la escena de antes no me pareció tan infernal.

―......Heee~. ¿De verdad es así? Entonces, ¿qué te pareció a ti? Por favor, ilumíname.

―Fue tonto, ridículo y simplemente repugnante. Te hizo ver como una simple tonta.

―¿Ja?

―Es verdad que eres académicamente mejor que la mayoría de la gente. Pero eres fundamentalmente estúpida, hasta el punto de ser fatal. Durante la secundaria, tus compañeros descubrieron tu verdadera naturaleza, así que decidiste revelar los secretos de todos y terminaste destruyendo tu clase, ¿no? Viniste a esta escuela para aprovechar ese remordimiento, pero por desgracia te encontraste conmigo, alguien que casualmente asistió a la misma secundaria que tú. Y entonces, poco después de matricularte, tu yo oculto quedó expuesto ante Ayanokouji-kun... Divertidísimo. Y eso no fue todo, ni siquiera me interesaba tu pasado, pero no podías soportar el hecho de que anduviera por ahí libremente mientras guardaba tu secreto. Después de todo, pensaste que tendrías ventaja porque hiciste un trato con Ayanokouji-kun, pero terminó siendo usado en tu contra. ¿Y este fue el resultado de todo? Estabas tan obsesionada con conseguir la expulsión de cualquiera de nosotros que tú misma perdiste el equilibrio.

Horikita la insultó sin miramientos y suspiró. La expresión del rostro de Kushida, que hasta ese momento había estado sonriendo y riendo con una sonrisa socarrona, se transformó ahora en una furiosa.

―¡No sabes lo que siento, así que no sigas abriendo tu maldita boca! Quiero ser la número uno, ¡aunque esté constantemente sumergida en el estrés! ¡Quiero la sensación de sentirme superior a los demás! Tú te interponías en mi camino cuando quería lograr eso, así que traté de deshacerme de ti. ¿Qué hay de malo en eso?

―¿No sé cómo te sientes? ¡Claro que no lo sé! Has estado tan centrada en escuchar y recopilar las preocupaciones de los demás que tú misma no has podido encontrar a nadie con quien hablar, para dar a conocer tus sentimientos.

Kushida apretó las manos. Sus vasos sanguíneos parecen sobresalir.

―Tu personalidad es un problema, pero eso también me pasa a mí. Pero tú misma eres mucho más trabajadora que yo.

―Divertidísimo, deja de decir esas mentiras. Todo lo que sale de tu boca me irrita constantemente, ¿lo sabes?

―No estoy mintiendo ni mucho menos. Sólo digo esa verdad que tanto te gusta. Sinceramente, admiro y envidio tu esfuerzo y tu talento para hacerte amiga de tanta gente, tanto de hombres como de mujeres.

Al oír esto, mis compañeros, irritados por la maniobra anterior de Kushida, discutieron con ella.

―Antes estábamos siendo acosados por Kushida-san y, sin embargo, ¿crees que eso es algo digno de elogio?

―Ser amable con las mentiras. Ensayar la amabilidad. ¿Crees que eso es cruel? Eso es una frivolidad. Traten de pensar ustedes mismos en lo difícil que es ser amable con todos, todos los días. ¿Tienen todos el talento de sonreír a cualquiera, de tender la mano a cualquiera y de escuchar las preocupaciones de cualquiera?

Cuánto estrés debió soportar y cuánto debió lidiar con todos sus amigos en el día a día. Muchos querrían ser como Kushida, aun comprendiendo que no pueden.

Escuchar las historias intrascendentes de los demás. Eso ya es demasiado para que una persona normal pueda continuar. Ella continuó haciéndolo con una gentil sonrisa, mientras seguía apoyando a mucha gente desde las sombras.

―Basta ya. Basta ya. No quiero escuchar más tonterías saliendo de tu boca.

―¿Por qué? Eres buena mirando en la mente de la gente, estoy segura de que tú misma deberías saberlo, ¿me equivoco? No tengo intención de burlarme de ti, ni pienso insultarte, es sólo que realmente tengo un buen concepto de ti.

Horikita dio un argumento completo y lógico a los que trataron de refutar sus palabras de manera proactiva.

―Sería una gran pérdida para la clase si la expulsáramos a pesar de tener un talento como nadie.

―¡Basta!

―Por eso no puedo estar de acuerdo con que expulsemos a Kushida-san. Me gustaría apostar por mí misma y dar lo mejor de mí para aprovechar sus puntos fuertes. No, definitivamente lo haré.

―Te dije que te detuvieras, ¿no es así?

―Estoy segura de que tú misma no lo sabes, pero sólo cuando lo supe todo, desarrollé una alta valoración de ti.

Pensando en ello ahora, Kushida, por alguna razón habló en detalle sobre el pasado que ella misma quería sellar tanto.

Tal vez no era una acción de ella tratando de expulsar a alguien, sino más bien porque en el fondo quería que ellos supieran todo y realmente quería compartirlo con ellos.

El rostro de Kushida se cubrió de grandes lágrimas.

Y entonces, como una niña, lloró sin conectar sus palabras ni ocultar su frustración.

Tan frustrante, tan frustrante, tan frustrante, tan frustrante. Esas palabras se repitieron con vacilación.



Pero es comprensible. Todos los que conocían la verdadera naturaleza de Kushida se marcharían. Ella quedó a la deriva. Y, sin embargo, por alguna razón, Horikita, que hasta ahora mantenía las distancias, las acortó con Kushida.

Era imposible que la misma Kushida hubiera pensado que algo así sucedería. Horikita, a quien tanto ha odiado, es la primera persona que pudo comprenderla. Queda por ver si lo aceptó o no, pero definitivamente ha provocado un cambio en Kushida.

Yo decidí que era imposible hacer que Kushida se detuviera, por lo que desarrollé una estrategia para eliminarla. Horikita, en cambio, decidió protegerla, no eliminarla. Sin embargo, ahora que esto sucedió, es inevitable que surja el siguiente problema.

―Siento interrumpir mientras están en medio de una conversación, pero el intervalo está a punto de terminar. ¿Qué van a hacer?

Lo que había que hacer, por supuesto, era que alguien se propusiera, o seleccionar un candidato, y esa persona será la que tengamos que votar.

―Se nos acaba el tiempo. Quien quiera elegir a Kushida-san, por favor, que me cambie a mí en su lugar. Después continuaré con lo que estaba diciendo antes.

Como ya no podía usar su autocandidatura, apeló a nuestros compañeros para que la eligieran.

―¡Dejen de joder! Todos quieren expulsarme, ¿verdad? ¡Simplemente nomínenme y vótenme de una vez para que podamos terminar con esto!

―No me estoy metiendo contigo. Como ya dije antes, vas a asumir la responsabilidad como principal responsable de haber provocado esta situación. Y, no dejaré que te expulsen como castigo. Si eso ocurriera, se burlarán de ti por el resto de tu vida. Te convertirás en nuestro hazmerreír para siempre.

Seguro que hubo alguno que no pudo decidir cuál elegir al final, pero eso no es lo importante.

―Se acabó el tiempo. Ahora comenzaremos la votación para Horikita, que tuvo más de la mayoría de los votos para su selección.

Aunque Kushida fuera seleccionada por el sistema de nominación, no tendría sentido mientras Horikita se opusiera a su expulsión. Se creó una votación para la expulsión de Horikita, de acuerdo o en contra, pero por supuesto no fue unánime en el apoyo. La provocación barata debe haber funcionado bastante bien para Kushida. Todos completan sus votos en 60 segundos.

Resultados de la 20ª votación: 1 en apoyo, 37 en oposición.

―Ahora que volvemos a otro intervalo, lo diré una vez más. Me opongo a la expulsión de Kushida.

Kushida despotricaba con palabras no expresadas, pero Horikita ya no le prestaba atención. Esto hirió una vez más el orgullo de Kushida y, a su vez, consiguió silenciarla. Después de todo, si volvía a ser objeto de expulsión, ella misma no tendría forma de oponerse a Horikita.

Pero esto fue inesperado. Yo tenía la intención de hacerlos ceder sin importar quién fuera. Las entrañas de mi cabeza se calentaron. No era una mera declaración, decir que quería "proteger a Kushida".

Ella misma dijo que confiaba en que podría sacar el máximo partido a sus puntos fuertes más allá de sus principales debilidades. Al parecer, Horikita ha entrado en una etapa superior de su crecimiento antes de lo que esperaba.

Por supuesto, no era como si no hubiera material que pudiera utilizarse para discutirlo a partir de este momento. Muchos estarían dispuestos a expulsar a Kushida, que actualmente ha sido desplazada a ser el mal absoluto de la clase.

No es que no se la pueda presionar, pero ahora que levantó la mano para oponerse, será difícil asumir que Horikita simplemente se retire. No se puede descartar la más mínima probabilidad de que esté planeando que se nos acabe el tiempo para mantener a la fuerza el número de expulsiones en cero. Pero lo siento, Horikita, eso sería realmente inaceptable.

―Pero Horikita-san. Contigo defendiendo a Kushida-san, ¿estás sugiriendo que optemos por agotar el tiempo?

Yosuke le pregunta inmediatamente sobre el punto que debe ser confirmado ahora mismo.

―Sé que el hecho de que yo proteja a Kushida-san no es el final de la historia. Pero yo misma he llegado a mis propias respuestas.

Podría ser──no, supongo que es la única respuesta que se te ha ocurrido, Horikita.

―No podemos permitirnos el lujo de reprobar este examen especial. Para ello, será inevitable una expulsión.

Lo que decía quiere decir que no sólo está dispuesta a proteger a Kushida, sino que también está dispuesta a eliminar a otra persona a cambio. Aunque pude sentir el constante crecimiento de Horikita, tomé medidas ante sus palabras.

No había necesidad de que Horikita asumiera el cruel papel de pronunciar que alguien debía ser descartado aquí y ahora.

―Por favor, espera un momento.

Interrumpí con fuerza el intento de Horikita de continuar. Por mucho que intente justificar esto, el proceso de juzgar será mentalmente agotador. Es fácil decir que sólo será una experiencia más para ella, pero es demasiado para la actual Horikita.

Sobre todo, si comete un solo error, nos quedaremos sin tiempo. No hay nadie más que yo que pueda crear una decisión unánime para expulsar a alguien. Espera, eso no es cierto. Sus ojos que me miran. Entendí a partir de eso.

Es obvio que la persona que tanto Horikita como yo tenemos en mente es la misma.

―Kushida, la única persona que siguió votando a favor de la moción, merece ser expulsada. Sin embargo, como dice Horikita, es una alumna muy capaz. Siendo así, no tendremos más remedio que pensar en un enfoque diferente.

―Espera un momento, Ayanokouji. Todo el mundo votó a favor de esto porque ellos mismos no fueron los autores, ¿no? ¿Y ahora estás diciendo que vamos a cambiar eso y nombrar a alguien al azar para que sea expulsado? Nadie se convencerá con eso.

―Estoy seguro de que no eres el único que está descontento con esto, todos lo estamos. Pero aun así, tenemos que tomar una decisión. No tenemos más remedio que elegir el camino más justo.

―Más justo........ no existe ese método.

―La opción de ganar puntos de clase expulsando a alguien. La parte de la expulsión suele tener una imagen negativa, pero si se cumplen ciertas condiciones, puede convertirse en positiva, como en el caso del autor que votó a favor de que expulsáramos a alguien. Si los puntos de clase ganados valen más que el alumno que va a ser expulsado, entonces tiene sentido elegir a alguien adecuado. En otras palabras, las únicas personas que deberían ser expulsadas son aquellas que no son necesarias en la clase en este momento. Entonces, ¿cuál es el criterio para esta decisión? Debería tratarse del rendimiento general de cada uno. Los que tienen capacidad académica, capacidad física o cualquier capacidad que no entre en esas dos categorías. En pocas palabras, las personas que tienen la capacidad de dirigir, como Horikita, o la capacidad de organizar grupos, como Yousuke y Kei. Inevitablemente, quedan excluidos. Por supuesto, si crees que estoy siendo condescendiente, eres libre de discutir mi afirmación.

Cuando el tiempo estaba a punto de expirar, mis compañeros guardaron silencio, como si dijeran que no podían refutar mi afirmación.

―Y esto no debe incluir cosas como las perspectivas de futuro. Es difícil determinar objetivamente quiénes crecerán realmente y en qué medida, y esas especulaciones pueden mezclarse. Para llegar a una conclusión final, la OAA será el árbitro imparcial.

Es la cuantificación de la capacidad del alumno por parte de la escuela, sin importarle las emociones del mismo. El 1 de septiembre, la puntuación más baja de esta clase era de 36 puntos en total.

Muchos sólo comprobarían sus propias clasificaciones y puntuaciones, y no muchos sabrían realmente quién está en la parte inferior cada vez.

―La que tiene la OAA más baja de esta clase es──Sakura Airi.

Respondí, sin mirar a Airi en particular, sino observando toda la escena.

―............¿Qué? ....¿Qué estás diciendo? Deja de fastidiar en un momento como este.

Haruka, enfurecida, se puso en pie y me miró con desprecio.

―Sólo estoy dando un punto de vista objetivo sobre las cosas. Es la clase la que debe decidir si están o no de acuerdo conmigo.

Dejé de lado mis opiniones personales y continué hablando.

―¿Objetivo? ¿Y qué si es objetivo? ¿A quién le importa la clasificación de la OAA? ¿Eso hace que esté bien que expulsemos a Airi sin más? Es más, ¿por qué........ eres tú el que dice esto, Kiyopon?

―Entonces, ¿quién crees que debería ser expulsado?

―¡Eso es───!

―La gente que no está preparada para dar nombres directamente no tiene derecho ni potestad para elegir a quién expulsar.

―¡¿Y qué hay de Ike-kun?! El suyo no es tan diferente de Airi en cuanto a capacidad académica y física, ¿verdad?

Es cierto que, en la OAA, una vez estuvo empatado en el último lugar con Airi. Pero ahora, se las arregló para obtener un punto más a su puntuación general, haciéndolo 37. Sólo la superaba por un paso.

―Entonces simplemente preguntemos a la gente de aquí. Todos los que se opongan a la expulsión de Airi, que levanten la mano.

La que levantó la mano inmediatamente fue Haruka. Casi al mismo tiempo, Akito y Keisei también levantaron la mano. Por supuesto, es natural ya que todos son del grupo Ayanokouji.

―Tres, ¿eh? Entonces el siguiente está en la fila, ¿qué pasa con los que se oponen a la expulsión de Ike?

Varios chicos, entre ellos Sudou, y chicas, entre ellas Shinohara y Mori, que tiene una deuda de gratitud con Shinohara, levantaron la mano, y fueron 11 las personas que expresaron claramente su oposición a la misma.

―¿Por qué-?

―Crear amistades también es una gran habilidad. Tengo que decir que también soy inferior a Ike en ese aspecto.

―¿Podrías decir eso mientras miras a Airi a los ojos!

―¿Es esto lo que quieres?

―¡¡…!! ¡Para!

Cuando estaba a punto de mirar a los ojos asustados de Airi, Haruka me detuvo.

―Puedes nominar a Hondou, Okitani o cualquier otro estudiante, pero nunca obtendrán menos de los tres votos de Airi.

―¿Qué pasa con esto? ....... deja de hacer tonterías. Desde luego, nosotras mismas no tenemos muchos amigos. ¡Pero no está bien que expulsemos a Airi!

Si tuviera alguna otra opción, la elegiría. Pero ya pasamos ese punto.

―.......Pero, con toda honestidad..... perder 300 puntos de clase ahora mismo sería fatal.

Uno de los miembros del grupo Ayanokouji y uno de los amigos de Airi, Keisei, dejó escapar las palabras en voz baja.

―Yukimu, ¿estás hablando en serio ahora? ¿Estás de acuerdo con la expulsión de Airi.....?

―¡N-no! ¡Todavía no he decidido si estoy o no de acuerdo con esto!

―¿Todavía? ¿Quieres decir que estás considerando estar de acuerdo con esto? ¿Ah? ¡Déjate de tonterías!

―No, como dije, yo..........

Como si se diera cuenta de todo, Haruka se mordió el labio y tomó una decisión.

―Asqueroso. Increíble, todos ustedes. ¿Qué pasa con esto, éramos amigos para nada?

La voz fría iba dirigida a mí, y también a Keisei, cuyos verdaderos sentimientos se filtraron.

―Y a todos ustedes también. Nadie intenta siquiera defenderla. Así es, no les importa lo que le pase a Airi, con quien ustedes mismos no se llevan bien, con tal de salvarse. ¿Ponen a Kyou-chan en primer lugar sólo porque es útil? ¿Abandonarán a una chica que se ha esforzado por seguir el ritmo de la clase, para no incomodar a nadie? Aah, ya veo, ya veo como es, ¿no es esta la mejor clase de todas?

El comentario involuntario de Keisei le demostró que iba a contrariar a Haruka. Nadie quería hacer contacto visual, y para no involucrarse, se rindieron al no decir nada.

―Ya tuve suficiente. No voy a dejar que expulsen a Airi. Si todos ustedes tienen que expulsar a alguien sin importar qué, entonces expúlsenme a mí. Aceptaré con gusto mi expulsión.

De forma similar a lo que Kushida hizo antes, aunque ahora es otra persona la que lo hace, Haruka intenta proteger a Airi planteando su propia expulsión de forma voluntaria.

Lo que Haruka acababa de decir formaba parte del cálculo. De hecho, esa declaración sólo tendría el efecto contrario en ella.

―¡Espera! ¡Haruka-chan, tampoco puedo dejar que te expulsen!

―Está bien, Airi. Tienes que quedarte en esta escuela. Al principio no me gustaba mucho esta clase. Pero después de hacerme amiga tuya y de Kiyopon, Yukimu y Miyachi, mis días se volvieron más divertidos. A pesar de que Yamauchi-kun fue expulsado, pensé que algo así no volvería a suceder, y pensé que también podría llevarme bien con todos los demás pero......

Mirando fijamente a Chabashira-sensei, Haruka hace un anuncio formal.

―Me auto propongo para mi expulsión. De todos modos, ya es casi la hora, ¿no?

Tal como lo interpreté, la declaración tuvo prioridad, y Haruka se acercó automáticamente a la mesa de decapitación.

―Airi, debes votar a favor de mi expulsión, ¿entendido? Nadie más se quejará con esto, ¿verdad? De todos modos, todos pueden protegerse, así que no es como si alguno de ustedes tuviera una razón para estar en contra.

―Algo así...... ¡No puedo estar de acuerdo con ello!

Como Airi no podía votar a favor de la expulsión de Haruka, gritó.

―Está bien, si es para protegerte, no tendré nada que lamentar por ser expulsada.

―¡Pero───!

―Ya está bien de hablar. Ahora comenzaremos la votación.

Basándose en la firme voluntad de Haruka, se votará de acuerdo o en oposición a su expulsión. El resultado mostrado en el monitor fue───.

Resultados de la 21ª votación: 35 en apoyo, 3 en oposición.

Casi todos votaron a favor de la moción, pero tres lo hicieron en contra. Esos tres debían de ser fáciles de adivinar para Haruka.

―¡Airi!

Por supuesto, era obvio que uno de los votos sería el de Airi.

―¡No puedo hacerlo! Algo como expulsar a Haruka-chan..... ¡Simplemente no puedo hacerlo!

―¡Pero es para protegerte! Y Miyachi, Yukimu, ¡ustedes también paren!

Haruka estaba preparada para ser expulsada, pero resultó que algunos no querían eso.

―No quiero que te expulsen....... Simplemente no pude hacerlo.

Mientras muestra una expresión amarga y agónica, Akito le responde claramente mientras mira a Haruka a los ojos.

―¿Entonces te parece bien que sea Airi?

―No he dicho eso......Pero, si tuviera que elegir entre las dos..... yo.......

―.....¡Yo también lo siento!

De repente, Keisei interrumpe a los dos mientras grita. Se levanta y agacha la cabeza.

―Yo.....voté a favor de tu expulsión....Si esto continúa así, esta clase nunca podrá.......alcanzar la clase A.

―¿Ah? Entonces, ¿quién es el otro voto? ¡El que votaría en contra en esta situación!

―El otro voto fui yo.

―¡¡…!! ¡Kiyopon, qué demonios estás haciendo...! No hay razón para que me defiendas, ¿no?

―Ya te lo dije. La nueva política consiste en expulsar al alumno menos capaz de esta clase. Tú querías ser expulsada y Kushida quería ser nominada para la expulsión, pero no importa quién se presente, la política no cambiará de aquí en adelante. Después de llegar hasta aquí, es inmutable.

Si diera un paso atrás aquí, nunca se establecerá un voto unánime.

―Hasebe-san... es sin duda, un hecho que Sakura-san tiene el puntaje más bajo de la OAA en nuestra clase........ así que eliminar a los que no son capaces de contribuir mucho a la clase no es algo tan malo, ¿no es así?

Preparándose para el riesgo de hablar en esta situación, Matsushita dio su opinión.

―¿Me estás tomando el pelo ahora mismo? Piensa en lo que sentirías si estuvieras en mi lugar. Si uno de tus amigos más queridos fuera expulsado, ¿serías capaz de sonreír y reír después, como si nada hubiera pasado? Eso será imposible para mí, absolutamente imposible.

―La que debe ser expulsada es Airi. No hay más opciones.

―No......no, ¡esto no es lo que debería pasar! No importa quién más esté de acuerdo, sólo Kiyopon..... ¡sólo tú tienes que estar del lado de Airi, Kiyopon!

Lo sé. Es precisamente porque lo sé, que estoy hablando, Haruka.

―No voy a cambiar de opinión. Haruka, si sigues sin refutar la expulsión de Airi, entonces este será el final del camino para esta clase.

―¿Entonces se supone que debo dejar que hagas lo que quieras? ¡Seguiré oponiéndome a la expulsión de Airi hasta el final!

Sólo una. Si una sola persona sigue oponiéndose hasta el final, nadie será expulsado. Esa ley es absoluta. La forma más eficiente de romper esa ley será-

―Gracias, Haruka-chan.......Pero ya es más que suficiente.

―¿Ai.....ri.....?

―Si hubiera alguien en la clase que tuviera que ser catalogado como innecesario.....entonces probablemente sería yo....... Nada de lo que dijo Kiyotaka-kun estuvo mal, Haruka-chan.

―¡Airi!

―Tiene razón en todo. Si hay que expulsar a alguien sin importar qué.....entonces debería ser yo la que desaparezca ya que soy la que más perjudica constantemente a la clase.

-que directamente la persona que se ha convertido en el objetivo de la expulsión detenga a los que se oponen a ella.

―¡No puedo! ¡Nunca votaré por la expulsión de Airi! ¡Claro que sí! No importa si esta clase nunca llega a la clase A, ¡todavía podemos graduarnos todos juntos, junto con Airi!

―Por favor, no hagas esto. Aunque me salve, estoy segura de que muchos se arrepentirán. Que yo haya sido la razón por la que ustedes no pudieron llegar a la clase A, estoy segura de que se arrepentirán por mucho, mucho tiempo.

―¡Está bien! ¡No has hecho nada malo! Sólo te protejo porque quiero hacerlo.

―Te lo agradezco, de verdad.......pero no hay manera de que le ponga una carga tan pesada a Haruka-chan.

―¿Qué es esto..... qué pasa con esto......?   ¡No se suponía que fuera así...!

Evitar la expulsión de un individuo no es necesariamente beneficioso. Si esto sucediera, votar en contra de su expulsión sólo haría sufrir a Airi.

―Un auto-sacrificio suena bien. Es un alivio para los oídos. Desde el punto de vista de la clase, estoy seguro de que se sienten profundamente aliviados de tener a alguien como Haruka en sus vidas. Si eso es lo que hace falta para que la clase funcione sin problemas, puede ser una buena idea tomar esa decisión. Bien, Sudou, ¿serías capaz de sacrificarte voluntariamente por el bien de la clase?

―N-no, quiero decir..... Yo...... um.....

―Satou, ¿y tú?

―¿Yo? Yo, probablemente no podré, algo así.....

―¿Y tú, Onodera?

―.....Probablemente, un no de mi parte también.......

―Aunque le pregunte a cualquier otro, la respuesta será la misma. Fundamentalmente, nadie se sacrificará.

―Sinceramente, me parece muy bien que me expulsen. En ese sentido, no debería haber ningún problema, ¿no?

―Si tomamos el camino fácil utilizando a alguien que esté dispuesto a sacrificarse, una vez que la gente se entere del camino fácil, sólo repetirán el proceso de esperar a los voluntarios cuando se encuentren en una situación similar en el futuro. Entonces será demasiado tarde para que intentemos utilizar una forma justa de juzgar.

―No me importa..... No me importa esa razón. ¡Quiero proteger a Airi! ¡Eso es todo lo que quiero hacer!

―¿Aunque eso signifique que Airi pueda ser expulsada al día siguiente, a pesar de que te sacrifiques por ella, Haruka?

―¡No te atrevas a hablar de un futuro indefinido como si fuera seguro!

―No hay un futuro definido en ninguna parte, precisamente por eso debemos elegir lo mejor.

Por muchas palabras que le pusiera delante, no parecían llegar a sus oídos. Sin embargo, definitivamente llegaron a los de Airi. Eso era lo importante.

―Todo estará bien. No te preocupes, Airi. Definitivamente seguiré votando en contra de tu expulsión. No importa quién más vote en apoyo, ¡yo lo haré──!

―Todo el mundo, por favor─── vote por mí......

Dijo Airi con voz apagada, pero que todos pudieron escuchar.

Haruka agarró los dos brazos de Airi y se resistió desesperadamente.

―No quiero hacerlo. De ninguna manera...... ¡Justo ayer, nos lo estábamos pasando tan bien y sin embargo......! Sin embargo, esta mañana fue como cualquier otra...... Me encontré contigo y luego vine a la escuela. Hablamos y charlamos de cosas como el festival cultural..... ¡Incluso hoy pensábamos pedirle a Kiyopon que nos reuniéramos después de la escuela para poder sorprenderlo con tu nueva imagen! Que me quiten todo eso es sólo.....

Nos quedaban menos de diez minutos. Eso significaba que era prácticamente la última votación. No importaba quién iba a ser expulsado, no había nadie que pudiera votar fácilmente en contra. Ese era el peso de la votación final.

Sacudiendo la cabeza de lado a lado, Airi rechaza las manos protectoras de Haruka.

―¡No quiero esto, no quiero esto, no quiero esto, no quiero esto!

Rechaza, niega y grita como una niña. Cada vez, Airi expresa su gratitud a Haruka, pero sigue intentando convencerla de que lo acepte. La decisión ya no podía cambiarse. Al darse cuenta de todo, Haruka se sentó en el acto a punto de derrumbarse.

―La gente sin talento no tiene más remedio que aceptar la realidad y seguir adelante. Debemos responder a sus deseos. Es fácil que voten en contra en la próxima votación. Pero aunque votes que no, la propia Airi no podrá seguir en esta escuela. Sólo sufrirá por el remordimiento que sentirá por haber involucrado a sus compañeros. Ella no será capaz de mirar hacia adelante. La única forma de salvar a tu mejor amiga, Airi, es que tú misma, Haruka, votes a favor de su expulsión y le permitas avanzar.

―Yo, Yo───

Airi abrazó a Haruka por delante mientras se derrumbaba.

―Gracias, Haruka-chan.......Gracias por toda la ayuda que me has prestado hasta ahora. No pude devolverte nada, pero por favor, escucha mi última y egoísta petición.

―No puedo, Airi..... algo así.....

―Por favor, vota por mi expulsión.

Airi le agradeció, mientras acariciaba suavemente el cabello de Haruka, y luego le gritó a Chabashira-sensei.

―Me propongo yo misma. Por favor, voten a favor de mi expulsión.

Después de hacer que Haruka se levantara y volviera a su asiento, Airi regresó al suyo como si quisiera asimilarlo todo. Pero incluso después de que la votación para su expulsión fue declarada, el tiempo de votación no se detuvo.

Siguió pasando los 60 segundos y luego los 70 segundos.

Los estudiantes sólo tenemos 90 segundos de tiempo de votación en total. En unos 70 segundos, Haruka también será expulsada. Tal vez si su mejor amiga Airi iba a desaparecer, ella también planeaba desaparecer junto con ella. Sería comprensible que ese pensamiento se le pasara por la cabeza.

Si tenía que tomar una decisión tan débil aquí y ahora, que así sea. Nadie podría culparla.

A la clase le faltará una persona más, pero el voto unánime será aprobado sin ningún problema. La marca de 100 segundos había pasado, y el tiempo restante se acercaba a los 40 segundos.

Ella sólo seguía llorando y no mostraba señales de tomar su tableta.

―¡Haruka-chan───!"

Fue un grito de rabia de Airi como nunca antes había escuchado. La voz más fuerte que le había oído soltar. Haruka levantó la vista sorprendida, como si le hubieran dado una palmada en la espalda, y ante su cara de llanto, Airi le asintió y sonrió.

Si no toma una decisión y vota en este momento, será una negación de todo lo que Airi es para ella.

───La votación terminó. Ahora anunciaré los resultados.

Resultados de la 22ª votación: 38 en apoyo, 0 en oposición.

Chabashira-sensei, que había estado observando el feroz intercambio desde el principio, se olvidó de informar del final del examen y se limitó a mirar fijamente a Airi y Haruka.

Airi, que ahora está expulsada, mira fijamente al frente, como si hubiera aceptado todo. Por otro lado, Haruka, que no pudo protegerla, se esforzaba por contener sus sollozos, pero no podía ocultarlo ante la enmudecida clase.

―Ah, ahem..... ah, Chabashira-sensei. Por favor, proceda con el anuncio.

El observador, que había permanecido silencioso y tranquilo salvo por las mínimas advertencias y avisos, por lo visto se había olvidado de indicarle la señal de finalización del examen especial.

―......El voto unánime a favor de la expulsión de Sakura Airi pone fin a la última moción. La elección se mantiene y se otorgarán 100 puntos de clase. Para que quede claro, hay una forma de deshacer esta expulsión, y es si actualmente se tienen 20 millones de puntos privados y se usan para───

Como es su deber, Chabashira-sensei intentó continuar con su explicación, pero luego se detuvo a mitad de la frase.

―No será necesario dar más explicaciones.

Aunque reuniéramos todos los puntos privados de toda nuestra clase, nunca llegaríamos a los 20 millones.

―Las otras tres clases ya terminaron sus exámenes especiales, pero les pediré que regresen hoy mismo a los dormitorios. En cuanto a Sakura, tendrás que venir conmigo a la sala de profesores después, así que quédate en el aula.

―De acuerdo.

Airi respondió a Chabashira-sensei en voz baja, pero sin dudar.

―Eso es todo. Todos por favor ocupen sus asientos. Sigan mis instrucciones y salgan del aula.

Se nos informó de que lo hiciéramos, y todos abandonamos nuestros asientos, aunque en diferentes momentos. A Airi le indicaron que se quedara donde estaba. Y Haruka, que ni siquiera podía ponerse de pie, hizo todo lo posible para que sus temblorosas rodillas lo hicieran, pero no resultó.

Su respiración también se volvió más agitada, y empezó a mostrar síntomas similares a la hiperventilación. Akito, que pudo verlo, corrió hacia ella y la ayudó a levantarse con un abrazo lateral. Porque nada bueno iba a salir de dejarla allí.

Salí al pasillo y mi teléfono me fue devuelto inmediatamente. Y Keisei no tardó en hacer lo mismo.

―.......Kiyotaka. No voy a decir que lo que hiciste estuvo mal. Es sólo que ...... Todavía no estoy seguro de poder decir que lo que hicimos estuvo bien. No, no tiene sentido seguir pensando en ello..... Por favor, olvídalo.

Aunque tenía pensamientos que quería desahogar, Keisei me dio la espalda y empezó a caminar por el pasillo. No tendría sentido esperar aquí tanto a Haruka como a Akito.

La legitimidad es irrelevante. Me es imposible no sentir nada por haber encabezado la eliminación de un miembro importante del grupo. Kei se acerca a mí. Me di cuenta de su comportamiento molesto, pero aun así la detuve con la mirada.

Por ahora, será mejor que Kei se mantenga alejada de mí, como si ella estuviera de luto.  No había necesidad de que ella sufriera un odio innecesario. Según recuerdo, Chabashira-sensei quería reunirse conmigo una vez terminado el examen especial.

Cuando miré mi teléfono, vi que efectivamente recibí un mensaje y vi que la hora de la reunión sería a las 18:00. Decidí que lo mejor era quedarme por ahora y luego salir.

Si me dirijo directamente a la entrada, me encontraré con Kensei y los demás compañeros. En cualquier caso, como tenía una cita con Chabashira-sensei, decidí pasear por el edificio de la escuela, donde había menos gente.

―Ayanokouji-kun.

Sabía que me estaban siguiendo. Y cuando ya no había nadie alrededor, alguien me llamó.

―¿Qué pasa? ¿Se trata de Kushida?

―No. No contestó cuando la llamé. Así que lo único que hice fue advertirle que no hiciera nada por desesperación en este momento.

Kushida tenía muchos amigos a su alrededor, pero cuando el examen terminó, nadie la llamó. Era comprensible que fuera difícil acercarse a ella justo después de haber mostrado su verdadera naturaleza.

―Lo siento.

Mientras su pelo, un poco más largo que antes, se balanceaba, Horikita inclinó la cabeza profundamente.

―En este examen especial.... yo...... no fui lo suficientemente fuerte.

―¿No fuiste lo suficientemente fuerte? Lo hiciste lo mejor que pudiste, ¿no? Esta vez, fue una batalla mucho más dura que la votación de la clase del año pasado.

―Aunque la batalla haya sido dura, te puse un gran grillete....... y tuviste que asumir toda la responsabilidad que debería haber sido mía.

Era inevitable que otro estudiante fuera expulsado. Por lo que Horikita quería mostrar sus pensamientos.

―Yo fui quien te dijo que te mantuvieras en silencio, así que está bien.

―Pero aun así. Tu precioso grupo ha quedado marcado sin remedio. Sinceramente...... no creo que seas capaz de repararlo en el futuro.

―Me parece bien. Nunca se sabe, puede llegar un día en que piense que es más conveniente así.

Ciertamente, si hubiera involucrado a Horikita, la culpa por causar el incidente se dividiría entre los dos. Pero esa situación no era la que yo quería.

―¿Conveniente....? ¿Qué quieres decir?

―No te preocupes por eso. No es nada importante.

Por supuesto, no creo que logre cambiar de opinión y convencerme de ello pronto, pero no quiero arrastrar este examen especial al siguiente.

―Mira el lado bueno. Ganamos 100 valiosos puntos de clase para lograr nuestro objetivo de subir a la clase A. No hay que burlarse de estos puntos.

―Pero aun así..... en cambio, perdimos a Sakura-san.

―El promedio de la clase también se elevó como resultado. Un punto final perfecto.

―Basta. No hay necesidad de que te obligues a actuar con tanta dureza.

―¿Obligarme?

Intenté negarlo, pero decidí seguirle la corriente a sus palabras.

―Tienes razón. Tal vez sólo estoy tratando de alejar estos sentimientos dolorosos.

―¡Kiyotaka-kun!

Una voz familiar y gentil llegó desde el final del pasillo. Horikita, sorprendida por la voz, se giró para ver de quién se trataba, pero solo se sorprendió de a quién pertenecía la voz.

―Eres.... Sakura…san...

Airi, a quien le faltaba terriblemente la resistencia, parecía estar sin aliento mientras caminaba hacia nosotros.

―.... Ya me voy a poner en marcha.....

―Sí, está bien.

En el momento en que pasó junto a Airi, Horikita intentó hablarle pero dudó, y al final no fue capaz. Quizás no se le ocurría nada que decir a la que pronto se marcharía.

―Quería enseñarle esto a Kiyotaka-kun como fuera...... Entonces, ¿qué te parece?

Justo antes de la última votación, Haruka dijo algo sobre que Airi me mostraría una nueva imagen. ¿Era esto a lo que se refería?

―Tienes un aspecto muy diferente, por un momento casi te confundí con otra persona. No me extraña que Horikita no te reconociera.

―Llego un poco..... demasiado tarde, para ser valiente aunque...... jeje.

Airi, que se había quitado las gafas y se había peinado con estilo, se ríe en voz baja consigo misma.

―Esto no lo puede decir alguien como yo pero...... por favor, cuida de Haruka-chan.

―Lo sé.

―Adiós───Kiyotaka-kun.

Airi esbozó la mayor sonrisa que le he visto poner en la cara y se dio la vuelta. Comenzó a caminar, pero por momentos sus pasos se ralentizaban y a veces incluso se detenía por completo.

Aun así, dio un paso adelante y no miró atrás.

Desde el pasillo vacío, podía oír ligeramente su voz.

El sonido de los moqueos y el llanto que intentaba reprimir desesperadamente.

Ver una escena así me recordó una escena que solía ver mucho.

Los derrotados siempre miran hacia atrás y se arrepienten de su miseria cuando ya es demasiado tarde.

Ya sea en la Habitación Blanca o en esta escuela, es lo mismo.




ANTERIOR -- PRINCIPAL -- SIGUIENTE




3 comentarios:

  1. El personaje de Sakura no me atraía mucho, pero debo decir que esto fué bastante triste en general, y al Ayanogod ni le importó, también está kushida derrumbándose. Dios mío pero que capitulazo

    ResponderBorrar