Youkoso Jitsuryoku Shijou Shugi no Kyoushitsu e Volumen 11 - Capítulo 8

CLASE B VS. CLASE D


Mientras que la clase A y la clase C aún estaban calificando sus exámenes de matemáticas en su tercer evento...

El resultado del cuarto evento de la batalla entre la clase B y la clase D ya había sido decidido.

—Después de contar los resultados, la Clase B terminó con 601 puntos, mientras que la Clase D terminó con 409 puntos. La clase B gana el cuarto evento.

Después de escuchar a Mashima-sensei anunciar los resultados, Ichinose dio un suspiro de alivio.

El evento había sido una prueba académica que la Clase B había sugerido, así que habría sido casi imposible que perdieran.

—Bueno, ¿no eres afortunada, Ichinose? Deberías estar agradecida de que sigamos sacando los eventos de la Clase B.

—...Sí.

A pesar de haber ganado, Ichinose seguía visiblemente angustiada, mientras que el perdedor, Ryuuen, parecía estar perfectamente tranquilo.

Además, esto era natural. De los cuatro eventos que habían sido sorteados hasta ahora, tres de ellos habían sido sugeridos por la Clase B. Sin embargo, esos cuatro eventos no habían terminado como se esperaba, ya que el puntaje estaba empatado con dos victorias por cada una entre la Clase B y la Clase D. Durante el tercer evento, la Clase B perdió en su propio juego, la Prueba de Química. Además, la razón de su derrota fue obvia.

—Sensei... ¿Los estudiantes con dolores de estómago ya han vuelto del baño?


A petición de Ichinose, Mashima-sensei se puso en contacto con el aula para comprobar la situación en la clase B.

—No, dos de ellos aún no han vuelto del baño, y parece que varios de los otros también han empezado a sentirse mal ahora.

—¿Es eso tan-

La razón por la que la clase B perdió el evento de Química fue porque una parte de su principal fuerza de combate se enfermó inesperadamente.

Pero, esa no era la única razón. El día anterior al examen, algunos de los estudiantes de la clase B tuvieron una disputa con la clase D, la cual también tuvo un impacto.

Aunque se presentó una queja a la escuela, ninguna de las dos clases fue penalizada ya que sólo fue una discusión verbal.

Estas acciones encubiertas habían sido indudablemente orquestadas por el hombre sentado al otro lado de la mesa, Ryuuen.

Ichinose respiró profundamente para recomponerse una vez más.

—Haa... Está bien, está bien.

Todavía no habían perdido la delantera. Ichinose perdió el control desde su derrota en el evento de Química, pero ahora comenzaba a volver lentamente a la normalidad. Si bien era cierto que seguían apareciendo problemas uno tras otro, las acciones de Ryuuen eran limitadas. Como comandante, no sería capaz de hacer nada que ella no pudiera hacer también.

Ichinose trató desesperadamente de recuperar su confianza. Decirse a sí misma que, mientras continuara luchando duro, no perderían.

—Oigan, ustedes maestros. Apúrense y comiencen el quinto evento ya. Esos tontos de la clase B ni siquiera pudieron cuidar su salud para el día del examen. ¿Realmente van a hacer concesiones para un grupo tan ingenuo como ese?

—Cuida tu lenguaje, Ryuuen.

A pesar de la advertencia de Chabashira-sensei por su lenguaje arrogante, a Ryuuen no pareció importarle.

De hecho, hasta lo aumentó un poco.

—No sé si están en el inodoro o lo que sea, pero podrían estar usando este tiempo para planear su estrategia. Además, es extraño que varias personas se hayan enfermado al mismo tiempo. ¿Qué clase de trucos siniestros estás haciendo, Ichinose?

—Yo no...

Ryuuen despertó las sospechas de que varias personas reportaron sentirse mal al mismo tiempo.

A pesar de que Ichinose sabía que no existía absolutamente ninguna mala intención por su parte, tampoco tenía espacio para refutarlo.

—De cualquier manera, sigamos con esto, ¿podemos “profes”?

Con una sonrisa en la cara, Ryuuen echó un vistazo a Chabashira-sensei para confirmarlo.

—Ryuuen, desde luego tiene razón en eso. Mashima-sensei, por favor proceda con el quinto evento, ¿quiere?

Mashima-sensei comenzó el sorteo del quinto evento.



『Karate』 Participantes requeridos: 3 ・ Tiempo: 10 minutos

Reglas: Cada combate durará como máximo 3 minutos, usando el conjunto de reglas de Karate Sundome sin contacto. Los combates adoptarán el estilo de torneo "El perdedor se va, el ganador se queda".

Intervención del Comandante: El comandante puede, en cualquier momento, pedir que se rehaga uno de los combates.



—Genial, esta vez es uno de nuestros eventos. Nos enfrentaremos a cualquiera, no importa quién.

Ryuuen eligió a Suzuki Hidetoshi, Oda Takumi, e Ishizaki Daichi para sus tres participantes. Las reglas de intervención del comandante también eran perfectas para él, dándole la posibilidad de pedir la revancha en caso de que algo inesperado sucediera y perdieran uno de los combates.

Por otro lado, Ichinose eligió a Sumida Makoto, Watanabe Norihito y Yonezu Haruto. Cuando se anunciaron los eventos de la clase contraria, ella había encargado a estos tres que practicaran para el evento de karate, pero estaban muy ocupados con sólo recordar las reglas.

Como resultado, la clase B sufrió dos derrotas consecutivas. Incluso cuando Ichinose intentó hacer uso de sus poderes como comandante para pedir la revancha, no consiguió cambiar nada.

El quinto evento había sido una de las derrotas más rápidas y decisivas hasta el momento.

En este punto, la clase B no tenía más margen de maniobra. Si perdían el siguiente evento, el sexto, perderían todo el examen especial.

—Es gracioso, ¿no es así, Ichinose?

Mientras esperaban que el sorteo dictara sentencia, Ryuuen le habló a Ichinose, que se había quedado más callada.

—Cuando se decidió que irían contra la clase D al anunciarse el examen especial, apuesto a que sintieron que tenían una ventaja absoluta. Pero mirándote ahora, es como si lo único que pudieras hacer es sentarte ahí y rezar a los cielos. Kuku.

Las estrategias de Ichinose no fueron en absoluto ingenuas.

Si estuvieran compitiendo en circunstancias normales, la clase B estaría con 3 victorias y 2 derrotas en este momento.

Pero en vez de eso, ocurrió un accidente repentino que puso todo fuera de orden.

Si no sorteaban uno de sus eventos aquí, no tendrían ninguna oportunidad.

Y entonces fue elegido, el sexto evento.



『Judo』 Participantes requeridos: 1 ・ Tiempo de competición: 4 minutos (hasta 3 competiciones para un total de 12 minutos)

Reglas: Se aplican las reglas estándar del judo.

Intervención del Comandante: El comandante puede elegir invalidar los resultados de un combate y pedir la revancha.



Un evento de uno contra uno. Para la clase B, el evento que se había elegido era el peor resultado posible.

Esta fue la primera vez que Ichinose tuvo realmente la sensación de estar sumergida en la oscuridad.

—Kukuku. ¿Judo? Judo, ¿eh? Que ESO fuera elegido de entre todas las cosas. La dama de la fortuna no te sonríe, Ichinose.

—Cómo...

—¡Si los dos últimos eventos hubieran sido de la clase B, todavía tendrías una oportunidad de ganar!

Ryuuen eligió a Yamada Albert sin dudarlo.

Al igual que en el evento de karate anterior, las reglas sobre la intervención del comandante eran una póliza de seguro final que prácticamente garantizaba que no perdería.

—Aunque tu oponente sea Albert, no dejes que te afecte. El más fuerte no siempre gana, así que nunca sabrás hasta que lo intentes.

El resultado ya estaba tan claro como el día. Sería extremadamente difícil que la Clase B venciera a un oponente cuyo físico y habilidad superan con creces a los suyos.

Era el único evento en el que la clase B se había rendido, en el que no serían capaces de ganar sin importar lo que pasara. Ichinose tenía que seleccionar a una sola persona, y sólo disponía de 30 segundos para decidir quién sería. Pero ahora, Ichinose ya no podía ni siquiera tomar la decisión de nominar a alguien.

Los segundos transcurrieron sin piedad hasta que el cronómetro llegó finalmente a 0. Según las reglas, un estudiante sería elegido al azar si el comandante no hacía la elección a tiempo, pero después de considerar el peligro del evento, Mashima-sensei promulgó la decisión inmediatamente.

—La clase B pierde este evento por default. Y, esto marca la cuarta victoria de la clase D, haciendo que la clase D sea la vencedora general de este examen especial.

En la misericordiosa declaración de Mashima, el resultado de la batalla entre la clase B y la clase D había sido establecido.



PARTE 1

A partir de aquí, la historia regresa al día en que se anunció por primera vez el examen especial.

Solo, Ishizaki siguió a Ryuuen mientras se dirigía a comer su almuerzo. La clase D ya había decidido nombrar a Kaneda su comandante, pero tenían problemas para decidir qué eventos elegir.

La razón era que nadie en la clase D era capaz de tener ideas originales.

Eventos ordinarios, reglas ordinarias, estilos de pelea ordinarios.

Sólo eran capaces de llegar a ideas simples y ordinarias que a cualquiera se le ocurrirían.

Si no encontraban nada mejor, sus posibilidades de ganar contra cualquiera de las otras clases eran prácticamente nulas.

Presentar diez eventos comunes y corrientes era simplemente la salida fácil.

En la clase D, la opinión actual era que debían evitar enfrentarse a la clase A porque sus habilidades eran demasiado abrumadoras. Del mismo modo, llegaron a la conclusión de que podría ser aún de mayor importancia evitar a la Clase B.

Así que, naturalmente, todos querían ir tras la prometedora Clase C. Es decir, todos menos Ishizaki.

—Uhh ¿podrías darme un momento, Ryuuen-san?

A pesar de su temor a hacerlo, Ishizaki comprobó los alrededores para asegurarse de que no había otros estudiantes de primer año antes de llamar a Ryuuen.

—¿Hm?

Con sólo una mirada de los duros ojos de Ryuuen, Ishizaki se congeló como una rana que había sido vista por una serpiente.

Pero a pesar de que su cuerpo se congeló ante él, su boca se las arregló para hablar.

—Te ruego, por favor, ¡dame algo de tu tiempo!

—Oh, así que ya eres lo suficientemente grande como para oponerte a mí, ¿eh?

—N-no, no es eso...

—Kuku. Bueno, lo que sea. Prácticamente eres el líder de la clase D ahora mismo.

Ryuuen sentía que sólo estaba prolongando lo inevitable en este momento. Que esto no era más que tiempo extra en una escuela de la que eventualmente sería forzado a salir, así que tenía mucho tiempo que matar. Los dos se fueron caminando al exterior con Ryuuen a la cabeza.

Incluso si alguien fuera testigo de esos dos, parecería que Ishizaki había llamado a Ryuuen o algo así.

Una vez que salieron del edificio de la escuela y llegaron a un área donde no había gente, Ishizaki se arrodilló rápidamente.

—Ryuuen-san, por favor... ¡préstale su fuerza a la clase D para este examen especial!

Desde el momento en que Ishizaki lo llamó, Ryuuen tenía una idea sólida de lo que Ishizaki quería. Sin embargo, no dijo ni una palabra al respecto. Sólo miró a Ishizaki postrado en el suelo ante él.

—Estás diciendo tonterías, Ishizaki. Me retiré. Ya te lo dije. ¿De verdad crees que te ayudaré?

—Eso, lo sé. ¡Pero tal y como estamos ahora, apenas tenemos posibilidades contra las otras clases!

—Sí, seguramente.

Ryuuen tampoco lo negó.

Después de todo, ya lo había pensado. Cuando se trata de puro potencial competitivo, la clase D es abrumadoramente inferior a las otras clases.

—Kaneda se puso al frente, así que aunque perdamos nadie será expulsado... ...pero si perdemos en este momento, los puntos de nuestra clase casi desaparecerán.

—Bueno, eso es lo que obtienes si pierdes siete eventos seguidos, ¿eh?

La clase D tiene actualmente 318 puntos de clase. Si perdieran los siete enfrentamientos, se reducirían a un total de 100 puntos. Aunque ese era el peor de los casos, no era tan improbable dada la actual tendencia de la clase.

—¿Así que quieres que sea el comandante? ¿Quién estaría de acuerdo con algo así?

—Eso-

Para poder expulsar a Ryuuen, tendrían que convertirlo en el comandante. Y además, tendrían que perder.

Sin embargo, la clase tendría que sufrir una gran pérdida sólo para hacer que expulsen a una persona, y nadie estaba muy ansioso por hacer ese intercambio.

Si sus puntos de clase llegaran a bajar a 0, sería realmente imposible que llegaran a la clase A.

No solo eso. Sería casi imposible vivir una vida estable en esta escuela.

El resultado óptimo de la clase D era la victoria. Lo segundo sería perder y forzar la expulsión de Ryuuen.

Pero sin importar qué, tienen que evitar ser aplastados y perder al mismo tiempo su único punto de protección.

Ishizaki quería que la Clase D ganara, tampoco quería que Ryuuen fuera expulsado.

Y si alguien de la clase podía hacer que eso sucediera, sería el mismo Ryuuen.

—...Entonces, ¿qué deberíamos hacer? ¿Deberíamos ir por la Clase C?

En circunstancias normales, Ishizaki habría estado completamente a favor de elegir a la Clase C, pero el problema con eso era Ayanokouji.

La vacilación de Ishizaki provenía del hecho de que era uno de los pocos estudiantes que conocía la verdadera naturaleza de ese hombre.

—No vengas a pedir mi opinión como si nada. ¿Quién te dijo que aceptaré?

Para Ishizaki, esto era todo o nada, pero las palabras de Ryuuen dejaron claro que había sido demasiado imprudente. No obstante, igualmente, seguiría postrándose. Estaba dispuesto a seguir así hasta el momento en que Ryuuen se fuera.

—Tienes razón en que la clase C no está muy unida. Tienen un monstruo como Ayanokouji, pero al final, es sólo un tipo. Podrías llegar a estar tentado a pensar que tendrías una oportunidad porque es una competición por equipos... aunque, estarías equivocado.

—¿Qué?

Ryuuen, el mismo hombre al que Ishizaki creía que no tenía posibilidad de convencer, decidió de forma inesperada compartir sus pensamientos.

—Ponme como comandante y evitaré enfrentarme a la clase C. No conozco todo el proceso de cómo elegimos a nuestro oponente, pero esa clase no es una que quisiera desafiar voluntariamente.

—P-pero aparte de Ayanokuiji-

—Eso no tiene nada que ver, cabeza hueca.

Ishizaki retrocedió un poco.

—Aunque la clase D está llena de imbéciles incompetentes como tú, todavía tenemos las herramientas para tener éxito en otros aspectos. Pero, la clase C no es la mejor opción que tenemos disponible. No, sólo hay una clase lo suficientemente adecuada para ser nuestro oponente.

—¿Cuál es?

—La clase B.

Ryuuen dijo el nombre de la clase sin siquiera mirar a Ishizaki quien estaba por debajo de él.

—Si buscas ganar este examen, la clase B es tu única opción.

Propuso la clase B, una clase que todos los de la clase D querían evitar.

—Incluso un idiota puede ser útil dependiendo de lo que hagas con ellos.

Con eso, Ryuuen le dio la espalda a Ishizaki y comenzó a irse.

—¡P-por favor, espera! ¿Cómo, cómo podríamos vencer a la clase B?

Ishizaki se puso de pie y lo llamó.

—¡Ryuuen-san! ¡Ryuuen-saaan!

Pero los gritos de Ishizaki no impidieron que se alejara.



PARTE 2

Como el acreditado al derrocamiento de Ryuuen, la influencia de Ishizaki dentro de la clase D en realidad no era baja.

Sin embargo, eso no significaba que no hubiera problemas.

El que debería haber sido expulsado durante el examen provisional, Ryuuen, seguía aquí. La clase había centrado sus votos de desaprobación en Manabe para amenazarla un poco, pero terminó siendo expulsada. Naturalmente, muchos estudiantes mostraron sospechas por esto.

Por supuesto, la primera pregunta en la mente de todos fue: ¿Exactamente quién emitió un número tan grande de votos de aprobación para Ryuuen?

¿Alguien de la clase D votó por él? O, si era de otra clase, ¿cuál?

Muchas teorías fueron discutidas repetidamente mientras la clase D intentaba razonar lo que había pasado.

Debido sobre todo al alto grado de anonimato del examen especial provisional, les había sido imposible averiguar la respuesta exacta.

En realidad, Ichinose de la Clase B llegó indirectamente a un acuerdo con Ryuuen, ofreciendo un gran número de votos de aprobación a cambio de la reserva de puntos privados de Ryuuen. Si bien eso fue lo que ocurrió, la Clase B nunca le diría eso a nadie. Como Ichinose había pedido mantenerlo en secreto, sus compañeros de clase obedientemente siguieron el juego. La clase B la habría escuchado de cualquier manera, pero en este caso, había sido parte de una estrategia para evitar que uno de sus compañeros fuera expulsado, así que todos estaban ansiosos por obedecerla.

Mientras tanto, la Clase D se encontraba sumergida en la paranoia.

Sin embargo, algunos de ellos sabían la verdad. Ishizaki e Ibuki tomaron acción para prevenir la expulsión de Ryuuen, y Shiina Hiyori colaboró con ellos.

Puesto que no sería extraño que todo se paralizara en este punto, Shiina jugó el importante papel de hacer uso de los consejos que Ishizaki recibió de Ryuuen.

Trabajó diligentemente para asegurarse de que su clase se confrontara con la Clase B.

En una conversación privada con Kaneda, ella lo guio sutilmente para llegar a la conclusión de que la Clase B era su mejor opción.

Sin embargo, eso no significaba que el problema se hubiera resuelto.

La propia Shiina era consciente de que, sin ningún tipo de liderazgo, las posibilidades de ganar de la Clase D serían tan delgadas como el papel si se enfrentaran a la Clase B en este momento. Sabía que retroceder, aunque fuera ligeramente, les llevaría a la derrota.

Así que ese mismo día, después de que se decidieran los enfrentamientos de las clases, Shiina puso inmediatamente en marcha un determinado plan.

—Maldición. ¿Qué deberíamos hacer...?

Dentro de una habitación alquilada en la sala de Karaoke, Ishizaki desahogó su frustración.

—No sé. Exactamente, ¿por qué me llamaste aquí? ¿Qué clase de grupo es este?

Ibuki miró fijamente a Ishizaki antes de darle a Shiina, que estaba sentada a su lado, una mirada igualmente dura.

—¿Cómo podemos decirlo...? ¿Este es Ishizaki-kun y su alegre banda de amigos?

Ibuki se agachó en su asiento mientras miraba a Shiina por su respuesta tonta.

—Haa... Me duele la cabeza.

—Como las tres personas que mejor entienden la situación actual, creo que podremos proponer algunas ideas reuniéndonos de esta manera. Manjushri le habla a tres, como dicen. (Esta expresión se supone que es algo así como "Dos cabezas piensan mejor que una")

—¿El "Jugo de Hombre" le habla a tres? Heh. ¿Qué hay con eso? (Igual aquí, se supone Ishizaki dice algo intraducible pero que es estúpido. Por eso, supongo, se jugó con el Manjush ---> Man Jush ---> Jush, supongo que es como los japoneses pronuncian Juice ---> Man Juice = Jugo de Hombre ---> que en un contexto “sexoso” ¿qué se imaginan con “Jugo de Hombre”?) 

—Lo dijiste a propósito, ¿no?

—¡Ay! Ibuki, ¡perra! ¡Deja de pellizcarme así la piel del dorso de la mano!

—Agradable y animado. Sabía que reunirnos en una sala de karaoke sería una buena decisión.

Al ver la interacción entre Ibuki e Ishizaki, Shiina juntó sus manos felizmente. Ibuki, sin embargo, no compartía nada de eso.

—No podemos tener una discusión decente con un grupo como este. Me voy de aquí.

—Ah, eso sería problemático. Ryuuen-kun también va a venir.

—¿Qué?

Ishizaki e Ibuki dijeron lo mismo al mismo tiempo.

—Ryuuen-kun es absolutamente esencial para ganar este examen especial. Después de todo, él es el único que vio potencial para enfrentar la Clase B cuando todos los demás querían evitarlo.

Shiina detonó una bomba inesperada.

No parecía entender el peso de sus palabras.

—Tú, ¿qué acabas de decir?

—¿Eh? Dije que es el único que vi-

—Eso no. Lo que dijiste antes. ¿Quién dijiste que aparecería aquí?

—Ryuuen-kun.

Ibuki miró a Ishizaki. Ishizaki miró a Ibuki.

—¿E-en serio? ¿Ryuuen-san? ¿¿¿¿Aquí????

—Sí. Ya lo invité.

—Esta va a ser una de las peores reuniones de karaoke que he visto... pero, ¿le contaste sobre nosotros?

—Le dije que ambos estarían aquí, por supuesto.

—¿Me estás diciendo que sabe que estamos aquí y que todavía va a venir...?

Ishizaki ya había intentado que Ryuuen cooperara y fue rechazado, así que era natural que sospechara.

—Preguntaré sólo para asegurarme, pero ¿a qué hora dijo ese tipo que llegaría?

—A las 4.

—...¿Eh?

Ibuki echó un vistazo al reloj de la pared.

La hora era poco más de las 5:05 PM.

—Parece que llega un poco tarde.

—¡Ha pasado más de media hora! ¡Eso no se llama llegar tarde! ¡Eso se llama ser ignorado!

—Cálmate y sírvete un poco de esta gaseosa de melón. Seamos pacientes, ¿sí?

Ibuki ignoró por completo la lata de refresco de melón que Shiina le ofreció.

—No tengo tiempo para esto...

Cuando Ibuki estaba a punto de levantarse, Ishizaki la detuvo.

—Voy a esperar. Ryuuen-san definitivamente vendrá... tal vez...

—¿Eres un retrasado? Es imposible que ese tipo cumpla su palabra.

De hecho, ya estaba sustancialmente retrasado. Sin querer involucrarse en esto, Ibuki emitió una disculpa superficial y comenzó a caminar hacia la puerta.

Pero esta vez, una delgada y blanca mano se extendió y agarró a Ibuki por el brazo.

—Esperemos, Ibuki-san. Puede que no lo parezca, pero Ryuuen-kun es una persona seria, ¿no estás de acuerdo?

—...Tú... ¿Qué sabes de él?

—No sé mucho. Honestamente, sólo he hablado con él unas pocas veces.

—¿Entonces por qué?

—Tengo la sensación de que lo es.

—Así que es infundado. Qué dulzura.

—Podrías decir eso.

Shiina respondió con una sonrisa pura e inofensiva en la que Ibuki se vio atrapada.

—Además, me estoy divirtiendo mucho pasando tiempo con ustedes dos. ¿No te quedarás?

—...idiota.

Ibuki se sentó de nuevo, exasperada.

—Si no aparece pronto, me iré de aquí, ¿de acuerdo?

—Está bien...



PARTE 3

—¡No puedo soportarlo más! ¡Estoy al límite!

Aunque Ibuki había sido más que paciente, ya eran más de las 8 PM.

Estaba más que irritada. La palabra "tarde" apenas se aplicaba ya; esto sólo podía describirse como ser plantado.

—Oho. Dices eso, pero ¿no has cantado sólo como 10 canciones?

—¡Todavía no has llegado a tu límite, Ibuki-san!

—¡Hace mucho tiempo que pasé mi límite! ¡Estoy harta de esto!

—¡Entonces hagamos todo lo posible para tratar de superar tus límites por completo!

—¡No estoy bromeando!

—Jeeze, estás enojada... ¿No estás cansada de estar enojada todo el tiempo?

—Una mirada a tu fea cara haría que cualquiera se cansara un millón de veces más.

Ishizaki extendió la mano para intentar detener a Ibuki, pero ella lo esquivó y decidió irse.

Sin embargo, justo cuando cogió la manilla de la puerta, ésta se abrió sola.

—¿Qué demonios? ¿En serio esperaron aquí pensando que eventualmente aparecería?

Un hombre, Ryuuen, entró en la habitación con una sonrisa en su cara. Como por impulso, Ishizaki e Ibuki se congelaron por completo.

Nunca pensaron que realmente vendría.

—Llegas tarde, Ryuuen-kun.

—Dices eso, pero parece que te estás divirtiendo.

—Sí. Nunca había venido al karaoke antes. Me la estoy pasando muy bien.

—Entonces me alejaré de ti. Asegúrate de divertirte, Ibuki. Siento haberlos molestado a todos.

Ryuuen se burló mientras intentaba cerrar la puerta tras él, pero Ibuki lo detuvo.

—Te patearé el culo si me dejas aquí en el infierno del karaoke por más tiempo.

—Kuku. Qué miedo.

Ryuuen fue arrastrado a la habitación por Ibuki e Ishizaki le pidió un poco de agua mineral.

Entonces, se sentó y empezó a jugar con su teléfono sin decir nada.

—...¿Y?

Ibuki lo interrogó, instándole a hablar.

—¿Y? ¿Qué quieres decir?

—¿Nos has hecho esperar tanto tiempo y no vas a decir nada?

—Sólo vine a ver si todavía estaban perdiendo el tiempo esperándome aquí.

Tomó un sorbo del agua mineral que Ishizaki había pedido para él.

—Eso es todo.

—Shiina me obligó a quedarme aquí durante horas. Se me acabó la paciencia.

—No es mi culpa.

—¡Claro que sí!

Golpeando sus puños contra la mesa, Ibuki frunció el ceño a Ryuuen.

—O-oi, cálmate Ibuki. Meterte con Ryuuen-san no te servirá de nada.

—Para llorar, ¿cuánto tiempo te vas a quedar ahí sentado moviendo la cola por él?

—¿Cuánto tiempo? Yo... ya he decidido seguir a Ryuuen-san.

—Canalla desvergonzado. Odiabas ser su lacayo al principio.

—¡No digas mierdas innecesarias como esa!

Mientras los dos estaban ocupados atacándose, Shiina estaba concentrada en seleccionar una nueva canción.

—Acabamos tirando por la borda nuestro derecho a elegir a nuestro oponente porque este idiota se enredó en tu palabrería.

—Eso parece.

Ishizaki se acurrucó. Si hubieran seguido el consenso de clase, habrían elegido la clase C. Era la única clase que pensaban que tendrían una oportunidad de derrotar.

Sin embargo, las acciones de Ishizaki cambiaron las cosas, y no tenían la menor idea de cómo ganarían.

—Este bufón escucha todo lo que sale de tu boca. Eso significa que también eres parcialmente responsable por decirlo.

—Kuku, no puedo culparte. Yo también dije algo estúpido.

Con una sonrisa, Ryuuen comenzó a abrirse.

—¿Recuerdas lo que le hice a la clase B a principios de año?

—... Si recuerdo bien, trataste de separarlos, ¿no?

Por instrucciones de Ryuuen, comenzó una disputa con la clase B donde intentó que se pelearan.

Para comprobar el potencial de cada clase, intencionalmente provocó un incendio.

Había sucedido en la época en que Sudou se había metido en una pelea y cuando secretamente se puso en contacto con Katsuragi.

—¿Recuerdas cuál fue el resultado?

—No tuvo ningún efecto. La clase B se unió muy rápido. ¿Verdad?

—Sí. Esos tipos tienen más cohesión y unidad que cualquier otra clase.

—¿No es por eso que deberíamos haber evitado enfrentarnos a la Clase B en una competición por equipos como esta?

—Estoy de acuerdo con Ibuki. Será difícil ir en contra de Ichinose y su ejército de admiradores.

Ibuki e Ishizaki compartían la opinión conjunta de la clase D.

—Shiina, ¿qué opinas de la clase B?

—Veamos... Como Ibuki-san e Ishizaki-kun han dicho, la clase B es realmente fuerte. Todas sus habilidades están por encima de la media. Resulta envidiable que sean tan armoniosos, pero... se podría decir que es todo lo que tienen. No presentan ninguna amenaza en particular, sólo son una clase muy unida.

Después de que Shiina terminara de hacer su análisis, Ibuki comentó en voz baja.

—Tienes una cara tan gentil, pero tus palabras son casi desalmadas.

Después de escuchar las opiniones de todos, Ryuuen dio su propia evaluación de la clase B.

—Si me preguntas, su mayor defecto es Ichinose... Tacha eso, es su falta de un líder.

—E-espera. No entiendo lo que quieres decir. Ichinose es su líder, ¿no es así?

—Entre Ichinose y Kanzaki, ninguno de los dos son líderes natos. Son el tipo de personas que están mejor preparadas para apoyar a un líder. En lugar de poner a alguien como ella a cargo, estarían mucho mejor con gente como Suzune o Katsuragi. Esta es la razón por la que nuestra podrida clase D tiene una oportunidad de ganar.

—Pero el hecho de que sea un enfrentamiento incompatible todavía no ha cambiado, ¿verdad? La clase D está por debajo de la media en casi todo, así que en ese sentido, hasta se podría decir que es el peor oponente posible para nosotros ahora mismo.

—Diría que tenemos pocas posibilidades sin importar contra quién nos enfrentemos.

—... ¿Realmente apestamos tanto?

Mientras Ishizaki estaba completamente aturdido, ni Ryuuen ni Shiina se vieron muy afectados por su reacción.

—Pero...

Ryuuen tomó su vaso vacío y miró a Ibuki y a los demás a través del mismo.

—Con un poco de artimañas, nuestras bajas posibilidades estarán más cerca del 50%. Y dependiendo de la situación, podría dispararse aún más alto que eso.

Ryuuen sacó una hoja de papel doblado y se la entregó a Shiina.

En ella estaban escritos los nombres de diez eventos diferentes, cinco de los cuales habían sido marcados como los eventos que realmente elegirían.

Mientras Shiina lo leía, Ibuki e Ishizaki se inclinaron a un lado para poder mirar también.

—Cuando llegue el día, aplastaremos en este examen.

—Espera un segundo, estos son todos...

—Así es. Esos eventos se basan enteramente en forzar a tus oponentes a rendirse por la fuerza bruta.

Diez eventos físicamente exigentes, incluyendo Karate, Judo, Taekwondo, Kendo y Lucha Clásica.

—Aguarda. Es cierto que hay varias personas en nuestra clase que pueden defenderse como yo, Albert, Komiya y Kondou. Ibuki también... pero algunos de los otros no pueden.

Ishizaki dijo eso, incluso si los estudiantes más fuertes podían ganar en uno o dos eventos, no había forma de saber cómo se desarrollaría el resto de los eventos.

—Sí. La clase B tiene mucha gente atlética. Sería diferente si pudiéramos hacer que compitieran uno contra uno, pero ¿no interfiere la regla del número requerido de participantes?

Ibuki compartía la incertidumbre de Ishizaki. Aunque lo dejaran todo a la suerte del sorteo, no había garantía de que ganaran todos. Sin embargo, Ryuuen respondió rotundamente.

—¿Y qué?

—¿Eh?

—No te dejes atrapar por mierdas como los números de participantes. No importa.

A Ishizaki le costaba entender las intenciones de Ryuuen, pero Shiina se dio cuenta inmediatamente.

—Ya veo, ¿así es como debemos verlo? No importa cuántos participantes pueda tener un evento, todo depende de las reglas. Si usamos las reglas de knock-out de torneo, podemos ganar con una sola persona.

—Exactamente. Digamos que hacemos un evento de Judo de diez contra diez. Con sólo tener a Albert sería más que suficiente.

—Pero... ¿la escuela lo aceptará? ¿Reglas de knock-out al estilo de los torneos?

—Probablemente sea imposible usar las reglas de knock-out en una prueba escrita o en algún tipo de juego de pelota. Pero en deportes como el karate y el judo, las reglas de los torneos son bastante estándar. No podrán decir que son inaceptables. Para eventos como el karate, debería estar bien siempre y cuando usemos las reglas de Sundome sin contacto para disminuir el peligro. Incluso si la escuela rechaza uno o dos de ellos por ser demasiado peligrosos, debería estar bien si de alguna manera podemos conseguir al menos cinco a través del proceso.

—¡Podemos hacerlo! Con esto, realmente podemos hacerlo Ryuuen-san!

Habiendo finalmente juntado todas las piezas, un rayo de esperanza apareció en los ojos de Ishizaki. Sin embargo, Ibuki todavía tenía sus dudas.

—Con esto, es cierto que seremos capaces de ganar nuestros eventos, pero... ¿qué pasa si no tenemos suerte? ¿Y si más eventos de la clase B resultan sorteados?

—Hay un 50% de posibilidades, ¿no puedes ser feliz con eso?

—...Si voy a cooperar contigo, tendré que exigirte que asegures la victoria.

—Kuku, por supuesto. Tengo un plan.

Basándose en habilidad bruta, la Clase D no estaba en posición de pensar ahora mismo en ganar los eventos que la Clase B propondría.

Ryuuen decía que necesitaban encontrar otro método para acortar la brecha.

—¿Qué quieres que hagamos?

Poco a poco, Ibuki empezó a entender la situación.

—Pecar para ganar.

Ryuuen sonrió.

—Estarán molestando a algunos de esos chicos de la clase B día tras día hasta el examen. Al principio, todo lo que tienen que hacer es seguirlos. Se darán cuenta de lo que estamos haciendo tarde o temprano.

—¿Qué diablos? ¿Realmente dices que algo tan pequeño como eso los va a estresar?

—La clase B se reirá de nosotros, diciendo que nuestras acciones son infantiles. Mientras no les hagamos daño, elegirán ignorarlo. Ese es el tipo de persona que es Ichinose. Al final, ni siquiera se dará cuenta de lo que estamos haciendo.

—¿...Lo que estamos haciendo?

—De cualquier manera, ese es el plan para la primera semana. Una vez que se anuncien sus diez eventos, aumentaremos la temperatura. Cualquier cosa insignificante servirá. Tomar sus asientos en la cafetería, mirarlos, acusarlos de ser ruidosos. Todo vale, de verdad, pero no se pasen de la raya. Ustedes conocen a las personas perfectas para hacer esto, ¿verdad?

Ryuuen estaba diciendo que deberían incluir a la gente que puede arreglárselas en peleas como Ishizaki.

—¿Significa... significa que quieres que los provoque?

—Nuestro objetivo es simplemente interactuar más con ellos. Ni siquiera pienses en amenazarlos o pelear con ellos en este momento. Lo dejaremos como una carta de triunfo que podemos sacarles al final.

Era necesario mantener todo lo que hacían tan ambiguo y abstracto como fuera posible.

Si creaban un montón de problemas, no había forma de evitar que la escuela interviniera.

—La parte más importante de todo esto es la información. A través de todas nuestras interacciones con ellos, robaremos información y nos adelantaremos a averiguar qué eventos elegirán el día del examen. Es natural que lleguen a algún tipo de consenso sobre sus 5 eventos muy pronto. Entonces algún idiota discutirá estos eventos por correo electrónico o chat grupal. Es el mismo tipo de mierda que ustedes harán en la clase D, ¿verdad?

—S-sí. También hemos tratado de encontrar un buen momento para discutir qué eventos deberíamos hacer.

—Ahí lo tienes. Aunque sus labios estén sellados, sus teléfonos quedarán indefensos. Después de todo, probablemente piensen que no hay forma de que alguien los husmee sin permiso. Y su política se solidificará a medida que se acerque el examen. Incluso podemos ser capaces de averiguar quién participará en cada evento.

—Es fácil de decir y todo eso, pero... ¿realmente va a ir tan bien?

—No confiaremos en la suerte, los guiaré a través de los detalles específicos. El trabajo preliminar de todo esto es la mierda que comenzaremos con ellos mañana. Además, tomaremos otras acciones aparte de robarles información. Como usar esto.

—¿Qué... es eso un laxante?

—Este es un laxante de acción lenta que empieza a hacer efecto después de 48 horas. Si podemos engañar a algunos de ellos para que tomen uno de estos, uno o dos podrían no sentirse tan bien el día del examen, ¿eh?

—T-tú. ¡Este tipo de mierda va contra las reglas! ¿Y si se sabe?

—¿A quién le importa una mierda?

—¡…!

—¿Realmente crees que soy el tipo de persona que se preocupa por algo así?

—Haa... Bien, ahora lo recuerdo. Que eres el tipo de persona que haría cualquier cosa para ganar.

—Si algo sucede, entonces yo asumiré toda la responsabilidad. Así de simple.

Independientemente de la pena que la escuela le imponga, Ryuuen no se preocupaba en lo más mínimo.

Aunque la clase termine sufriendo daños por ello, de todos modos sufrirían una aplastante derrota.

—Sólo se te ocurrió esto porque ya renunciaste a estar aquí desde antes...

—Anteriormente, cuando dijiste que dejaríamos la pelea como una carta de triunfo para más tarde, ¿significaba eso que estarías dispuesto a usar la fuerza si las cosas empeoran?

—Sí. Es bastante típico que estallen peleas entre mocosos por mierdas insignificantes. Tampoco sería tan malo que algunos de los que planean usar en sus eventos se pelearan con algunos de nuestros incompetentes compañeros de clase. De esa manera, podríamos tener una ventaja el día del examen, ¿verdad?

Ahora que se había decidido por ello, Ryuuen definitivamente no se relajaría con la clase B.

—Me convertiré en el comandante el día del examen. Será importante hacer que Ichinose pierda la calma.

—Eres brutal...

—Me lo tomaré como un cumplido. Démosles una muestra de lo que la clase D es capaz de hacer, ¿de acuerdo?

—¡¡¡S-sí!!!

—¿Qué clase de ruidos están haciendo?

Ibuki suspiró, exhausta por el escandaloso lío en que se había convertido todo esto.

Y aún así, descubrió que por alguna razón no lo odiaba, un sentimiento que le repugnaba.

—Pero... ¿Por qué haces esto, Ryuuen-san? No es sólo porque te compadezcas de nosotros, ¿verdad?

—Hm, ¿por qué, de hecho?

Ryuuen se recostó en el sofá y cerró los ojos. No tenía ningún apego particular a esta escuela. Al menos, ese fue el caso al principio, pero ahora que estaba aquí, algo en él había empezado a cambiar un poco.

Ayanokouji Kiyotaka. Desde que perdió con ese hombre, se sintió frustrado con la idea de dejar la escuela. Al convertirse en el comandante y ponerse en una situación en la que no podía mirar atrás, buscaba confirmar si esta frustración significaba o no que quería la revancha con Ayanokouji. Si realmente no tenía ningún apego particular, podía seleccionar gente al azar para los eventos y perder el examen a propósito.

Pero... si todavía se arrepentía... si sentía un verdadero y creciente deseo de volver a enfrentarse a Ayanokouji, encontraría una forma de sobrevivir. Quería saber con seguridad qué opción elegiría.











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